El presidente Iván Duque dijo que este tema ha suscitado tensión “y el Gobierno no puede taparse los oídos”

Un consenso entre los ponentes del proyecto de reforma tributaria para no gravar los productos de la canasta familiar, se abrió paso ayer en reuniones que tuvo el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, con las diferentes bancadas del Congreso. Varios parlamentarios señalaron que es inoportuno extender a más productos el cobro del Impuesto de Valor Agregado (IVA).

A su vez, Carrasquilla sugirió que a 28 productos no se les imponga el gravamen. Entre estos están el pan, la panela, el trigo, la leche, los tubérculos y el garbanzo. Esta medida supondría un sacrificio en los recursos de $8,7 billones que tendrán que salir de otro lado para compensar el objetivo de recaudar $14 billones que es el faltante en el Presupuesto General para 2019.

Esta iniciativa del Ministro surgió de la reunión que tuvo durante el fin de semana con su equipo económico, así como con el director de la DIAN, Juan Andrés Romero.

Los funcionarios analizaron, por pedido del presidente Iván Duque, todo el contenido de la ley de financiamiento y en dónde es que pueden sacrificar algunos recursos que deberán salir de otros rubros del mismo proyecto.

Opciones

Se conoció que otra de las opciones que se analizaron es la extensión del IVA a las actividades que están relacionadas con la Economía Naranja, es decir, todas las industrias creativas, petición que ha hecho en varias ocasiones el presidente Iván Duque.

Al mismo tiempo se estudió una propuesta del presidente de la Cámara de Representantes, Alejandro Chacón, y es que el sector corporativo pague una tarifa plena y no descuente el IVA a los usuarios por el producto final, con lo que se podría recaudar cerca de $20 billones anualmente.

También se evalúa gravar las remesas que las empresas y multinacionales reciben, con lo que la Nación lograría recaudar cerca de $5 billones anualmente. También se estudió incrementar los impuestos al Gravamen a los Movimientos Financieros (GMF), también conocido como el 4 por 1.000, que realizan los colombianos. Asimismo en la carpeta del Gobierno figura incrementar los impuestos a las bebidas azucaradas, medida que permitiría recaudar parte del faltante del Presupuesto General de Nación para el próximo año.

Exenciones

En este mismo sentido, ayer se conoció una propuesta de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), que pide extender el régimen de exentos a todos los alimentos de la canasta familiar, es decir, que se les devuelva el IVA a los productores para que no se terminen alterando los precios para el consumidor.

El presidente de la SAC, Jorge Enrique Bedoya, expuso que “esto significará para el consumidor que no se gravaría la comida y para el productor implicaría la formalización de las actividades productivas que hoy por hoy están en el régimen de excluidos no lo tienen totalmente”.

Con esta propuesta, el Gobierno tendría la posibilidad de hacerle seguimiento a todos los productores y empresarios, “de tal suerte que al final también contribuya al recaudo del impuesto de renta”, apuntó Bedoya.

Es de mencionar que el régimen de exentos es el que tiene tarifa en cero, mientras que el de excluidos no tiene tarifa.

La propuesta de la Sociedad de Agricultores de Colombia, se produjo luego de las declaraciones del presidente Iván Duque, quien reveló que solicitó al Ministro de Hacienda contemplar la posibilidad de excluir del IVA los productos básicos de la canasta familiar. 

Según el Presidente de la SAC la diferencia radica en que cuando hay un régimen de exentos los insumos que se utilizan en el proceso de producción, que estén gravados con una tarifa del 18% no se convierten en mayor costo porque al final la DIAN debe hacer una devolución del IVA al productor.

Aunque en el régimen de excluidos al consumidor no paga la tarifa, los insumos sí y esta carga se va a un mayor costo y por ende puede tener un impacto en el precio al consumidor final.

Cabe mencionar que el equipo económico del Gobierno está estudiando alternativas para evitar que los productos de la canasta familiar sean gravados con la ley de financiamiento que se discute en el Congreso.

Esta semana podría quedar definido si esta propuesta será incluida o no en la reforma tributaria, luego de que los ponentes del proyecto sostengan varias reuniones que tienen programadas con el Ministro de Hacienda.

La solución

Ayer el presidente Iván Duque recalcó que encontró un presupuesto desfinanciado y que faltan recursos para darle vida a algunos programas sociales e invitó al Congreso a ser parte de la solución para encontrar la manera de continuar con los mismos. El Mandatario subrayó que “no tiene sentido, en la sociedad colombiana, que por cada 100 pesos que se gaste en mercado, el Estado nos dé 27 pesos, y a las personas más vulnerables solo les dé 7 pesos”.

Por eso, insistió, en corregir esta situación es vital. “Antes de que haya alguna reforma, el 53% de la canasta familiar tiene un IVA del 19%, y lo que nosotros queremos es devolverle ese 100% del IVA a los más pobres, a unas 4 millones de familias, lo que equivale a unos 16 millones de colombianos”, indicó.

Frente a la posibilidad de que se tenga que ir en contra de la Regla Fiscal, para cubrir el déficit que tiene el Presupuesto para 2019, el Jefe de Estado recalcó que “hemos dicho que estamos en la senda de cumplir la Regla Fiscal, pero en esa senda también con la premisa de que no podemos desfallecer en lo social”.

“El tema del IVA ha suscitado una tensión y el Gobierno no puede taparse los oídos. El Gobierno tiene que escuchar a todos los sectores y tenemos que buscar una opción que nos permita conseguir los recursos”, indicó.

Con respecto a la renta, el Presidente reiteró que “a la clase media no se le va a tocar el impuesto de renta. Quien hoy declara y no paga, no va a pagar. Quien hoy paga, hasta las personas que tienen ingresos de $35 millones mensuales, no va a pagar más”.

Programas sociales

Asimismo indicó que le está haciendo seguimiento a la búsqueda de alternativas para obtener recursos que cubran los programas sociales, y permitan mantener los subsidios de energía a más de 11,3 millones de hogares de los estratos uno, dos y tres y el subsidio de gas a 5,7 millones de hogares.

“Cuando nosotros llegamos encontramos un presupuesto desfinanciado por $14 billones, y esto se discutió frente al Congreso. El  Congreso mismo se dio cuenta del problema tan grande de tener desfinanciados los subsidios de energía. Usted sabe lo que sería no tener ese subsidio, en el marco de un fenómeno del Niño que está por empezar, en término de tarifas”, puntualizó el Presidente.