Aunque todavía en el país hay cerca de 3,8 millones de desempleados y alta informalidad, en el quinto mes del año se observó una mejoría del mercado laboral. Ante esta situación, EL NUEVO SIGLO auscultó los aspectos más positivos del reporte del DANE.

1.- Bajó la tasa anual

En mayo, la tasa de desempleo nacional se ubicó en 15,6%. Con relación a l mismo mes del 2020, el dato mejoró notablemente, ya que el porcentaje de desempleo en el quinto mes del año pasado fue de 21,4%. No obstante, en relación a 2019, subió más de 5 puntos porcentuales: hace dos años el dato fue de 10,5%. Ahora bien, este ligero incremento en la incidencia del desempleo no fue resultado de una caída en la ocupación, sino de un importante avance de la participación laboral. En este mes se recuperó casi el 80% del retroceso que tuvo la población activa en abril a raíz del inicio de la tercera ola de contagios y la reimposición de restricciones a la movilidad en muchas de las grandes urbes del país.

Asimismo, en mayo de 2021, la tasa de desempleo en el total de las 13 ciudades y áreas metropolitanas fue 16,6%, lo que significó una disminución de 7,9 puntos porcentuales comparado a este mes de 2020 (24,5%). Finalmente, la tasa de ocupación se ubicó en 53,1%, lo que significó un aumento de 8,1 puntos porcentuales respecto a mayo de 2020 (45,0%).

2. Mejoró la ocupación

Al cierre del quinto mes del año, el número total de desempleados en Colombia fue de 3,79 millones, 900.000 menos que los registrados en el mismo mes del año pasado, pero 1,2 millones más que las registradas en mayo del 2019 (antes de la llegada de la pandemia). En cuanto a población en condición de ocupación en el país, fue de 20,5 millones de personas, 3,2 millones más que en el 2020, pero 1,7 millones menos que en 2019.

El crecimiento de la población ocupada, entre mayo de 2021 y mayo del 2020, fue del 18,6%. Con relación a 2019, hay una contracción del -7,7 %. El director del DANE, Juan Daniel Oviedo, dijo que “si bien Colombia ha recuperado a 3,2 millones de personas de la población ocupada a mayo de 2021 en comparación con el mismo mes de 2020, aún tenemos 1,6 millones de personas ocupadas menos″.

La recuperación de la ocupación en mayo equivalió a apenas poco más de un 40% del retroceso que se registró en abril (a partir de la serie con ajuste estacional). Esto sería resultado del contexto del mes, en que la situación social, la incertidumbre fiscal, la afectación de las cadenas logísticas del país y la acentuada extensión temporal del tercer pico de la pandemia continuaron afectando la dinámica de la actividad productiva. No obstante, el resultado implicó una sorpresa positiva frente a las expectativas, en la medida en que se esperaba un deterioro de la ocupación frente a abril dada la magnitud de la situación observada.

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3.- Los contrastes

Desde el punto de vista sectorial, en el contexto del mes pasado se hicieron palpable los contrastes. Las actividades de servicios de alojamiento y comidas y los servicios profesionales y administrativos fueron los que sufrieron retrocesos mensuales en su ocupación acentuados (-6,7% y -5,8%, en las series con ajuste estacional). En cambio, el grupo de otros sectores (servicios públicos, minería, información y comunicaciones, actividades inmobiliarias y financieras) creció mensualmente en su ocupación en 10,5%, la recreación y servicios a hogares como empleadores en 7,3%, el transporte en 2,8% y el comercio en 2,8%. En el neto, estos contrastes habrían permitido el incremento mensual de 1,4% en la ocupación total, y serían resultado de la moderación de las restricciones a la movilidad de abril frente a la situación de orden público.

Al mirar el comportamiento del desempleo por sectores, el mayor número de desocupados se ubicó en los sectores de comercio y reparación de vehículos (620.000), construcción (405.000), y administración pública, defensa y educación (389.000).

4.- Bajó desempleo urbano

A nivel urbano, la participación retrocedió mientras la ocupación se recuperó. Así pues, el impacto de las movilizaciones sociales en las grandes urbes se hizo palpable en el mercado laboral a través de una caída adicional en la población activa. El resultado natural de una menor participación frente al fortalecimiento de la demanda por trabajo implicó que la tasa de desempleo de las 13 principales áreas metropolitanas cayó mensualmente en 0,6 puntos. Con esto, la tasa de desempleo urbana fue de 16,6%, muy por debajo de nuestra expectativa (18,2%).

Por ciudades, Riohacha fue la que terminó mayo con el desempleo más alto al registrar un 21,2%, seguida por Quibdó con 20,7%, Cali con 20% y Neiva con 19,9%. En contraste, las ciudades que registraron el desempleo más bajo fueron Barranquilla con 10,7%, seguida por Cartagena con 10,8%, Pasto con 13,8% y Bucaramanga con 14,1%.

5.- Disminuyó la brecha de género

En cuanto a la recuperación de empleos, por cada 4 hombres que volvieron a trabajar, 3 mujeres hicieron lo propio. Sin embargo, con relación a los 1,7 millones de empleos que hacen falta con respecto a 2019, el DANE aclaró que por cada 3 hombres que se quedaron sin empleo, a 7 mujeres les pasó lo mismo.
 “En mayo estamos viendo que por cada cuatro hombres que recuperan su puesto de trabajo, aproximadamente tres mujeres lo hicieron. Eso es alentador desde el punto de vista de la equidad de género y la estrategia de reactivación”, resaltó Oviedo.

Pese a que en mayo se logró reducir un poco la inequidad de género en el mercado laboral, el DANE cree que es fundamental que se sigan implementando medidas con enfoque de género para recuperar el empleo formal en las mujeres.

Las cifras reflejan que el desempleo de los hombres en mayo de 2021 fue de 13%, mientras que el de mujeres fue de 19,4%, bajando la brecha a 6,4 puntos porcentuales, cuando meses atrás superaba los siete puntos porcentuales.

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6.- La informalidad

En cuanto a la informalidad laboral, esta se ubicó en el 48,3% durante mayo de este año, cuando un año atrás era del 46,8%. La mayor tasa se presentó en Cúcuta con 69,1%, mientras que en Riohacha fue de 66,9%, en Sincelejo fue del 65,6% y en Santa Marta del 65%. De otro lado, Manizales fue la ciudad con la menor tasa de informalidad con el 40,3%, seguida por Medellín con el 41,7% y Bogotá con el 41,8%.

Para combatir y disminuir esta informalidad, el Gobierno instaló una Misión de Empleo que se espera que dé recomendaciones para sacar adelante una reforma laboral que ayude a impulsar a las empresas y a los trabajadores a la formalidad.

Sin embargo, el difícil ambiente social y la impopularidad del Gobierno impedirían que esta reforma laboral se presente antes de que termine el mandato del presidente Duque en 2022.

Algunas de las recomendaciones que se han hecho por parte de expertos y de entidades multilaterales como la Ocde para combatir esta informalidad es modificar el salario mínimo y eliminar los pagos que hacen las empresas extrasalariales, como los aportes a las cajas de compensación.

Mejoran perspectivas

De cara a los próximos meses, lo razonable es esperar que el mercado laboral retome una senda de recuperación generalizada más decidida. Esto sería posible porque desde inicio de junio los gobiernos municipales levantaron de forma más contundente las restricciones a la movilidad aún vigentes en mayo, lo que daría un impulso general a la actividad productiva. Además, en las últimas semanas se ha normalizado parcialmente la situación de orden público urbana y nacional, lo que también tendría efectos favorables en ese proceso de recuperación.