En momentos en que está desde el lunes en Colombia una delegación de los socios del Fondo para la Consolidación de la Paz de la ONU (PBF) se supo que 2,6 billones de pesos fueron incluidos en Presupuesto General de la Nación (PGN) para atender el Plan Marco de Implementación (PMI) de los acuerdos de paz.

El monto será sometido al escrutinio de las plenarias de Senado y Cámara, quizás la próxima semana, luego de que las comisiones económicas aprobaran el 25 de septiembre en primer y tercer debates conjuntos el proyecto número 52 de 2018 Cámara – 59 de 2018 Senado, “por el cual se decreta el presupuesto de rentas y recursos de capital y ley de apropiaciones para la vigencia fiscal del 1 de enero al 31 de diciembre de 2019”.

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Costos del posconflicto

Como lo publicó en su momento EL NUEVO SIGLO, en 2016 el Ministerio de Hacienda y Planeación Nacional calcularon en 129,5 billones de pesos (de ese año) el costo indicativo de la implementación de los acuerdos de La Habana durante 15 años, de los cuales el 85,4% (110,6 billones de pesos) sería la inversión en reforma rural integral, 3,3% (4,3 billones) para participación política, 1,5% (1,9 billones) para el fin del conflicto, 6,4% (8,3 billones) para solución al problema de las drogas ilícitas y 3,3% (4,3 billones) para acuerdo sobre las víctimas del conflicto.

El año pasado, el Ministerio de Hacienda publicó que “para el período entre 2018 y 2022 se tiene en cuenta la disponibilidad de inversión consistente con el Marco de Gasto de Mediano Plazo y el Plan Plurianual de Inversiones, los cuales imponen límites a los recursos del PGN que serán invertidos en el posconflicto. A partir de 2023, cuando el déficit del Gobierno nacional se manga constante, según los lineamientos de la regla fiscal, los recursos para el posconflicto también se estabilizarán”.

“Se espera”, aclaró entonces Minhacienda, “que el PGN sea la principal fuente para la implementación del acuerdo que proveerá el 36% del total de recursos necesarios, con un total de 46,7 billones de pesos para el total de 15 años”.

La financiación de estos rubros y su estimación para cada año hacen parte del PMI en el que convergen además del PGN, recursos del Sistema General de Participaciones, del Sistema General de Regalías, de la cooperación internacional, de las entidades territoriales y del sector privado.

En el respectivo documento se precisó, que “con el propósito de garantizar la sostenibilidad de las inversiones y minimizar los efectos de los choques externos que puedan sufrir las finanzas públicas, las inversiones aquí estimadas para cada una de las fuentes son consistentes con las proyecciones macroeconómicas y fiscales previstas en el marco fiscal de mediano plazo y la regla fiscal adoptada por el país en 2011. De esta forma, se espera dar mayor certidumbre para el cumplimiento de las estrategias y metas propuestas”.

Presupuesto

Así, los 2,6 billones de pesos mencionados al comienzo son solo los recursos provenientes del Presupuesto, de manera que la inversión total es mucho mayor. Si los recursos del PGN para el posconflicto son el 36% en los 15 años y se supone el mismo porcentaje para 2019, se estaría hablando de una inversión total de 7,22 billones de pesos, sumando todas las fuentes de financiación.

Hace un año, cuando el anterior Gobierno anunció el proyecto de Presupuesto 2018, se dijo que en un 31,5% se incrementarían los recursos para atender los requerimientos del posconflicto, de manera que el dinero para cubrir los diferentes programas pactados en el proceso de paz pasaría de 1,8 billones de pesos a 2,4 billones de pesos.

Faltante

Cuando se comenzó a debatir el Presupuesto en el Congreso, el Gobierno calculó en 25 billones de pesos los recursos que tendría que salir a buscar a través de una ley de financiamiento (reforma tributaria) para cumplir con los compromisos establecidos por el presidente Iván Duque en su campaña electoral; luego, el Ministerio de Hacienda redujo la cifra a 14 billones de pesos con los que dispondría de 4 billones más para gastos de financiamiento, de los cuales 900.000 millones de pesos irían a atender los gastos de funcionamiento de la implementación de los acuerdos de paz y demás gastos asociados al posconflicto.

Estos 900.000 millones de pesos completarían los 2,6 billones de pesos que se les propondrá a las plenarias de Senado y Cámara como aporte del PGN a la inversión del posconflicto.

Lupa global

En el cuarto informe del secretario General de la ONU, Antonio Guterres, al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la Misión de Verificación en Colombia, se señala que "el objetivo fundamental de proporcionar oportunidades de generación de ingresos a los excombatientes dista mucho de haberse logrado", pues, dice, solo se han aprobado 17 proyectos, de los cuales solo dos cuentan actualmente con financiación.

Mirar en el terreno esta situación será uno de los objetivos de la delegación del PBF que estará en Colombia hasta el viernes.

A través de un comunicado, el Sistema de Naciones Unidas en Colombia precisó que durante la visita los integrantes de la delegación, provenientes de Bélgica, Canadá, Alemania, Irlanda, Japón, Noruega, Suecia, Suiza y Reino Unido se reunirán con autoridades del Gobierno y viajarán a Chocó y Antioquia, donde “visitarán los principales proyectos en los que el PBF ha sido un donante importante apoyando las reparaciones a las víctimas, la reincorporación de excombatientes y la estabilización en los territorios. A través del diálogo con las comunidades que han sido parte de los procesos participativos podrán conocer cómo ha sido el proceso de ejecución de estos proyectos y reconocer los desafíos que aún enfrentan”.

Desde 2014, el PBF “ha sido un donante importante para los esfuerzos de paz que lleva realizando el país. A través del Fondo Multidonante para el Posconflicto en Colombia ha realizado un aporte de 15 millones de dólares para los principales proyectos que se están implementando desde hace más de dos años”, explicó el comunicado, anotando que “su estadía en el país será fundamental para evidenciar cómo, a pesar de las consecuencias del conflicto, las comunidades han logrado sobreponerse y transitar hacia una nueva sociedad reconciliada”.