La Cámara de Comercio de Bogotá, creada el 6 de octubre de 1878, se ha posicionado en estos 140 años como el principal aliado del sector productivo de la capital colombiana y de otros 59 municipios de Cundinamarca, donde apoya el fortalecimiento de los empresarios, garantiza su seguridad jurídica y busca mejorar el entorno de negocios.

La entidad, que celebra su aniversario como el principal actor del diálogo cívico en favor de los intereses de la ciudadanía y del sector productivo, ha promovido las reformas estructurales más importantes para el desarrollo económico de todo el país; una labor que data de comienzos del siglo XX, cuando la Cámara se inauguró como organismo de consulta del Gobierno para la toma de decisiones estratégicas.

Desde regulación aduanera pasando por normas tributarias y mecanismos de solución de conflictos entre comerciantes, hasta el acompañamiento a la Misión Kemmerer, que sirvió de base para la conformación de entidades clave para el contexto económico actual, como son el Banco de la República o la Superintendencia Bancaria (hoy Superintendencia Financiera), todas tuvieron participación de la Cámara de Comercio de Bogotá.

Y es que la Cámara ha estado presente en tres diferentes siglos de la historia de la Ciudad, representando los intereses de empresarios y comerciantes que hoy suman alrededor de 800.000 y que conforman el mayor eje empresarial de Colombia, con un aporte anual al PIB de más del 31%. Asimismo, ha hecho parte importante de los proyectos de infraestructura más relevantes para la ciudad, como son el primer acueducto, la primera red de energía eléctrica, el primer aeropuerto y la primera estación urbana de tren, así como la construcción recientemente del más moderno centro de convenciones de Colombia, Ágora–Bogotá.

Mónica de Greiff, presidenta ejecutiva de la Cámara, explica que “nuestra labor siempre ha estado enfocada en satisfacer las necesidades de todos los empresarios y esto ha significado estar presente en las transformaciones más importantes de la ciudad y de la región. El compromiso de la Cámara es y seguirá siendo ir un paso adelante en la búsqueda de las iniciativas y herramientas que necesitan las empresas para ser mejores en su labor de construir prosperidad. Somos sus aliados”.

En la actualidad la Cámara tiene una gran apuesta por impulsar la vocación productiva de la ciudad a través de la Estrategia de Especialización Inteligente; una estrategia de mercadeo de ciudad para atracción de grandes eventos de talla internacional y  de inversión extranjera, y una gestión internacional para fortalecer vínculos con el sector productivo internacional que brinde mayores oportunidades de negocios a los empresarios de Bogotá y la región, e impulsa la construcción de paz a través de herramientas de sana convivencia y solución pacífica de conflictos.

En este sentido, cuenta con 11 sedes: ocho en Bogotá y tres en la Región (Chía, Zipaquirá, Fusagasugá), así como un punto de atención en Ubaté. Además, cuenta con presencia itinerante en los demás municipios a través del servicio Cámara Móvil, una sede móvil que se traslada periódicamente hasta esos lugares llevando los servicios de la Entidad, tanto en materia de registro, como en fortalecimiento y solución de conflictos, entre otros. 

Como parte del desarrollo competitivo del sector productivo, la Cámara de Comercio de Bogotá ha sido encargada por el Estado desde 1931 para administrar los registros públicos de las empresas. Hoy su jurisdicción, además de Bogotá, está compuesta por otros 59 municipios de Cundinamarca.

Como eje estratégico la Cámara considera que el aumento de la competitividad empresarial es un factor preponderante para alcanzar el desarrollo productivo y generar más prosperidad.

La Cámara busca promover iniciativas que propendan por un mejor entorno de negocios, siendo un actor relevante en el diálogo cívico y convocando a los principales actores públicos y privados en un escenario de articulación acorde a las necesidades de la Ciudad Región.