La República de China está tomando lentamente el poder en Hong Kong y ha aumentado la tensión en su relación con el archipiélago de Taiwán, enviando a la vez un fuerte mensaje de su presencia.

Dicha actitud se velve un referente para las democracias de todo el mundo, máxime cuando muchos países son apoyados en tecnologías o recursos por parte de la potencia asiática.

Taiwán es una potencia productiva y tecnológica, parte integral de la economía mundial. Sin embargo, si China logra suprimir la democracia en Taiwan, sería un sismo para todas las democracias de la región.

“Este conflicto sin duda tiene grandes repercusiones internacionales, ya que Taiwán es posiblemente la democracia más sólida de Asia y suprimirla mediante el establecimiento de un control comunista chino sería un golpe a todas las democracias de la región, incluyendo dos de las más influyentes en el mundo: la India y Japón”, manifestó el doctor en filosofía de Relaciones Internacionales de la Universidad de Miami, Orlando Gutiérrez Boronat.

¿Cómo afecta este problema a América Latina?

Para Gutiérrez, nuestra región es uno de los escenarios internacionales donde se está dando este conflicto, puesto que la República Popular China busca una hegemonía internacional. Es así, que China ha puesto su mirada en el desarrollo de los recursos naturales de zonas estratégicas del mundo, entre esas América Latina.

Este partido está respaldado actualmente por dos regímenes existentes en Cuba y Venezuela. El gigante asiático busca que los latinoamericanos rompan relaciones con Taiwan para afectar la libertad de este país.

Aunque Taiwán soporta fuertes tensiones por parte de China, el país lleva décadas lidiándolas y, al tiempo, buscando ampliar su reconocimiento internacional.