La inflación se convierte en el mayor riesgo para la economía | El Nuevo Siglo
LA FALTA DE suministros a nivel mundial está acelerando la inflación en todos los países, entre ellos a Colombia. /ENS
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Viernes, 12 de Noviembre de 2021
Redacción Economía

En un mundo globalizado en que todo se interconecta, y en el que cuando Estados Unidos o Europa estornudan sacuden a todos los países, no se debe perder de vista lo que está sucediendo con la inflación y Colombia no es la excepción.

La crisis de suministros está provocando un aumento en el valor de los alimentos y productos esenciales en la canasta básica y de otros elementos para el diario vivir de las familias. En Estados Unidos la inflación ya bordea el 6,2%, la mayor en 30 años y en la Zona Euro ya alcanza 4,1% en octubre, la más alta en cinco años.

Y en Colombia el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide la inflación, siguió hacia arriba. En octubre de este año, la inflación anual siguió acelerándose a 4,59%.

Los pronósticos de los analistas indican que este indicador va a sobrepasar el 5% en diciembre, con lo que va a cumplir el rumbo de la economía.

Este dato de inflación es importante para los colombianos ya que a partir de allí se marcan desde el aumento del salario mínimo hasta las alzas en los servicios públicos, el transporte, las tasas de interés, etc.

Por ejemplo, el día sin IVA del 28 de octubre y la temporada de descuentos que los comerciantes hicieron alrededor de este evento, explicaron la pausa en las presiones inflacionarias vistas en los meses pasados y que se vio reflejada en el dato mensual de 0,01%.

Pero esta exención tributaria temporal estuvo parcialmente compensada por las continuas presiones globales sobre los precios, en la medida en que la inflación de alimentos siguió siendo alta en octubre.

Los días sin IVA

La esperanza es que teniendo en cuenta que hay más días sin IVA en los dos últimos meses del año, la tendencia de aceleración del IPC debería ser más moderada que lo observado recientemente.

A pesar de esto, los investigadores esperan un pico de la inflación cercano al 5,3% para el término del primer trimestre del 2022.

Mientras que la distorsión del día sin IVA aumenta en cierta medida la incertidumbre de corto plazo sobre la tasa de política monetaria, los analistas del Bancolombia dicen que “consideramos que el Banco de la República continuará su ciclo de ajuste en los próximos meses, con un nuevo incremento de 50 puntos básicos en diciembre y llevarla a 3% y una tasa terminal de 4,50% en el tercer trimestre del 2022”.

Sin duda en octubre, el IPC permaneció relativamente estable, contrario a lo observado en los meses pasados, los cuales estuvieron marcados por fuertes sorpresas al alza en la inflación dadas las influencias hacia arriba de los bienes transables.

La inflación anual siguió acelerándose este mes, aunque a un ritmo significativamente más lento que en la historia reciente, debido a una muy baja base de comparación (inflación mensual de octubre de 2020 con -0,06%).

Esta extraña estabilidad del IPC en medio de la aceleración mundial de precios está explicada por el primero de los tres días sin IVA. Los comerciantes y las marcas están usando el feriado tributario para hacer descuentos en productos más allá de la exención del IVA y por más días que los decretados por el Gobierno, lo que aumenta la incertidumbre en el corto plazo de la dinámica del IPC.

Variaciones

Ahora este factor se agrega como un nuevo elemento de estacionalidad a ser considerado para pronosticar la inflación local (cabe recordar que el día sin IVA fue implementado inicialmente por el Gobierno actual el año pasado y que la reciente reforma tributaria incluía hasta tres días sin IVA por año desde 2021 en adelante).

Dado que esta exención tributaria va a ser llevada a cabo nuevamente en noviembre 21 y diciembre 21, los grupos más afectados por ello deberían permanecer relativamente sin cambios para fin de año, significando que las presiones al alza podrían acelerarse nuevamente en el primer trimestre de 2022.

Más allá de todo esto, hubo evidencia de las continuas presiones globales sobre los precios, pues la inflación de alimentos, la cual ha mostrado una fuerte sensibilidad al escenario externo (actualmente y durante choques pasados), siguió aumentando a un ritmo fuerte, avanzando 0,89% mensual. La medida anual se aceleró a 13,8% anual desde 12,4% en septiembre, un máximo de cinco años.


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De igual manera, el grupo de restaurantes mantuvo el ritmo observado durante lo corrido del año (+0,53%), presionado por los precios de los alimentos, algunos servicios públicos y el efecto de la reapertura, por lo que se aceleró a 7,5% anual, el nivel más alto desde mediados de 2017. Estos dos grupos representan el 24,5% de la canasta del IPC, lo que se traduce en que la volatilidad de la inflación debería permanecer alta en el corto plazo.

Además, el día sin IVA también distorsionó las medidas de inflación base, pues las tres métricas monitoreadas por el Banco de la República se ubicaron en terreno negativo por primera vez en 11 meses, promediando -0,16% mensual. Así, el avance anual de la inflación núcleo se mantiene cerca de la meta del banco central de 3% (2,86% anual desde 3,03% en septiembre), desacelerándose por segundo mes consecutivo.

Política monetaria

Sin embargo, los expertos creen que la dinámica de la inflación más sensible a los ciclos de demanda interna será un factor de suma importancia en los próximos meses, debido a su influencia en las decisiones de política monetaria del Emisor y a los efectos opuestos que enfrentará en los próximos meses.

Por un lado, la brecha del producto es probable que se cierre más rápido que lo esperado anteriormente, debido a una fuerte aceleración de la actividad económica observada recientemente, mientras que los mecanismos de indexación empezarán a activarse en niveles más altos el próximo año dado el observado incremento en el IPC anual, efectos que en su conjunto presionarán al alza la inflación total.

Los investigadores del Bancolombia dicen que “proyectamos todavía que el pico de la inflación se alcanzaría en marzo de 2022 y sería cercano al 5,3%. La velocidad de la desaceleración proyectada desde el segundo trimestre será de suma importancia para la política monetaria local y las dinámicas de las tasas de interés del mercado interno, luego de las continuas presiones alcistas sufridas por estas últimas a lo largo de todo el 2021”.

Su incidencia en el salario mínimo

Según la opinión de varios expertos, el panorama del salario mínimo de cara al 2022 se prestaría para que el incremento se fije entre el 6% y el 6,5%. Pero aquí la principal variable para ese aumento será la inflación.

"Dado que los niveles de precios van a crecer este año cerca de 5% y la productividad ha mantenido una senda creciente en lo corrido de 2021, la concertación del salario mínimo para 2022 se ubicará en niveles superiores a 6%, seguramente", aseguró Juan Camilo Pardo, analista económico de Corficolombiana.

De igual manera, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad El Bosque, Antonio González, sostuvo que el aumento del salario mínimo debería ser de cifras basadas en los porcentajes de inflación que presente el país, o incluso mayores, pues de lo contrario afectaría la economía de los ciudadanos. "Normalmente dicho aumento en el salario mínimo debería ser al menos igual a la inflación, y en ocasiones incluso superior, pues de no ser así, las personas que tienen esta remuneración estarían perdiendo poder adquisitivo, al encarecerse los productos de la canasta básica de consumo a un ritmo mayor de lo que se incrementarían los ingresos obtenidos por dicho salario", expuso González.

En ese sentido, si se llegara a dar el escenario previsto por los analistas y el salario mínimo llegara a aumentar entre el 6% y el 6,5%, los colombianos pasarían de cobrar los $908.526 actuales, a cifras entre los $963.038 y $967.580, proyectando un aumento de entre $54.512 y $59.054 para el próximo año.