Desde la Cancillería, Luis Gilberto Murillo expresó que los colombianos deportados por estar en condición migratoria irregular, que no tienen ningún pendiente con la justicia, ni en Colombia, ni en los Estados Unidos.
“No son criminales. Esta información ha sido verificada y corroborada por las autoridades competentes, siguiendo los protocolos establecidos para los vuelos de deportación”, manifestó el canciller Murillo.
Los dos vuelos recibidos provenientes de San Diego, California, y El Paso, Texas, transportaron un total de 201 personas, incluyendo 108 hombres, 77 mujeres y 21 niños.
Esta declaración se produce después de una tensa negociación diplomática entre Colombia y Estados Unidos, donde inicialmente existieron diferencias sobre el manejo de la deportación. Sin embargo, el gobierno colombiano logró establecer un protocolo que preserva la dignidad de los migrantes.
"Esto se hace tal como lo establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos y organismos como la Organización Internacional de las Migraciones, OIM, porque ser migrante no es un delito", puntualizó Murillo.
La Cancillería enfatizó que continuarán exigiendo el cumplimiento de protocolos establecidos para deportaciones y acompañarán a los connacionales, garantizando sus derechos fundamentales y velando por su bienestar integral.
"Funcionarios del consulado estuvieron atentos a que esta situación de nuestros con nacionales en ambos vuelos fuera satisfactoria, brindándoles asistencia técnica, asistencia médica y alimentaria antes de su partida hacia Colombia. Todos se encuentran en buenas condiciones", dijo.