El golpe de Trump a China | El Nuevo Siglo
Foto archivo AFP
Lunes, 17 de Septiembre de 2018
Agence France Presse

El presidente estadounidense desafió todas las advertencias y escaló un peldaño en la confrontación comercial con Pekín este lunes, al anunciar nuevos aranceles a las importaciones desde China por 200.000 millones de dólares. 

Los nuevos aranceles entrarán en vigor el 24 de septiembre, dijo Trump en un comunicado. 

"Además, si China toma medidas de retaliación contra nuestros agricultores o contra otras industrias, vamos a seguir inmediatamente con la fase tres, con aranceles en aproximadamente 267.000 millones de dólares de importaciones adicionales", advirtió.  

Trump dijo que China se ha negado a cambiar prácticas comerciales injustas que perjudican a las empresas estadounidenses y a sus trabajadores. 

"Durante meses hemos urgido a que China cambie estas prácticas injustas y que dé un trato justo y recíproco a las empresas estadounidenses", dijo Trump en un comunicado. 

"Estas prácticas constituyen claramente una grave amenaza a la salud y prosperidad a largo plazo de la economía de Estados Unidos", dijo. 

Una vez que esta nueva serie de gravámenes entre en vigor el próximo 24 de septiembre, casi la mitad de los bienes que Estados Unidos compra a China estará sometido a aranceles correctivos.

Este último repertorio de importaciones va a ser sometido a aranceles de 10% hasta finales de año y después la tasa va a subir a 25%. 

Así, las empresas estadounidenses van a tener tiempo de encontrar nuevos proveedores. 

 

Se salvan los relojes inteligentes

Los nuevos aranceles tocarán a una amplia gama de productos, incluyendo a miles de millones de receptores digitales de voz, módulos de memoria informática, procesadores automáticos de datos y equipamiento de oficina como fotocopiadoras, lo que provocará un encarecimiento de una amplia gama de bienes. 

Sin embargo, fuentes oficiales dijeron a los periodistas que la lista inicial anunciada en julio fue recortada en 300 ítemes, tomando en cuenta los 6.000 mensajes enviados por consumidores y empresas.

Entre los productos excluidos de los nuevos aranceles figuran dispositivos electrónicos como relojes inteligentes y aparatos por bluetooth, productos para niños como las sillas de coche y los alzadores, así como algunos bienes relacionados con la salud como los cascos de bicicleta, los guantes de plástico y de caucho y el papel sanitario de uso hospitalario, indicaron las autoridades.

Pekín había anticipado que aplicaría represalias si Trump concretaba este plan, bajo el cual cerca de la mitad de las exportaciones chinas a Estados Unidos quedan bajo aranceles. 

"Si Estados Unidos adopta nuevas medidas sobre derechos aduaneros, China (...) tomará medidas de represalia para defender sus derechos e intereses legítimos", dijo este lunes Geng Shuang, portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores. 

La semana pasada Pekín dijo que celebraba la apertura de las autoridades estadounidenses y su disposición a recomenzar el diálogo, pero según la prensa, China cancelaría cualquier tipo de diálogo si los nuevos aranceles entran en vigor. 

 

'Tarifados' 

Trump ya había prometido al inicio de la jornada que habría "algunas noticias muy positivas" y dijo que habría "una gran cantidad de dinero que entrará a las arcas" estadounidenses. 

En un par de tuits, Trump defendió su combativa política comercial.

"Los aranceles colocaron a Estados Unidos en una posición de negociación muy fuerte, con miles de millones de dólares y trabajo fluyendo a nuestro país. Y aún así, el aumento de costos ha sido casi imperceptible", dijo Trump.

El presidente amenazó con aplicar tarifas punitivas contra todo país que no juegue limpio en el comercio con Estados Unidos.

Si los países no hacen tratos justos con nosotros, serán 'Tarifados'" afirmó.

Las autoridades han afirmado que el impacto de los aranceles ya vigentes sobre la economía estadounidense ha sido mínimo, varias empresas en todo el país han denunciado pérdidas, despidos y el riesgo de entrar en bancarrota por la subida de los costos y la caída de las exportaciones. 

Los plazos previstos en el anuncio darían a las empresas estadounidenses el tiempo para encontrar nuevos proveedores. 

Esto podría suavizar el golpe para los consumidores estadounidenses y para las empresas manufactureras, cuando se acercan las elecciones legislativas de noviembre en el país. 

Las presiones contra los aranceles crecen en Washington y las declaraciones de Trump han dejado a los candidatos republicanos en una posición incómoda frente a los comicios de medio mandato de noviembre, que se anuncian reñidos. 

La semana pasada, más de 80 grupos de presión del sector agrícola, industrial, tecnológico, de los servicios y de la distribución anunciaron el lanzamiento de una amplia campaña en contra de la política proteccionista de Trump. 

El banco central estadounidense dijo la semana pasada que la guerra comercial lanzada por Trump está presionando a las empresas estadounidenses y las está haciendo demorar o recortar sus planes de inversiones.