Para la modalidad de crédito de consumo y ordinario, la tasa de usura de julio se ubicó en 30,05%, informó este jueves la Superintendencia Financiera.
Esta cifra representa una reducción de 0,37% frente a la que se encuentra en vigencia.
A partir del 1 de julio, las entidades financieras o cualquier ciudadano que cobren intereses por encima del valor establecido incurrirán en el delito de usura.
La nueva tasa tendrá efectos hacia el futuro y aplicará igualmente en las ventas del comercio a plazos y por supuesto, en las compras con tarjetas de crédito y en el cobro de intereses de mora.