En entrevista con EL NUEVO SIGLO, el hasta hace poco embajador de Colombia en Rusia, Alfonso López Caballero, analiza las causas profundas del conflicto, así como el punto de vista ruso y los eventuales escenarios
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué está pasando en Ucrania?
ALFONSO LÓPEZ CABALLERO: Rusia no acepta, bajo ninguna circunstancia, tener a la OTAN en sus fronteras. Ucrania ha estado coqueteando con esta Organización y contemplando la posibilidad de ingresar a formar parte de la misma.
Al mismo tiempo, la OTAN ha venido armando a Ucrania y durante las últimas semanas se ha recibido información de cargamentos de armas y municiones enviados desde Estados Unidos, Canadá, Francia e Inglaterra. Alemania fue el único país que se rehusó a mandar armas. A Ucrania la armaron y se fortaleció así que, este fue un desafió a Rusia que, por su tradición de múltiples invasiones, se sintió amenazada frente a la posibilidad de que Ucrania formará a OTAN
ENS: Que Rusia jugara la carta de adelantar una acción militar en Ucrania, ¿es un tema que se venía madurando, o que surgió de un día para otro?
ALC: Yo creo que fue una reacción meditada de Rusia y de Vladimir Putin ante el hecho de que Ucrania estaba entrando en la órbita militar de la OTAN, cada vez más, lo que es inaceptable para los rusos. Si usted le pregunta a un ruso en la calle que piensa, ellos no se sienten agresores sino que están respondiendo a una posible amenaza.
El ciudadano del común se siente amenazado, en la medida en que la OTAN los tiene completamente rodeados. Por el norte incorporó a los Países Bálticos (Lituania, Estonia y Letonia) que otrora hicieron parte de la Unión Soviética. Por el sur tenían a Turquía y han agregado a Polonia y a Moldavia a esta alianza militar.
Por otra parte, Ucrania y Bielorrusia, que también hicieron parte de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y que son de lenguas eslavas afines al ruso, representan un colchón de seguridad para Rusia. Este país no tiene ninguna barrera natural que impida el paso de un eventual invasor como un rio o una cadena de montañas y por eso son un asunto tan sensible para Rusia.
Y no solo es el apoyo de los países de la OTAN. En Ucrania se ha despertado un sentimiento anti ruso en un sector de la población (el otro sector simpatiza con Rusia o es directamente de origen ruso, como es el caso de las dos pseudo repúblicas de Donbás y Lugansk que acaba de reconocer Rusia).
En Ucrania país se prohibió el uso de la lengua rusa en su territorio, cuando el 80% de los ucranianos son bilingües y hablan el ruso. La fricción entre las milicias de las repúblicas separatistas y las fuerzas armadas ucranianas han venido en aumento y ha generado enfrentamientos que han ido creciendo, de manera que la situación se fue calentando hasta que llegamos a este punto de ebullición.
ENS: Desde el terreno diplomático, ¿este estallido se veía venir con las características que ha tomado forma?
ALC: Sí había una tendencia de que en algún momento hubiera un conflicto porque hay dos elementos detrás de todo esto que siempre han estado ahí. Por un lado está la percepción de Rusia de que los Estados Unidos y la OTAN se comprometieron, en su momento con la URSS, a que no correrían la OTAN hacia el este, si Mijaíl Gorbachov permitía que se reunificara Alemania, como sucedió. Rusia siente que no le han cumplido, por lo que la OTAN se ha venido expandiendo hacia el este hasta acercarse cada vez más a sus fronteras.
Por otro lado está el memorando de Budapest: cuando se desintegró la Unión Soviética, algunas de las repúblicas sucesoras tenían armas nucleares y el mundo estaba muy preocupado por la proliferación nuclear.
Para llegar a un acuerdo con Ucrania, para que se desnuclearizara y le entregara sus armas nucleares a Rusia, se firmó el llamado memorando de Budapest, en el que las potencias occidentales y la propia Rusia se comprometieron a respetar la integridad de las fronteras ucranianas. Pero cuando a Ucrania llegó un gobierno no simpatizante de Rusia, el Kremlin procedió, violando ese acuerdo, a arrebatarle Crimea a Ucrania. Son dos puntos que han mantenido caliente la situación desde un principio.
ENS: Hay analistas que dicen que ni Estados Unidos ni la OTAN van a emprender ninguna acción armada en Ucrania. ¿Coincide?
ALC: Completamente. El presidente Joe Biden ya afirmó que no pondrá soldados norteamericanos en suelo ucraniano. La opinión pública americana, después de lo que pasó en Afganistán, no ve con buenos ojos involucrarse en nuevos conflictos. Le aplicarán sanciones a Rusia y de llegar el caso podrían mandar apoyo material a Ucrania, pero soldados norteamericanos luchando contra los rusos en territorio ucraniano es algo que no va a suceder.
ENS: ¿Cree que las últimas acciones rusas debiliten aún más la relación del Kremlin con el gobierno de Joe Biden?
ALC: Rusia ha tenido una relación muy difícil con el sector demócrata que está en el gobierno. Durante la presidencia de Barack Obama tuvieron lugar varias de las expansiones de la OTAN, que contribuyeron a deteriorar la situación. La relación nunca ha sido buena entre ese sector político norteamericano y Rusia, al punto que a uno de los embajadores que tenia Obama, Michael Macfaul, Rusia le negó la visa para ingresar al país.
ENS: Algunos analistas han indicado que las sanciones económicas y financieras impuestas a Rusia se dirigen a debilitar el apoyo del pueblo ruso a Vladimir Putin, obligándolo a entregar el poder. ¿Cree que esta lectura es certera?
ALC: Podría ser. Pero frente a la efectividad que tienen las sanciones para que caigan los gobiernos, Cuba es un ejemplo de cómo no siempre funcionan. ¿Hace cuánto tienen contra la pared al país del Caribe y ahí sigue el castrismo dominando? Ahora, aquí puede ocurrir algo desastroso si sacan a Rusia del sistema SWIFT que permite todas las transacciones monetarias internacionales. Rusia quedaría excluida de la economía mundial y eso tendría un efecto grave.
Por ejemplo, España recibe anualmente cerca de un millón de turistas rusos. Si los excluyen del sistema SWIFT sus tarjetas de crédito no podrán funcionar y financiar sus vacaciones. Eso, sin contar el efecto que tendría para España, que tiene al turismo como una fuente importante de su economía, dejar de percibir a un millón de turistas por cuenta de esas sanciones.
Proyecciones
ENS: ¿Cree que la situación que estalló a mediados de la semana acabará pronto?
ALC: Si. Yo creo que esto tiene que acabar pronto porque la interdependencia entre Europa y Rusia es muy grande y ahí el suministro de gas es un factor de carácter vital. Yo creo que la solución está en que Ucrania adopte un estatus como el de Finlandia, un país que sostiene relaciones comerciales y políticas con Occidente sin hacer parte de alianzas militares.
Este es un estatus en el que Finlandia explícitamente excluye la posibilidad de participar en una alianza militar y queda con las manos libres para negociar con quien y como quisiera sus relaciones comerciales. Creo que este es el punto al que debe llegar Ucrania.
El viernes vimos que Vladimir Putin ofreció ir a Minsk a reunirse con una delegación ucraniana, justamente para buscarle una salida al conflicto. Pienso yo que se discutiría una eventual neutralidad de Ucrania y su exclusión de alianzas militares.
ENS: Usted acaba de mencionar el suministro de gas ruso. ¿Qué rol juega este bien preciado en todo este conflicto?
ALC: Total. Europa depende, casi en un 50% del gas ruso para suplir sus necesidades energéticas. En Alemania por ejemplo, de esa mitad, la mitad se va a calentar los hogares en invierno. La otra parte es para activar la industria, de manera que el gas juega un papel muy importante. Y en ambos sentidos porque para Rusia es muy importante el pago que recibe por este bien. Hay tantas inter relaciones entre Rusia y Europa, que yo creo que ya hay presiones para llegar a un acuerdo que le ponga fin al conflicto.
Reacciones colombianas
ENS: ¿Colombia sí podría aportar tropas a la escalada militar en Ucrania?
ALC: Es una tontería. Colombia no forma parte de la OTAN. Tiene una relación de asociación y estamos esperando que se abra la puerta un poco más, pero en ningún caso forma parte del cuerpo de esta organización militar para comprometerse a enviar tropas en caso de que alguno de sus países miembro sea agredido. Eso no tiene ningún sentido, ni va a ocurrir.
ENS: Nosotros tuvimos una polémica con Rusia hace poco por unas declaraciones que dio el ministro de Defensa en torno a que Venezuela habría movido tropas con asesoría rusa. ¿Cree que Colombia se apresuró en condenar la invasión?
ALC: En América Latina, que se supone es el patio trasero de Estados Unidos, la gran mayoría de los países le son adversos. El único país que es un verdadero aliado de Washington es Colombia. Si sabemos jugar bien esa carta, algún provecho podríamos sacar.
ENS: Frente a una posible injerencia, jaqueo o interferencia de fuerzas extranjeras en Colombia en las elecciones, ¿ese es un temor real?¿podría haber una interferencia rusa en la campaña colombiana?
ALC: Eso siempre es posible y es una realidad a través de los nuevos medios cibernéticos.