Rubio en Centroamérica: gira productiva que activó política de Trump | El Nuevo Siglo
EL SECRETARIO de Estado de EE.UU., Marco Rubio, cerró una exitosa gira inaugural. En cinco países centroamericanos logró importantes compromisos./AFP


Viernes, 7 de Febrero de 2025
Redacción internacional

HABLANDO en español para fortalecer los vínculos con sus interlocutores, pero sobre todo, para que les quedara claro el mensaje del gobierno Trump sobre las acciones que se espera de éstos para enfrentar la migración ilegal, el narcotráfico y la creciente influencia de China, el secretario de Estado, Marco Rubio, se reunió con cinco presidentes centroamericanos.

Le bastó un solo encuentro del jefe de la diplomacia estadounidense con los aliados de su país, los mandatarios de Panamá (José Mulino), Costa Rica (Rodrigo Chaves), El Salvador (Nayib Bukele), Guatemala (Bernardo Arévalo) y República Dominicana (Luis Abidaner) para lograr compromisos puntuales y trascendentales en pro de la seguridad regional y norteamericana.

En su primera y corta gira internacional, Rubio eligió a esta estratégica zona del continente americano por ser el corredor por donde transitan, desde años atrás, miles de personas en pos del sueño americano. De igual forma, es ruta del tráfico de drogas y accionar de organizaciones criminales que han expandido sus actividades a Estados Unidos.

En tan solo cinco días, el Secretario de Estado cumplió los objetivos de su viaje y de la política de “América Primero”, el lema de campaña que se convirtió en la hoja de ruta de Trump en su primer mandato y reiterado en su reciente regreso a la Casa Blanca. Para ello, enfrenta desde su primer día la crisis migratoria, el narcotráfico y sus organizaciones criminales, así como la creciente influencia de China en zonas específicas, como el canal de Panamá. Todas ellas, argumenta, son “amenaza a la seguridad nacional” de Estados Unidos y de América Latina, tal cual lo expresó días atrás el enviado especial de EE.UU. para la región, Mauricio Claver-Carone.

Así, Panamá canceló su participación en la Ruta de la Seda, una red internacional diplomático-comercial tejida por China a lo largo de la última década; se mostró dispuesto a no renovar la concesión con la compañía de Hong Kong que opera dos puertos en el Canal, contratos recientemente demandados; reiteró su compromiso de frenar la migración por el Darién, así como de servir de país puente para los vuelos que con deportados salen de Estados Unidos.

Rubio calificó como un "gran paso" para fortalecer las relaciones con Washington la decisión de Panamá de no renovar el acuerdo de la Franja y la Ruta de la Seda, iniciativa emblemática del presidente Xi Jinping que contempla, desde el 2013, el financiamiento de proyectos de infraestructura con fondos chinos para impulsar el comercio y la conectividad en Asia, Europa, África y América Latina.

"Yo no sé qué animó en su momento a quien firmó eso con China", sostuvo el mandatario Mulino al anunciar su decisión. "¿Eso qué ha traído para Panamá en todos estos años? ¿Cuáles son las grandes cosas? ¿Qué esa 'Belt and Road Initiative' ha traído al país?", cuestionó en tono molesto.

Entre tanto se conoció que la demanda que pide anular por "inconstitucional" la concesión que permite a una compañía Hutchison Holdings, con sede en Hong Kong, operar los puertos de Balboa y Cristóbal, en ambas entradas del Canal de Panamá, avanza rápidamente en la Corte Suprema del país.

Presentada el lunes, al día siguiente de la visita de Rubio, por dos abogados panameños argumentando que la ley que originó dicha concesión "viola lo que dice la Constitución en unos diez artículos", ya lo estudia una magistrada del alto tribunal y, según su presidenta, María Eugenia López, aseguró que “tomaremos la decisión que corresponda, ajena a cualquier presión”.

Trump anunció en su campaña y lo reiteró en su discurso de posesión presidencial que buscará que Estados Unidos retome la mencionada vía interoceánica porque “China está metida” allí.  Inclusive se quejó del cobro de tarifas diferenciales a sus buques.

Claver-Carone agregó que “el mantenimiento del canal no ha sido adecuado" y aseguró que "no es verdad" que los problemas logísticos se deban al aumento de los precios o a las consecuencias del cambio climático.

Por ello, dijo el funcionario, Washington estaría dispuesto a colaborar para solventarlos "pero no si nos cobran porque al fin y al cabo es para el bien de todos", apuntó.

"Básicamente la seguridad del canal recae sobre Estados Unidos y Panamá" y que cobren "por nuestros buques militares navales" para cruzar la vía interoceánica "es el colmo de los males", estimó Claver-Carone, pronunciándose posteriormente Rubio en esa misma línea.

¿Criminales peligrosos a cárcel salvadoreña?

Con otro de los grandes aliados de Trump y que asistió a su posesión presidencial, el mandatario salvadoreño Nayib Bukele ofreció recluir en la megacárcel de su país a peligrosos "criminales" estadounidenses y extranjeros enviados desde Estados Unidos.

Bukele decidió "aceptar para deportación de cualquier extranjero ilegal en Estados Unidos que sea un criminal de cualquier nacionalidad", como los de la pandilla MS-13 (de El Salvador, Honduras y Guatemala) y el Tren de Aragua de Venezuela, afirmó Rubio, tras la reunión con el llamado presidente millenial y que mantiene una alta popularidad por su política de mano dura contra las pandillas y delincuentes.

No existe prácticamente ningún precedente en la época contemporánea de que un país democrático envíe a sus propios ciudadanos a cárceles extranjeras, y optar por ello implicará un análisis jurídico detallado y las medidas correspondientes.

"Ningún país ha hecho nunca una oferta de amistad como esta", subrayó el jefe de la diplomacia estadounidense, mientras que Bukele explicó que "estamos dispuestos a acoger únicamente a delincuentes convictos (incluidos ciudadanos estadounidenses) en nuestra megaprisión (Centro de Confinamiento del Terrorismo) a cambio de una cuota…La tarifa sería relativamente baja para Estados Unidos pero significativa para nosotros, lo que haría sostenible todo nuestro sistema penitenciario".

Rubio y Bukele suscribieron también un acuerdo de cooperación sobre energía nuclear civil y revisaron las medidas sobre migración, aunque El Salvador es solo un país de tránsito.

Puente para deportaciones

Conocedor de la región, pero sobre todo del apoyo que brindarán, como aliados a las iniciativas de Estados Unidos, Rubio estuvo también en Costa Rica, Guatemala y República Dominicana.

Estos dos últimos países, al igual que Panamá, ofrecieron recibir más vuelos de deportados desde Estados Unidos en camino a sus países de origen.

"Hemos acordado aumentar en un 40% el número de vuelos de personas deportadas, tanto de retornados connacionales, como de extranjeros" que luego serán enviados a sus países, dijo Arévalo lo que fue calificado como “sumamente importante” por Rubio.

El Secretario de Estado ofreció el apoyo de Washington para frenar la crisis migratoria, ya que no solo es país de origen, destino y tránsito diario de cientos de personas, de diferentes nacionales.

Con el presidente dominicano Abidaner, Rubio anunció exenciones a la ayuda exterior para su "exitosa" lucha contra las drogas y el crimen, así como el inicio de diálogos para invertir en “tierras raras”, un sector estratégico para la competitividad global y que, según dijo el mandatario, las reservas en su país son de unos 100 millones de toneladas.

Tras alabar no solo las incautaciones de droga sino la extradición de peligrosos criminales “buscados por delitos transnacionales", Rubio formalizó la presencia de un agente de CBP, la Oficina de Aduanas y Fronteras de Estados Unidos, para trabajar junto con la Policía nacional" del país centroamericano.

Y, en Costa Rica, que el Secretario de Estado norteamericano calificó de modelo regional, el tema fue las inversiones en 5G, con un claro llamado a que los proveedores sean de confianza. “Cuando uno se enfrenta a empresas que no son seguras, que están respaldadas por gobiernos como el Gobierno de China, al que le gusta amenazar, al que le gusta sabotear, al que le gusta utilizar la coerción económica para castigar, se necesita de apoyo (como el nuestro) para tener un proceso de implantación responsable de la 5G, que va a ser esencial para el futuro desarrollo económico”.

Rubio también dijo que Costa Rica reforzó los acuerdos en la lucha antidrogas, los controles migratorios, la ciberseguridad y en el intercambio de datos biométricos, claves para detectar y detener terroristas.

Como se ve, Rubio se anotó sus primeros éxitos diplomáticos con una estrategia clara y certera: destacar la importancia de gobiernos claves en la región para obtener compromisos inmediatos en su ofensiva contra la migración ilegal y el narcotráfico. /Redacción internacional