Incertidumbre política y regulatoria de Colombia preocupa a la OCDE | El Nuevo Siglo
MATHIAS CORMANN, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). /AFP
Jueves, 2 de Mayo de 2024
Redacción Economía

EN SUS previsiones de mayo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), estima que la economía colombiana no subirá más de 1,2 % este año, debido al impacto de la incertidumbre política y regulatoria en sectores clave, los cambios administrativos que desaceleraron la cartera de proyectos de infraestructura y vivienda, y un alto costo del crédito.

Consultado por EL NUEVO SIGLO, el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, dijo que: “Las previsiones se redujeron un poco frente al estimativo anterior, que era del 1,4 %. Está en línea con el rango de pronósticos que tiene el mercado y los analistas, que está entre 1 y 1,5 %”.

Señala el analista del centro de pensamiento que “esto indica que luego del estancamiento observado en 2023 la economía tampoco va a despegar este año, con lo que seguramente continuaremos viendo un flojo desempeño en las cifras del mercado laboral”.

En su informe, la OCDE señala que “el PIB creció moderadamente, un 0,6 % en 2023, en parte debido a una necesaria normalización respecto del rápido ritmo de años anteriores. El consumo es un 20 % mayor que en 2019 y se mantiene resistente”.

Inversión

Por el contrario, la inversión se ha desplomado desde cerca del 23 % del PIB antes de la pandemia a menos del 18 % en 2023. Sostiene que el mercado laboral se ha deteriorado levemente en los últimos meses. La confianza de los consumidores y las empresas sigue siendo débil. La política monetaria restrictiva, con tipos oficiales en el 12,25 % en marzo, está contribuyendo a la desinflación, y la inflación general cayó al 7,4 % en marzo.

Asegura el organismo que los precios más bajos del petróleo han llevado a una moderación de las exportaciones y de los ingresos fiscales. La bienvenida y necesaria eliminación gradual de los subsidios al petróleo en 2023 desaceleró temporalmente la desinflación, pero eliminó las distorsiones y los riesgos de contingencias fiscales futuras.

Asimismo, el déficit de cuenta corriente se redujo a la mitad en 2023, lo que aumentó la resiliencia a las crisis externas. Las sequías causadas por El Niño han provocado niveles bajos de los embalses, lo que ha aumentado los riesgos de escasez de electricidad. En cambio, el impacto positivo previsto de El Niño en los precios de los alimentos no se ha materializado hasta el momento.

Las tasas

Por otra parte, la OCDE señala que “el Banco Central inició su ciclo de flexibilización en diciembre de 2023, recortando la tasa de política en un total de 100 puntos básicos desde entonces. Se prevé que los recortes de las tasas de interés oficiales continúen hasta 2025, y que las tasas reales vuelvan a una postura neutral a partir de mediados de 2025”.

En este mismo sentido, las autoridades planean un aumento del déficit fiscal general del 4,2 % del PIB en 2023 al 5,3 % en 2024, elevando la deuda pública neta del 53 % al 57 % del PIB, dentro de los límites de la regla fiscal.

Crecimiento

El análisis de la OCDE concluye que “se prevé que el crecimiento seguirá siendo modesto en 2024 y se fortalecerá en 2025. El consumo privado se mantendrá sólido, respaldado por la desinflación, la flexibilización de la política monetaria e importantes remesas. La inversión se recuperará a partir del segundo semestre de 2024 a medida que las condiciones financieras se relajen gradualmente, pero seguirán siendo moderadas.

Recomendación

Como sugerencia, sostiene que “es necesario mantener la consolidación fiscal y adherirse a las reglas fiscales para evitar el aumento de los niveles de deuda y abordar las preocupaciones de los inversionistas sobre la sostenibilidad fiscal”.

Insiste que “revitalizar la inversión es esencial no solo para el crecimiento a corto plazo, sino también para mejorar el potencial de crecimiento de Colombia, y es necesario para acelerar la convergencia del ingreso hacia los países avanzados y reducir la pobreza”.

Explican que “el éxito de los ambiciosos planes del gobierno para impulsar la productividad e iniciar la transición verde depende de la capacidad de atraer inversión privada. Un compromiso continuo y demostrado con el marco macroeconómico tradicionalmente sólido, incluido el cumplimiento de la regla fiscal, reduciría la incertidumbre política y respaldaría la recuperación de la inversión”.

Mundo y Argentina

Adicionalmente, la OCDE prevé un crecimiento estable del PIB mundial del 3,1 % en 2024, idéntico al 3,1 % registrado en 2023, y que irá seguido de un ligero repunte hasta el 3,2 % en 2025.

En la reunión, el organismo otorgó a Argentina la hoja de ruta que deberá implementar para integrar la Organización. La canciller argentina, Diana Mondino, recibió el documento de manos del secretario general de la OCDE, el australiano Mathias Cormann.

Invitó a Argentina a continuar con “la anunciada consolidación fiscal” y estima que “las reformas previstas para aliviar las cargas reglamentarias, mejorar el entorno empresarial y abrir la economía al comercio internacional contribuirán a frenar la pobreza”.