UN FUERTE agarrón entre el exministro de Salud y Educación Alejandro Gaviria y el presidente de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), Daniel Rojas, se vivió ayer por X.

Por una parte, el exfuncionario mencionó en un trino titulado ‘El antiplán de desarrollo (cosas que no van a pasar)’ la construcción de 50 universidades públicas en zonas rurales durante este Gobierno.

La publicación generó la respuesta de Rojas, quien aseguró que “la expansión de la universidad pública pudo haberse iniciado en el primer año de gobierno si usted, siendo ministro de Educación, no hubiera desviado el presupuesto que el presidente ordenó se destinara para ese propósito. Su decisión saboteó el programa de gobierno”.

Inmediatamente, Gaviria replicó tildando de mentiroso al presidente de la SAE. “Nunca desvié el presupuesto de gobierno. Los recursos fueron a infraestructura y a cumplir los compromisos constitucionales y legales del Estado colombiano. Yo no podía incumplir la Constitución y la ley”.

Rojas no se quedó tranquilo y, en un nuevo trino, manifestó: “Lo que usted llama compromisos constitucionales no es otra cosa que deudas heredadas del Gobierno pasado. La instrucción del presidente fue honrarlas desde otro origen y priorizar los recursos que él consiguió con la reforma tributaria para sedes universitarias. Al desobedecer, usted no solo saboteó el programa de gobierno, sino que además les incumplió a miles de jóvenes”.

Nuevamente, Gaviria toma la palabra: “Cuando yo salí del Gobierno ni siquiera había sido presentada al Congreso la adición presupuestal que incorporaría los recursos de la reforma tributaria. Ya no saben qué inventar para justificar la ineficacia y la incapacidad de gestión”.