El Athletic de Bilbao ganó este sábado la Copa del Rey al imponerse 4-2 en la tanda de penales al Mallorca, en una final que finalizó 1-1 en los noventa minutos reglamentarios y la prórroga en el estadio sevillano de La Cartuja.

Un zarpazo de Dani Rodriguez (21) adelantó al Mallorca, pero Oihan Sancet igualó con un disparo cruzado (50), mandando el partido a la prórroga, tras la cual los fallos de Manuel Morlanes y Nemanja Radonjic en los penales dieron a los vascos la 24ª Copa del Rey de su historia.

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Álex Berenguer marcó el penal definitivo para el Athletic Club, que terminó con una sequía de cuarenta años desde que en 1984 alzara por última vez el trofeo.

Segundo equipo que más veces ha ganado la Copa del Rey, sólo superado por el Barcelona (31), el Athletic acabó este sábado con sus fantasmas, frente a un Mallorca que buscaba la segunda Copa de su historia tras la que ganó en 2003 contra el Recreativo de Huelva.

El Mallorca no pudo culminar su gesta aunque en la primera parte anuló a un Athletic, que pareció sufrir la presión de verse como favorito en busca de un trofeo que había rozado en seis finales desde la última vez que alzó la Copa.

Impreciso de entrada

En un estadio de La Cartuja lleno prácticamente en sus tres cuartas partes por aficionados del Athletic, los hombres de Ernesto Valverde tuvieron el control del balón, pero se mostraron muy imprecisos antes despertar tras el descanso.

Íñigo Ruiz de Galarreta probó pronto con un disparo lejano que despejó a córner el portero del Mallorca Dominik Greif (16).

El Mallorca respondió tras un error de Nico Williams, que dejó el balón a Vedat Muriqi para que el kosovar del Mallorca soltará un disparo secó que despejo el meta Agirrezabala (19).

Frente a las imprecisiones del Athletic, el Mallorca tenía claro su plan, ordenado y cerrado atrás para salir al contraataque aprovechando la velocidad de sus hombres de ataque.

Los hombres del 'Vasco' Aguirre aprovecharon su mejor momento de juego para adelantarse en el marcador con un disparo de Dani Rodríguez tras recoger un rechace de Agirrezabala a tiro de Sergi Darder (21).

El gol cayó como un jarro de agua fría sobre los 'Leones' que volvían a ver surgir sus fantasmas coperos.

Incapaces de superar la defensa mallorqunista, Guruzeta probó suerte con un disparo lejano ajustado al palo detenido por Greif (31), que sostuvo a su equipo en varios momentos del partido.

Cerca del descanso, Nico Williams, al que le habían anulado un gol por fuera de juego, logró llegar casi hasta la línea de gol sólo para disparar al lateral de la red solo ante el portero rival (45).

Sancet equilibra

El impreciso y desacertado Athletic se transformó tras la pausa, aunque se llevó el primer susto cuando Agirrezabala le ganó un mano a mano al delantero canadiense del Mallorca Cyle Larin (46).

El Athletic tomó las riendas del encuentro, progresando por las bandas con los hermanos Williams, muy grises durante los primeros 45 minutos.

Nico Williams llegó por la izquierda para filtrar un balón al área donde apareció Oiahan Sancet para hacer el 1-1 (50).

El tanto dio alas al Athletic que empezó a vivir en campo contrario frente a un Mallorca, encerrado atrás que sólo buscaba el contragolpe o la jugada de estrategia para llevar peligro.

Las ocasiones para los vascos se fueron sucediendo con un remate flojo de Iñaki Williams (63) o Yuri Berchiche (78).

Prácticamente sobre la campana, Dani Vivian soltó un disparo desde la frontal que sacó con dificultades Greif (90+3) enviando el partido a la prórroga.

En el tiempo añadido, Agirrezabala salvó al Athletic Club en un remate de cabeza de Muriqi (114) para llegar a los penales, donde el Athletic estuvo más acertado.