Extranjeros despedidos de tecnológicas en EE.UU. luchan por su visa | El Nuevo Siglo
LOS DESPIDOS en las tecnológicas preocupan debido a la fuga de cerebros para Canadá. /AFP
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Sábado, 11 de Febrero de 2023
Redacción Economía

Los trabajadores extranjeros despedidos de empresas tecnológicas en Estados Unidos, cuyos visados dependen de su empleo, están luchando por encontrar nuevos puestos para evitar verse obligados a desarraigar su vida y dejar el país.

Más de 150.000 empleos basados en Estados Unidos han desaparecido en los meses recientes, proporcionándole un golpe económico a Silicon Valley, que no se veía desde la burbuja del punto com que estalló a comienzos de la década de 2000.

Conforme la enorme ola de despidos se extiende entre las firmas tecnológicas de Estados Unidos, muchos de quienes se quedaron sin empleo permanecen en el país con visas H1-B u otras que están supeditadas a sus trabajos, según las congresistas Anna Eshoo y Zoe Lofgren, de California.

Ambas escribieron una carta instando a las autoridades migratorias estadounidenses a por lo menos duplicar el plazo de 60 días que les permite a los trabajadores extranjeros, portadores de visas de trabajo, conseguir nuevos empleos.

Sin un nuevo empleo en una compañía que les pueda conseguir una visa, los trabajadores despedidos tendrán que abandonar el país.

"Están entrando en pánico completamente", dice la abogada de inmigración Tahmina Watson, radicada en Seattle. "Están en una absoluta encrucijada porque no saben lo que van a hacer".

Según Eshoo y Lofgren, los trabajadores extranjeros representan casi un cuarto de la fuerza laboral en ciencia y tecnología en Estados Unidos.

Con frecuencia, los empleados de tecnología se han radicado y empezado una familia en Estados Unidos, señalaron a la AFP sus defensores.

"Ellos pasaron de ser familias con dos ingresos a ser familias sin ingresos, con hipotecas, matrimonios, pagos de vehículo y niños", dice Watson. "Sesenta días no es tiempo suficiente para solucionar tus asuntos; no es suficiente para encontrar otro trabajo y luego aplicar a otra visa H1-B".

La Fundación para Estudios de la India y la Diáspora India publicó una petición en el portal Change.org pidiéndole al presidente estadounidense, Joe Biden, extender el periodo de gracia de la visa por un año por razones humanitarias.

La petición ha conseguido más de 2.300 firmas desde el miércoles.

"Mi petición aquí es para que se aumente el periodo de gracia y los dejen resolver", dice el director de la fundación, Khanderao Kand.

Fuga de cerebros

La economía estadounidense se verá afectada si hay un éxodo de talentos tecnológicos migrantes, argumentan los defensores.

Más de la mitad de las compañías tecnológicas multimillonarias fueron fundadas por migrantes, escribieron Eshoo y Lofgren en su carta dirigida a los líderes del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos.

"Para garantizar que las compañías exitosas del futuro estén basadas en Estados Unidos, debemos prevenir que suceda esta fuga de cerebros", pide la carta.

Silicon Valley cuenta con muchos migrantes de China, Europa e India, muchos de los cuales no son solo empleados sino creadores de empleo, con empresas nacientes o capital inversionista, dice Kand a la AFP.

El talento obligado a dejar Estados Unidos, que de paso se va con sus familias y sueños, se radicará en otra parte y probablemente no volverá, advirtió.

Darle al talento migrante la oportunidad de quedarse podría derivar en que se impulse un boom de "start-ups", teniendo en cuenta que algunos de quienes fueron despedidos pueden emprender con su propia compañía, señala Watson.

El futuro

"Si perdemos este talento, creo que nos afectará en el futuro, porque estas personas se darán cuenta de que no le interesan a Estados Unidos", añadió el abogado.

Entre las tácticas que usan los nuevos desempleados está cambiar a visas de turismo, que les otorgan seis meses para encontrar trabajo o resolver trámites, según Watson.

"Si no encuentran otro trabajo, les da tiempo para vender su automóvil, terminar su contrato de arrendamiento, hacer lo que necesiten o intentar trámites para irse a Canadá. En tanto nosotros les cerramos las puertas a los migrantes, Canadá está haciendo lo contrario al acogerlos".



Mientras los recortes de los gigantes de la tecnología como Alphabet, Amazon y Microsoft ocupan los titulares, las empresas más jóvenes también están despidiendo gente, señala Reza Malekzadeh, presidente de French Tech San Francisco.

"Creo que culturalmente los europeos no están habituados a eso, especialmente los franceses, porque no están acostumbrados a que los despidan fácilmente", dijo Malekzadeh.

"Tratamos de ayudarnos. No he visto una gran ola (de migrantes) de regreso a Francia todavía; creo que todavía tienen esperanza".

Desempleo

De otra parte, en los últimos informes de desempleo, el mercado laboral superó todas las expectativas en enero en Estados Unidos y mostró una salud de hierro, a pesar de los temores de desaceleración económica y decenas de miles de despidos en el sector tecnológico, que no impidieron que el desempleo se ubique en mínimos desde 1969.

En el primer mes del año la mayor economía mundial creó 517.000 empleos, anunció el viernes el Departamento de Trabajo.

Es casi el doble que en diciembre, cuando se crearon 260.000 empleos, según datos revisados al alza y publicados también este viernes.

Los analistas esperaban prácticamente un tercio del resultado anunciado para enero: 187.000 nuevos puestos, según el consenso reunido por Briefing.com.

Con estos números, la tasa de desempleo, que se ubicaba desde hacía varios meses en su nivel previo a la pandemia (3,5 %), el más bajo en 50 años, cede todavía más, a 3,4 % de la población económicamente activa. Los especialistas esperaban una tasa de paro de 3,6 %.

"El aumento del empleo fue generalizado, en el sector del ocio y la hotelería, los servicios profesionales y comerciales y los cuidados de salud. El empleo también aumentó en el sector público, en parte por el retorno de trabajadores después de una huelga", detalla el Departamento de Trabajo en su comunicado.

El mercado del empleo parece tener una salud de hierro, a pesar del enfriamiento de la economía provocado por el incremento de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed, banco central), que trata de contener la inflación encareciendo el crédito y desalentando así el consumo y la inversión.

El miércoles, la encuesta mensual ADP/Stanford Lab había dado cuenta de un volumen de puestos creados en el sector privado en fuerte baja sobre diciembre, esencialmente por condiciones meteorológicas desfavorables, con inundaciones en California y nevadas en el centro y este del país.

Pero "vemos un mercado de trabajo todavía sólido fuera de las consecuencias de la meteorología", indicó la economista jefa de ADP, Nela Richardson, al publicar el informe.

Las tasas en aumento están teniendo, no obstante, un efecto sobre el alza de los salarios, que se modera.

Desde hace casi dos años, por la escasez de mano de obra, las empresas deben proponer salarios más altos para atraer o incluso retener a sus empleados, en plena escalada inflacionaria.

Los salarios más altos presionan al alza los precios en la economía.

La llamada "gran renuncia" vio como millones de personas dejaron sus empleos para buscar mejores condiciones en otras empresas.

Los despidos

En medio de estas dificultades de un mercado laboral bajo tensión, las empresas tratan de no despedir empleados que tuvieron dificultades para conseguir y que gastaron dinero en formar.

La excepción es el sector tecnológico que, luego de contratar masivamente desde que comenzó la pandemia por la mayor demanda de servicios en línea, da marcha atrás y anuncia despidos por miles, desde Alphabet a Amazon, pasando por Meta y Microsoft.

Otras empresas de otros rubros comienzan también a hacer anuncios de recortes de plantilla, como la firma de envíos FedEX o 3M, con mucha demanda por sus servicios y productos durante la pandemia, e incluso el banco de negocios Goldman Sachs.

A pesar de estas cifras muy altas de recortes de personal, "los despidos en su conjunto (...) son pocos y los que registramos en algunos sectores no se traducen aún en un aumento de nuevos pedidos de seguro de desempleo", remarcó el jueves Nancy Vanden Houten, economista de Oxford Economics.

Las inscripciones a estas ayudas por desempleo incluso bajaron la última semana de enero, a su menor nivel desde abril, según datos del Departamento de Trabajo.

Pero es cuestión de tiempo para que esto cambie, estima Ian Shepherdson, economista jefe de Pantheon Macroeconomics: "La tendencia es al alza (de los despidos) y las inscripciones (al seguro) continuarán". /AFP