Consulta de Guaidó, mientras Maduro apuntala su poder | El Nuevo Siglo
El presidente interino de Venezuela Juan Guaidó celebró la "increíble participación" en lo que va de la consulta y aseguró que ha sido "superior" a lo esperado.
AFP
Lunes, 7 de Diciembre de 2020
Redacción internacional con AFP

La consulta popular convocada por el líder opositor venezolano Juan Guaidó para oponerse a las cuestionadas elecciones legislativas celebradas la víspera comenzó ayer y se extenderá hasta el sábado. "Es la oportunidad de transformar ese rechazo... en fuerza, en movilización", dijo Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países.

Con el mecanismo el líder opositor busca prolongar el período parlamentario hasta que haya "elecciones libres, verificables y transparentes" con esta consulta, que de cualquier forma no será más que testimonial, toda vez que el presidente Nicolás Maduro ejerce el control territorial e institucional con el respaldo de la cúpula militar, considerada su principal sostén.

Guaidó y la mayoría de los partidos opositores decidieron marginarse de estas elecciones, que tacharon de fraudulentas, y optaron por este mecanismo virtual y presencial, este último fijado para el sábado con puestos callejeros y activistas itinerantes en Venezuela y 300 ciudades del extranjero.

Ya hubo una consulta independiente en 2017 contra una Asamblea Constituyente propuesta por Maduro, en la que la oposición dijo reunir 7,5 millones de votos. La Constituyente igual se instaló y asumió en la práctica las funciones del Parlamento.

Desde la Asamblea Nacional, en control de la oposición desde 2016, Guaidó reclamó la presidencia encargada en 2019 después de que la cámara declarara "usurpador" al gobernante por haberse elegido en comicios "fraudulentos" en 2018.

Elecciones legislativas

Maduro, recobró este domingo el control del Parlamento tras la victoria del chavismo en unas elecciones legislativas boicoteadas por casi toda la oposición y marcadas por una abstención del 69% y un fuerte rechazo internacional.

El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y sus aliados obtuvieron el 67,6% de los 5.264.104 votos contabilizados en un primer boletín del Consejo Nacional Electoral (CNE).

"Tenemos una nueva Asamblea Nacional, hemos tenido una tremenda y gigantesca victoria", celebró Maduro en la madrugada de ayer.

En 2015, la oposición rompió 15 años de hegemonía chavista y se hizo con el Parlamento, en unas elecciones con 71% de participación.

La abstención alcanzó el domingo el 69% en unas elecciones a las que estaban convocados más de 20 millones de habitantes. Muchos centros de votación estuvieron semivacíos.

Los principales partidos políticos de oposición, encabezados por Guaidó, habían tildado las legislativas de "fraude" y llamado a la población a quedarse en casa.

"No hubo una elección ayer", expresó Guaidó. "Chantajearon a la gente y simplemente la gente no lo aceptó".

La elección tuvo la mayor abstención en este tipo de comicios desde 2005, cuando solo el 25% de los votantes acudieron a las urnas.

Pese al boicot mayoritario, una fracción disidente de la oposición postuló candidatos, incluyendo algunos con tarjetas de los partidos opositores que encabezaban el veto, después de que la oficialista corte suprema entregara su control a adversarios de Guaidó.

El jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, reiteró ayer que Washington "seguirá reconociendo" a Guaidó como presidente interino.

"La comunidad internacional no puede permitir que Maduro, que está en el poder de manera ilegítima porque robó las elecciones de 2018, se beneficie de robar una segunda elección", advirtió.

Washington lidera la presión contra Maduro con sanciones económicas a Venezuela, incluido un embargo petrolero vigente desde abril de 2019.

Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica y Panamá desconocieron los comicios dominicales, así como la Organización de Estados Americanos (OEA).

El gobierno británico también indicó que "no reconocerá la legitimidad" de esta nueva Asamblea Nacional surgida de "elecciones profundamente defectuosas", afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, reiterando su apoyo a Guaidó.

La Unión Europea, que trató sin éxito de postergar el proceso para enviar una misión de observación, indicó por su parte que no hubo el domingo "estándares internacionales mínimos".

El bloque "no puede reconocer este proceso electoral como creíble, inclusivo o transparente", indicó el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell. /Redacción internacional con AFP