ISRAEL combate “en una guerra en varios frentes” el país "y está siendo atacado desde siete escenarios diferentes", en el marco del conflicto desatado tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), aseguró ese gobierno.
El ministro de Defensa y miembro del gabinete de guerra, Yoav Gallant, sostuvo que a raíz del legítimo derecho de defensa a ese letal ataque de octubre en su territorio, su país enfrenta casi que a diario ataques desde “Gaza, Líbano, Siria, Cisjordania, Irak, Yemen e Irak", según dijo al diario 'The Times of Israel'.
A raíz del estallido del conflicto, milicias proiraníes en Irak y Siria han llevado a cabo ataques contra objetivos estadounidenses y contra territorio israelí, algo que también han hecho el partido-milicia chií libanés Hezbolá y los rebelde hutíes de Yemen, que han atacado además buques en el mar Rojo.
Así, ha destacado que el Ejército de Israel "ya ha respondido y actuado en seis de estas áreas". "Lo voy a decir de la forma más clara posible: cualquiera que actúe contra nosotros es un objetivo potencial, sin inmunidad para nadie", ha manifestado, en una advertencia a Hamás y sus aliados.
Las palabras de Gallant llegan un día después de la muerte de un alto cargo de la Guardia Revolucionaria de Irán en un bombardeo israelí en Damasco, del que Teherán ha prometido vengarse, si bien el ministro israelí no se ha pronunciado sobre este extremo.
Por otra parte, ha reiterado que la ofensiva contra la Franja de Gaza será "una guerra larga y dura". "Tiene costes, costes elevados, pero su justificación es la más elevada", ha dicho, antes de indicar que "si no se cumplen los objetivos de la guerra, habrá una situación en la que (...) habrá gente que no quiera vivir en un lugar en el que no se sepa cómo protegerla".
"Necesitamos determinación, aguante, fuerza y cohesión nacional en estos objetivos. Es una batalla en la que el que sobrevive es el más fuerte a nivel nacional, en sus valores y su unidad", ha manifestado. "Es una batalla de determinación nacional, y puedo decir que derrotaremos a Hamás", ha zanjado.
Así, Israel siguió bombardeando ayer la Franja de Gaza tras reiterar que su ofensiva se intensificará y que no parará hasta "desmilitarizar" y "desradicalizar" el territorio palestino gobernado por Hamás.
En Jan Yunis, en el sur de Gaza, se veían humaredas tras los bombardeos. Según el Ministerio de Salud de Hamás, treinta cuerpos fueron trasladados en las últimas 24 horas al hospital Nasser de esa localidad.
El ejército israelí anunció haber bombardeado en las últimas horas más de un centenar de objetivos, entre ellos accesos a túneles y posiciones militares de Hamás, sobre todo en Jabaliya (norte) y Jan Yunis.
"Hamás debe ser destruido, Gaza debe ser desmilitarizada y la sociedad palestina debe ser desradicalizada. Estos son los tres requisitos para la paz entre Israel y sus vecinos palestinos en Gaza", afirmó el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en un artículo en el Wall Street Journal.
La Franja de Gaza, sometida por Israel a un asedio total desde el 9 de octubre, estaba el martes aún más aislada del resto del mundo por un nuevo corte de las telecomunicaciones fijas y de Internet, provocado por "la continuación de la agresión", indicó la compañía palestina de telecomunicaciones.
En Israel, la presión aumenta para liberar a los rehenes. Familiares de los cautivos interrumpieron el lunes un discurso de Netanyahu en el Parlamento, con gritos de "¡Ahora! ¡Ahora!".
Hamás exige el fin de los combates antes de iniciar nuevas negociaciones sobre un canje de rehenes por prisioneros palestinos. Los mediadores egipcios y cataríes intentan lograr una nueva tregua.
De otra parte se informó que la parlamentaria palestina de izquierda Jalida Jarrar, una de las figuras del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), fue arrestada por el ejército israelí en Ramala, porque tenía una orden de aprehensión por “terrorismo”. /AFP y Europa Press