COMO SI no fuera suficiente con el cúmulo de problemas que actualmente tiene el país con la crisis energética, en las últimas horas el Gobierno le añadió otro dardo. Incluyó en el proyecto de reforma tributaria, una medida que complica la situación al establecer un aumento en el impuesto al carbono, del 25% al 75%.
El presidente de la Asociación Nacional de Generadoras (Andeg), Alejandro Castañeda, dijo a EL NUEVO SIGLO, que este elemento complica todo porque puede hacer que se incrementen las tarifas de los combustibles, desde el gas hasta el ACPM. Además, se mostró preocupado por la transición energética y la situación actual de los embalses que puede llevar a la suspensión del servicio de electricidad en algunas regiones.
Más tributos
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué impacto puede dejar el proyecto de reforma tributaria para el sector energético, en el que se establecen más impuestos al carbón?
ALEJANDRO CASTAÑEDA: De darse el aumento tanto de la base con la cual se va a cobrar el impuesto al carbón y eliminarse la transición que se tenía del 25% al 75% del cobro por toneladas de CO2 emitida, el efecto para el usuario va a ser alto desde el lado eléctrico, con un aumento de $80 por kilovatio-hora, lo que representará un impacto sobre la demanda eléctrica cercano a los $4,5 billones al año. Es complicado la crisis energética.
ENS: ¿Qué otros efectos tienen ese impuesto?
AC: Además de impactar el empleo de la pequeña minería, el impuesto al carbono generaría un aumento de las tarifas de electricidad para todos los usuarios del Sistema Interconectado Nacional (SIN), así como en el ya deficitario fondo de subsidios del sector eléctrico, dado que se incrementaría la apropiación anual del Gobierno nacional en el presupuesto en cerca de $1 billón para financiar los subsidios que otorga el Estado a los usuarios de menores ingresos. Se proyecta un efecto neto negativo para la sociedad del orden de $4,8 billones al año, ya que con la nueva propuesta se recaudarían solo $700.000 millones, mientras que el costo de la medida para el país sería de $5,5 billones.
Entonces no estamos haciendo nada con el impuesto al carbono, eso lo que va a generar son costos a los usuarios del país, no solamente en energía, sino también en gasolina, en diésel, pagando casi $450 más por galón. Es un golpe muy fuerte para la economía en un momento en el cual necesitamos tener costos de producción bajos para poder tener una reactivación económica adecuada.
La transición
ENS: ¿Cómo va la transición energética que emprendió este Gobierno?, ¿vamos atrasados?
AC: El nivel de reservas ya es crítico. En exploración estamos quedados y ya vimos lo que sucedió con Uchuva, en donde el Gobierno tiene mucha expectativa de poder adicionar más reservas con ese pozo. Lo que estamos viendo es que tenemos muchos problemas en la entrada de proyectos, a la par con el aumento de conflictividad social con el licenciamiento de áreas. Nos estamos quedando sin poder entrar nuevos proyectos de generación.
En general mi percepción frente al tema transición energética del Gobierno es que hay que hacerla, pero tiene que ser al ritmo nuestro, del país, no podemos desprendernos de los combustibles fósiles de la noche a la mañana y creo que ningún país en el mundo lo ha hecho, eso es imposible, entonces hay que tener una gradualidad en la toma de decisiones, porque si no vamos a terminar pagando las consecuencias por el lado de los usuarios, sin tener disponibilidad ni de combustible ni de energía.
ENS: ¿Ha hecho caso el Gobierno de las peticiones de los gremios de no dejar perder los recursos de los combustibles fósiles?
AC: Lo que hay que adoptar es continuar con la firma de contratos de exploración y producción de petróleo y el Gobierno ha dicho que eso no va a suceder. Y eso no lo entendemos, porque hay que tomar decisiones coherentes para que esto funcione y que el usuario no se vea afectado en esta transición. Pero en eso hay muchos temas, por ejemplo, ¿cómo voy a apalancar una transición si no tengo los ingresos que me dejan los combustibles, sin los ingresos de las regalías del petróleo, del carbón?
Un estudio de Fedesarrollo de hace año y medio dijo que, para reemplazar las plantas térmicas, se necesitan más o menos $168 billones en inversión de generación. Esas son más o menos unas 8 reformas tributarias como la de 2022 y eso tiene que pagarlo alguien. Entonces si lo hacemos de forma acelerada la transición, el usuario es el que va a terminar pagando en la factura esos mayores costos.
Los embalses
ENS: ¿Cuál cree que es la situación con los embalses con la generación de energía?
AC: Lo que se esperaba era que comenzaran las lluvias desde mitad de año con la entrada del fenómeno de La Niña y la verdad es que hoy no se ha dado en un porcentaje alto. Estamos teniendo lluvias que no están llenando los embalses, que están entre 50% y 55% de lo que históricamente deben tener para septiembre. Hoy estamos generando más con generación térmica, estamos produciendo casi el 35% de lo que consumimos en el país con generación térmica y adicionalmente se debe tener en cuenta la generación térmica que se le está exportando a Ecuador.
Hasta ahora Colombia sigue exportando a Ecuador entonces lo que estamos haciendo es generando más con generación térmica para poder mantener el embalse y recuperarlo de aquí al mes de diciembre y llegar a niveles del 65%, que es más o menos con lo que estaríamos tranquilos para enfrentar el verano que se nos viene.
La opción tarifaria
ENS: ¿Qué ha pasado con la opción tarifaria?
AC: Los usuarios de Air-e ya han pagado esa opción tarifaria, en enero ya estaban terminando los pagos, y lo que se ha propuesto, por ejemplo, el gobernador Eduardo Verano y creo que el presidente ya lo acogió, es que esos recursos que tenía destinados el Gobierno para disminuir la tarifa en opción tarifaria, se destinen a disminuir pérdidas. Lo que se requiere es que el flujo de pagos continúe, no podemos dejar de pagar, esa es una cadena. Pues aquí estamos complicados todos y ahí sí el usuario de todo el país, es el que estaría enredado desde el punto de vista financiero con un apagón, pero ya desde el punto de vista financiero.
ENS: Actualmente, ¿en cuánto está colgado el Gobierno en esos pagos?
AC: Actualmente los subsidios se le están debiendo a los distribuidores y comercializadores $1,3 millones, no se pagan subsidios desde el mes de abril de las empresas y eso sucedió ya las empresas los otorgaron, entonces imagínense la presión de caja que tienen estas empresas, eso es lo que hay que insistirle al Gobierno, hay que seguirle pagando a las empresas que ya entregaron el subsidio, sino la cuerda se revienta.
Nada de atención
ENS: ¿Qué receptividad hay en el Ministerio de Minas o en el Gobierno para agilizar un poco esos pagos?
AC: Ellos dicen que el Gobierno tiene un problema de caja, que el recaudo está caído, entonces tienen un problema de caja. Pero nos están diciendo que si le van a dar prioridad al tema de subsidio y por eso esperamos que se pongan al día. Pero el otro mensaje en subsidios es que están desfinanciados en el presupuesto que se presentó, en $2 billones, es decir para el 2025 hay un faltante de $2 billones, eso lo sabe el Gobierno porque se lo hemos dicho.
ENS: ¿Cree que vamos a terminar el año mejorando este tipo de situaciones en el sector energético?
AC: Lo que dice el IDEAM es que van a llegar las lluvias en los meses de octubre y noviembre, se van a recuperar los embalses y con eso se bajaría la presión desde el punto de vista de precios en la bolsa, pero también esperamos que el gobierno mejore los desembolsos hacia la cadena y pasemos este momento de estrés.