El Congreso de Perú rechazó este jueves destituir al legislador Kenji Fujimori, a quien sin embargo mantiene suspendido de sus funciones, tras no alcanzar el número de votos necesario una acusación impulsada por el partido de su hermana Keiko.

La votación obtuvo 43 votos a favor de su destitución y desafuero, 20 en contra y 10 abstenciones, con lo cual no se alcanzaron las 67 voluntades requeridas para su aprobación según el reglamento del Congreso. 

Otros dos legisladores aliados de Kenji, Bienvenido Ramírez y Guillermo Bocángel, también se salvaron de la destitución al no alcanzarse los votos necesarios para dejarlos fuera del parlamento unicameral.

Con este resultado, el hijo menor del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) evita una inhabilitación para postular a cargos públicos, mantiene sus fueros parlamentarios y deja libre la vía para la contienda presidencial en 2021, en la que aspira a enfrentar a su hermana Keiko.

En la mañana, el Congreso confirmó la suspensión de Kenji, impulsada por el partido de Keiko.

La suspensión fue aprobada por 58 votos a favor, siete en contra y 19 abstenciones, dijo el presidente del legislativo, Luis Galarreta, al término de la votación que se celebró por segunda vez el jueves debido a que la primera, efectuada el miércoles, fue anulada por problemas de procedimiento.

Kenji será investigado por la fiscalía por supuesto cohecho y tráfico de influencias, acusado de haber intentado comprar votos para evitar que fuera destituido meses atrás el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski, quien finalmente renunció en marzo.

Cisma en fujimorismo

La suspensión de Kenji, de 38 años, selló el cisma en el fujimorismo, pese a los lamentos del patriarca del clan, y podría conducir a que ambos hermanos se enfrenten en las elecciones presidenciales de 2021, algo inédito en Perú.

El benjamín del clan advirtió el miércoles que su suspensión no implica su retiro de la política, en una velada amenaza hacia su hermana.

Sus aliados Ramírez y Bocángel también fueron suspendidos tras aparecer junto a él en unos comprometedores videos grabados clandestinamente por un colega incondicional de Keiko, cuya divulgación precipitó la renuncia de Kuczynski.

Mientras estén suspendidos, sus bancas serán ocupadas por partidarios de Keiko que eran "suplentes" en la papeleta electoral fujimorista en 2016.

Los hermanos se disputan ferozmente el legado político de su padre, quien fue condenado por crímenes contra la humanidad y corrupción, pero muchos peruanos lo veneran porque acabó con el terrorismo de Sendero Luminoso y la hiperinflación heredada de Alan García (1985-1990).

"Consolidar el abuso"

La votación por la suspensión tuvo que repetirse el jueves porque en la sesión del miércoles Galarreta, del partido de Keiko, permitió que votaran miembros de una comisión que había recomendado sancionar a Kenji, lo que contravenía el reglamento del Congreso.

En la segunda votación los miembros de esa comisión no participaron.

Kenji, quien no asistió a la sesión de este jueves, denunció que la nueva votación obedecía a una maniobra de su hermana, cuyo partido controla el Congreso.

"Ayer fui ilegalmente suspendido sin el número de votos que exige la Constitución", dijo Kenji en Twitter, afirmando que la nueva votación fue impulsada por Keiko para "consolidar el abuso".

"No me someteré!!! Iniciaré acciones legales, defenderé mis derechos", agregó.

Disputas por el indulto

La guerra fratricida por el control del fujimorismo no ha encontrado tregua, a pesar de los lamentos del patriarca del clan, de 79 años, quien salió de prisión indultado por Kuczynski en diciembre.

Keiko se ha lavado las manos diciendo que las sanciones contra su hermano eran una atribución del Congreso, al que ella no pertenece, pero los legisladores que las impulsaban son de Fuerza Popular (derecha populista), el partido que ella dirige. Lo creó en 2011 con Kenji, quien se marginó de él en enero.

El quiebre en el fujimorismo comenzó con las gestiones para el indulto al expresidente en diciembre.

Kenji y otros nueve legisladores fujimoristas se abstuvieron en la votación para destituir a Kuczynski, lo que salvó al mandatario y marcó una división en el monolítico partido de Keiko, que buscaba defenestrar al presidente.

Tres días después, Kuczynski indultó al exgobernante Alberto Fujimori, en una medida considerada como el pago de un favor a Kenji.

Keiko ha sido dos veces candidata presidencial, en ambos casos derrotada en balotaje. Su hermano ha sido dos veces el legislador más votado.