¿Alcanzará el peso de EE.UU. para habilitar a candidatos venezolanos? | El Nuevo Siglo
Foto: AFP.
Lunes, 23 de Octubre de 2023
Redacción internacional

SORPRESIVAMENTE y en tiempo récord, Estados Unidos logró reactivar el diálogo entre el régimen venezolano y la Plataforma Unitaria opositora del que en pocas horas salió un acuerdo político que puso en evidencia el peso de Washington. La duda es si el mismo alcanzará para que forzar el retorno de la democracia, que indefectiblemente pasa por la rehabilitación de los líderes opositores.

Levantamiento parcial de las sanciones económicas que asfixiaban al régimen (petróleo, gas y oro), convocatoria a elecciones presidenciales en segundo semestre del 2024 con presencia de observadores internacionales, la repatriación de venezolanos y la posibilidad de prolongar el comercio autorizado si se cumplen las expectativas contempla el acuerdo.

Ese inesperado entendimiento fue saludado por Maduro como un ‘pasar la página para reconstruir una relación de respeto y cooperación’ con Estados Unidos y por el presidente Biden como un paso decisivo para que se restaure la democracia en el país andino “para que los venezolanos puedan reconstruir sus vidas en su país”.

Coincidencia o una jugada de alta conveniencia política para el régimen venezolano el acuerdo fue suscrito hace exactamente una semana en Barbados y como antesala a las primarias de la oposición que en alta votación dentro y fuera del país cerraron filas tras María Corina Machado, quien en teoría -y por ahora- no podría participar en la presidencial por estar inhabilitada.

A esta dirigente liberal le imputaron "irregularidades administrativas" cuando fue diputada (2011-2014) por lo que fue inhabilitada para ejercer cargos públicos por un año y que cumplió en 2016. Sin argumentos fehacientes y ante la fuerza política que concita esta abogada, inexplicablemente el pasado junio la Contraloría le extendió la sanción, acusándola de corrupción y promover las sanciones contra el país. El jefe de ese ente fiscalizador, Elvis Amoroso es ahora el presidente del Consejo Nacional Electoral.

Surtida la primaria opositora, en la que Machado -como se anticipaba- fue la elegida para desafiar la reelección de Maduro, la inquietud es saber si en desarrollo de los diálogos de Barbados logrará Estados Unidos revertir el portazo inicial de habilitar a los dirigentes políticos antichavistas, algo que se visualiza difícil más no imposible.

El documento firmado hace una semana incluye una cláusula de ‘respeto al proceso’, organizado a las carreras sin apoyo de la autoridad electoral y bajo constante amenaza del chavismo.

Pero igualmente en esta cita quedó claro que el levantamiento total del embargo petrolero y las demás sanciones económicas a Venezuela está condicionado a que se cumplan "compromisos" como la creación de "procesos específicos para la habilitación acelerada de todos los candidatos", así como la liberación “de todos los ciudadanos estadounidenses y presos políticos venezolanos detenidos injustamente”, según enfatizó el jefe de la diplomacia norteamericana, Antony Blinken.

Como un ‘gesto de buena voluntad’, al día siguiente del acuerdo de Barbados, el gobierno venezolano liberó a cinco políticos presos, que activistas consideran son usados ​​como fichas de canje en estas coyunturas. Entre ellos, el exdiputado Juan Requesens, condenado por un intento de magnicidio contra Maduro en 2018, y el periodista Roland Carreño, colaborador del dirigente exiliado Juan Guaidó y acusado de conspiración. Pero permanecen 273 tras las rejas por el único motivo de ser detractores del régimen.

Sumido en una crisis económica, el gobierno venezolano que vio caer el PIB 80% en la última década, dejó a la mayoría de la población viviendo en pobreza y un éxodo de no menos de siete millones esta flexibilización de las sanciones es una ‘bocanada de aire’ que puede volver permanente si da los pasos que espera Washington, que no dejará de presionar por el regreso a la vía democrática.

Maduro es consciente que con este primer acuerdo, su país “entra con fuerza al mercado petrolero y gasífero nuevamente, de manera progresiva al mercado" y que para hacerlo permanente debe acceder a las condicionantes norteamericanas. De hacerlo, se mediría con toda la fuerza de su aparato gubernamental a la opositora Machado.

Al cierre del cara a cara en Barbados, el jefe de la delegación gubernamental venezolana indicó que "este el primer paso de un acuerdo mucho más amplio que está en plena evolución su construcción y su ejecución", mientras que su contraparte, Gerardo Blyde destacó que “damos un sólido paso que allana el camino para que recuperemos nuestra confianza en el voto".

Y aunque Rodríguez descartó la petición de establecer "una ruta para que los inhabilitados y los partidos políticos recuperen sus derechos con celeridad", es altamente probable que por los motivos anteriormente señalados cambie de opinión.

Expectativa opositora

La pacífica y concurrida primaria opositora fue de buen recibo por la comunidad internacional, tanto porque el gobierno venezolano permitió la participación libre como por evidenciar que un vasto sector ciudadano quiere un cambio real, vías las urnas.

 

Sin terminar el escrutinio y como era un triunfo cantado, la liberal María Corina Machado arrasó en la primaria de la oposición, dando un paso más y decisivo en su década de lucha contra el chavismo, rebautizado madurismo.

Un primer boletín, con el 25% de las actas escrutadas, de la comisión que organizó las internas dio a Machado 552.430 de 601.110 votos. Su más cercano rival, Carlos Prosperi, quien había denunciado irregularidades en el proceso, obtuvo 28.153 sufragios, y el resto una votación menor a los 5.000.

Esta ingeniera industrial de 56 años, promete acabar con el socialismo e imponer una economía liberal, con privatización de empresas públicas como Petróleos de Venezuela.

Machado entró en la política en 2002 con una ONG que impulsó un referendo revocatorio contra el fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013). Luego fue electa diputada en 2011 hasta su destitución en 2014 por asistir como "embajador alterno" de Panamá a una reunión de la OEA donde denunció supuestas violaciones a derechos humanos durante las protestas que ese año pedían "la salida" de Maduro y dejaron 40 muertos.

En su rol de diputada se atrevió a desafiar a Chávez con una frase que continúa como uno de sus lemas de campaña: “expropiar es robar". Con ella catapultó el desprecio hacia el chavismo, conquistó a los opositores más radicales y se convirtió en la piedra en el zapato a la política económica del socialismo del siglo XXI.

"Este no es el final, pero este sí es el principio del final", expresó una exultante y agradecida Machado este lunes en frente a seguidores en su centro de campaña.

Con la esperanza de que le sea levantada la inhabilidad, su trabajo inmediato es superar las divisiones internas y, especialmente, que su partido Vente Venezuela no integra la coalición Plataforma Unitaria que está negociando con el régimen. Así la incógnita es cómo cambiará el tablero interno y si la oposición desaprovechará esta oportunidad.

Con fama de ser tajante y sin medias tintas, esta esposa y madre de tres hijos (exiliados), prometió que “la lucha irá hasta el final” y confía, al igual que millones de venezolanos, que la presión estadounidense en la mesa de diálogo desemboque en que se revierta la sanción para medirse en las urnas a Maduro.

Para Luis Vicente León, director de la encuestadora Datanálisis, “Machado fue quedando con el monopolio de una oferta alternativa distinta a la oposición clásica", y aduce que ello se debe a que es una persona "coherente, consistente y valiente".

Diosdado Cabello, considerado el número dos del chavismo, la llama despectivamente "María con ira" y "La sayona", un ánima del folklore venezolano que, como Machado, es de tez blanca y cabello negro y lacio.

"¡Que no se vista que no va!", dice Cabello en un recordatorio de su inhabilitación, a lo que la dirigente opositora le recuerda que "Yo nunca he recibido ni una notificación...Si no hay delito, no hay procedimiento y no hay decisión, ¿Qué es lo que voy a recurrir?".

Machado recorre el país en auto, las autoridades le impiden viajar en avión. Cuando su auto es detenido en retenes policiales o militares, algo frecuente, aprovecha para prometer un mejor país a los soldados, muchos de los cuales según testimonio de miembros de su equipo, le presentan su respeto.

En una semana la política venezolana se ha movido más que en los últimos cinco años. El acuerdo de Barbados desató una reacción en cadena y con el ojo den el 2024 se espera que la mesa de diálogo pavimente un camino legal y creíble hacia la contienda presidencial. Se encendió una luz de esperanza que ojalá no se apague.