CUANDO LOS mercados ya apostaban que este año no habría una rebaja de intereses, el Banco de la República sorprendió y en su última reunión del año decidió bajar las tasas de 13,25% a 13%.

Esta decisión mandó un mensaje de optimismo a los mercados, pero a la vez de incertidumbre debido a que el alivio puede incrementarse o revertirse de acuerdo al comportamiento de la inflación y de un cambio en el crecimiento de la economía.

El economista Alejandro Reyes, del BBVA, dijo que “en los 24 años del esquema de inflación objetivo, la decisión de este mes se encuentra entre las más complejas y difíciles. Al Emisor todavía lo despierta en la noche la alta inflación y, más que eso, la singular incertidumbre sobre la misma, lo que hace que la decisión tome un mayor valor. Pero también observan una economía que viene a menos, con quizás el desequilibrio más marcado en mucho tiempo entre consumo e inversión. Una posición en la que no quisiera estar, pero que se zanjó a favor de un inicio del ciclo de reducciones, apenas asomando la cabeza con una rebaja tímida de 25pb. Aunque, no le quitemos el mérito, ¡es una rebaja!”.

Inflación

Señala que “hacia delante, seguramente la inflación continuará cediendo, ampliando ese diferencial con la tasa de interés, lo que presionará al Emisor a acelerar el paso en las reducciones de las tasas. La actividad económica permanecerá débil. El mismo BanRep estima un menor crecimiento en 2024 que en 2023 y, si bien otros apuntamos a una ligera recuperación, ésta es muy tenue y con cada nuevo dato se reducen las previsiones de crecimiento para 2024”.

Considera el experto que “creemos que el nuevo balance en la Junta es una señal clara de inicio del ciclo bajista, uno que, si los datos lo apoyan, como creemos, llevará a reducciones importantes de las tasas en 2024. No creemos que haya una disyuntiva entre controlar la inflación e impulsar el crecimiento, pero si consideramos que se pueden lograr los dos objetivos con rebajas de tasas, conforme la inflación siga cediendo y la actividad demande mayor apoyo”.

“Yo creo que si la inflación sigue para abajo las reducciones en algunos meses serán superiores a los 25 puntos, eso lo veremos para reducir ese 8% o 9% se requieren varias reducciones ya algunos un poco más de 25 puntos”, agregó el exministro.

Más bajos

Según la Encuesta mensual de expectativas de analistas económicos (EME) realizada por el Banco de la República, este porcentaje continuaría en disminución durante el año 2024.

En los resultados de la misma, se revela que el indicador de las tasas iniciaría el próximo año cerca del 12,5%, al menos en el primer trimestre del año.

De acuerdo a las expectativas de los analistas, la disminución de tasas empezaría en el mes de febrero. Sin embargo, desde marzo el ajuste sería más significativo, bajando del 12% para entrar en el margen de 11,5% en abril.

Se estima que, para el cierre del mes de octubre, las tasas de interés quedarían en un 9%, de no existir mayores variaciones en los datos de inflación en 2024.

Felipe Campos, gerente de Inversión y Estrategia en Alianza Valores y Fiduciaria, está de acuerdo en que la reducción de las tasas continúe.

Campos asegura que esta disminución constante del porcentaje tendrá un efecto de crecimiento económico en Colombia, el cual se observaría en el tercer trimestre de 2024, después de ocho meses de una constante reducción de las tasas por parte del Banco de la República.

Según los analistas de la EME, es posible que al terminar el año 2024, se llegue al 8,5% en las tasas de interés.