La reunión que mantuvieron en París ayer Estados Unidos, Egipto, Catar e Israel para un cese el fuego en Gaza fue “constructiva”, afirmó la oficina del primer ministro israelí, añadiendo que aún hay “desacuerdos” entre las partes.
A la cita participaron jefes del Mosad (servicio israelí de inteligencia exterior) y del Shin Bet (servicio de inteligencia nacional), informó un comunicado. Las partes “seguirán discutiendo esta semana en otras reuniones”, apuntó el texto.
El director de la CIA, William Burns, el primer ministro de Catar Mohammed ben Abdulrahman Al Thani y un alto cargo egipcio estuvieron también en la mesa de negociaciones.
Las reuniones, que comenzaron el sábado, buscan avanzar hacia un acuerdo que incluya una tregua en los combates y la liberación de rehenes retenidos por el movimiento islamista Hamás en la Franja de Gaza, según fuentes conocedoras.
El gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, enfrenta intensas presiones de la opinión pública para lograr la liberación de los rehenes retenidos en Gaza, donde las operaciones militares israelíes no dan tregua.
El presidente estadounidense, Joe Biden, conversó el fin de semana con el emir de Catar, Tamim bin Hamad Al Thani, sobre “los últimos acontecimientos en Israel y Gaza”, pero la Casa Blanca aseguró que no estaba previsto ningún anuncio “inminente”.
La guerra estalló el 7 de octubre con la incursión de comandos islamistas de Hamás que mataron a unas 1.140 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a cerca de 250 en el sur de Israel, según un balance de la AFP a partir de datos oficiales israelíes.
Un centenar fueron liberados a finales de noviembre en el marco de una tregua, y según las autoridades israelíes 132 rehenes siguen retenidos en territorio palestino, 28 de los cuales habrían muerto.
En respuesta, Israel lanzó una ofensiva aérea y terrestre que ha dejado hasta el momento al menos 26.422 muertos, en su mayoría mujeres, niños y adolescentes, según el Ministerio de Salud del territorio gobernado por Hamás.
Sobre el acuerdo discutido en París, el diario New York Times informó de una posible primera tregua de 30 días que permitiría la liberación de mujeres y de los rehenes de mayor edad y heridos.
En ese tiempo, las partes negociarían una segunda fase que también duraría 30 días y permitiría la liberación de los hombres y los soldados.
Según el diario, el acuerdo incluiría también la liberación de palestinos recluidos en cárceles israelíes.
Por otra parte, el jefe de la ONU pidió que se garanticen las operaciones de su agencia para los refugiados palestinos (UNRWA), después de que una polémica vinculada a los ataques de Hamás del 7 de octubre provocara que varios Estados suspendieran su financiación.
Doce miembros de la UNRWA fueron acusados de participar en los ataques del 7 de octubre contra Israel que desataron la guerra en la Franja de Gaza.
Ayer, Francia indicó que no preveía ningún “nuevo pago” a esa agencia hasta julio. Estados Unidos, Australia, Canadá, Italia, Reino Unido, Finlandia, Países Bajos y Alemania ya habían anunciado previamente que suspendían temporalmente su financiación.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, urgió el sábado “a los gobiernos que suspendieron las contribuciones a, al menos, asegurar la continuidad de las operaciones de la UNRWA”.
“Dos millones de civiles de Gaza dependen de la ayuda crítica de la UNRWA para su supervivencia diaria, pero la financiación actual de UNRWA no le permitirá cubrir todas sus necesidades en febrero”, insistió.
En tanto, el ejército israelí indicó ayer que los “intensos combates” continuaban en el territorio palestino y que eliminó a “terroristas” e incautó “grandes cantidades de armas”.
Guterres confirmó que las “acusaciones extremadamente graves” sobre doce empleados de la UNRWA estaban siendo investigadas internamente por la ONU. La agencia despidió a nueve de ellos, uno fue “confirmado muerto” y las identidades de otros dos estaban “siendo esclarecidas”, añadió.
“Los presuntos actos abyectos de estos empleados deben tener consecuencias”, pero no deben penalizar “a las decenas de miles de hombres y mujeres que trabajan” para la agencia de la ONU, subrayó./AFP