Colombia enfrenta dos "situaciones humanitarias", a causa del flujo de refugiados que huyen de "la crisis en Venezuela" y por "un nuevo ciclo de violencia" provocado por diversos grupos armados, denunció el enviado europeo Christos Stylianides.

Stylianides, comisionado para la Ayuda humanitaria y la gestión de crisis, se refirió el viernes en una entrevista con la AFP en Bogotá a la "población vulnerable" que cruza la frontera "solamente por necesidades básicas" de alimentos y medicinas.

Al término de una reunión con el presidente Juan Manuel Santos, anunció un ayuda de seis millones de euros a Colombia y de dos millones adicionales para "las personas afectadas por la crisis en Venezuela", la cual se suma a los 239 millones de euros vertidos por la Unión Europea a Bogotá desde 1994.

Por su parte, el jefe de Estado manifestó que para solucionar la crisis provocada por el elevado número de inmigrantes venezolanos recibidos por Colombia y Brasil se necesita primero restaurar la democracia en Venezuela.

"La crisis humanitaria que Venezuela viene enfrentando por culpa de las políticas del actual Gobierno nos está provocando daños a todos. Es urgente que la democracia sea restaurada", afirmó Santos.

Así mismo la Comisión Europea señaló en un comunicado que "la situación en Venezuela y el desplazamiento de población hacia Colombia son preocupantes", aludiendo a los 550.000 venezolanos que huyeron al país vecino y cuyo número podría alcanzar el millón de aquí a junio, según las autoridades.

Pese al acuerdo de paz alcanzado con la exguerrilla de las FARC a fines de 2016 y a las negociaciones con el ELN, Colombia "continúa sufriendo las consecuencias humanitarias de la violencia cada vez mayor de grupos armados, algunos surgidos recientemente", agrega el organismo europeo.

La CE recordó además que "al menos 186 líderes comunitarios y defensores de derechos humanos" fueron asesinados desde comienzos de 2016 y "otros 139.359 pobladores fueron desplazados" por la violencia, principalmente en el litoral del Pacífico, importante corredor de tráfico de cocaína hacia Estados Unidos.

Stylianides, greco-chipriota, viajó a la región pobre de Quibdo (Choco, noroeste) y luego a Cúcuta, principal ciudad en la frontera entre Colombia y Venezuela

- ¿Qué problemas humanitarios enfrenta Colombia? -

"Enfrentamos dos situaciones humanitarias distintas: la primera a causa del nuevo ciclo de violencia"

"En Quibdo constatamos la necesidad de aumentar nuestra financiación a fin de satisfacer las necesidades reales. Nuestros proyectos se centran en la educación (...), pero también en la atención médica, asistencia alimentaria y protección de la población vulnerable".

"Al mismo tiempo enfrentamos un problema (...) causado por la crisis en Venezuela". "Hay una población vulnerable que viene a Colombia solamente por sus necesidades básicas".

- ¿Cuáles son las prioridades, tanto en Venezuela como en Colombia? -

"La ausencia de medicamentos, la falta de alimentos es el problema más importante en Venezuela (...) en particular para los niños. Sufren de malnutrición aguda".

"Tratamos también de proveer medicamentos y material médico porque sabemos que en ciertos hospitales no tienen productos médicos básicos"

"En Cúcuta encontré una familia con un niño muy pequeño, un bebé de solamente seis semanas. Habían venido de Caracas sólo para comprar vacunas".

"En Colombia, la primera prioridad es la educación porque (...) es una protección real para los niños vulnerables. Debemos incrementar nuestro esfuerzo (...) para dar a esos niños dignidad y perspectivas para su vida futura".

- ¿Qué proponen para remediar esas crisis? -

"En la Unión Europea estamos muy preocupados por la situación en Venezuela y no vemos alternativa: deben comprender que la única solución pasa por instituciones legítimas y democráticas, por supuesto el estado de derecho y la separación de poderes (...) a fin de superar esta crisis".

"Para la Unión Europea, Colombia sigue siendo una prioridad". "Ya ayudamos mucho y no solamente en lo financiero, sino también políticamente en esta difícil etapa hacia la reconciliación".

"Para nosotros sería muy peligroso permitir que la crisis en Colombia se convierta en una crisis olvidada".