Tras superar lo que se llamó desde el Gobierno colombiano como ‘impases’ con los Estados Unidos, los migrantes deportados desde ese país finalmente aterrizaron en territorio nacional. Fueron 201 personas que integraron los dos primeros vuelos en la segunda etapa de Donald Trump, incluidos los 160 connacionales que esperaban aterrizar el pasado domingo.
La operación fue llevada a cabo por la Fuerza Aérea Colombiana, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Migración Colombia, quienes también contaron con asistencia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, la Alcaldía de Bogotá y la Cruz Roja, que recibieron los vuelos en la base militar de Catam.
No obstante, dentro de los primeros testimonios que entregaron los connacionales exiliados, muchos de ellos revelaron que, a pesar de la queja elevada por el Gobierno Petro y como consta en los estatutos de Derecho Internacional, sí sufrieron malos tratos de parte de las autoridades estadounidenses, además de señalar que las declaraciones de Donald Trump donde les señalaba de narcotraficantes y ladrones, son erradas.
“Viajamos desde San Diego en un vuelo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos con unas cadenas, como si fuéramos delincuentes de alta gama, unos extraditables. Si sobrevolábamos cielo colombiano, nos hubieran dejado aterrizar, pero nos devolvieron a Texas y nos tiran nuestras pertenencias a la basura”, apuntó uno de los ciudadanos colombianos. Asimismo, señaló otro colombiano, al afirmar que “no nos dieron derechos, no nos dijeron nada, nos hicieron firmar documentos obligados y fue horrible, realmente fue un trato inhumano”.
En relación a los delitos señalados por los Estados Unidos, Martha Hernández, directora de Migración Colombia, dijo a medios de comunicación que, tras las comprobaciones realizadas por las autoridades, “ellos no tienen ningún conveniente con la ley. Se hace un proceso de salida del país y se hizo el registro en las salas de Migración, como debe ser. Es un tema que se coordinará desde la Presidencia, ninguno presenta antecedentes, ninguno viene esposado”.
Sin embargo, a pesar de la recepción y atención por parte del Gobierno Nacional, varios de los exiliados señalaron que aún persiste su interés en volver a los Estados Unidos, apuntando a las oportunidades laborales que ya habían encontrado en este país; el gasto que realizaron para ingresar al país norteamericano; o directamente la vida que ya habían construido.
¡Libres, dignos y sin estar esposados, llegaron a Colombia nuestros connacionales desde EE.UU.!
— Presidencia Colombia 🇨🇴 (@infopresidencia) January 28, 2025
Cumpliendo el compromiso del presidente @petrogustavo, un avión de la Fuerza Aérea Colombiana trasladó a los connacionales deportados desde Estados Unidos, asegurando su retorno libre… pic.twitter.com/3bcha9iHqT
Tensiones permanentes
Con el cumplimiento de los primeros vuelos con exiliados desde Estados Unidos, y atendiendo los problemas que se presentaron en medio de esta misión, queda claro que las tensiones entre los dos países, o al menos entre los dos Gobiernos, serán permanentes, al menos hasta que Gustavo Petro salga de la presidencia en agosto de 2026.
Según a EL NUEVO SIGLO el representante a la Cámara Luis Miguel López, “es una alerta grande esta situación. Si bien se solucionó el impase, los mercados, los floricultores, los cafeteros, quienes exportan a Estados Unidos como primer socio comercial, las inversiones extranjeras directas y en general, los colombianos, ante un posible incremento en el precio del dólar, quedan tocados por una crisis de confianza”.
Para López, resulta clave la creación de un “frente diplomático aparte del Gobierno”, propuesta que ya habían elevado algunos congresistas, así como el Gobernador de Antioquía, Andrés Julián Rendón, y el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez. El parlamentario también agrega que la crisis también se atenúa ante la desconexión de algunos sectores del Gobierno, además de la falta de experiencia que tendría Laura Sarabia, quien ocupará el cargo de Canciller al suplir a Luis Gilberto Murillo.
Migrar NO ES UN DELITO. Ser acusado y señalado sin pruebas, eso sí es una profunda injusticia. pic.twitter.com/3nmoSowAFR
— Cristian Avendaño (@crisavendanof) January 29, 2025
De su parte, para Cristian Danilo Avendaño, representante por el partido Alianza Verde, “había que dar una pelea diplomática para que se respetara la dignidad de las personas que debían retornar a su territorio”. No obstante, “la disputa no va a terminar en absolutamente nada, ni para allá, ni para acá. Eso tenía que tener un tratamiento silencioso y no a través de redes sociales de manera irresponsable por parte de personajes muy emocionales en política y en la forma de tomar decisiones”, dijo Avendaño a EL NUEVO SIGLO.
Finalmente, para Carolina Giraldo, “hay que tener protocolos muy claros y lo que está de fondo ahora es cómo se van a manejar las relaciones diplomáticas. Eso no puede darse desde el twitter. Eso debe darse de manera pausada y con mucha estrategia. El Gobierno Trump no se dedicará a ser conciliatorio en su política nacional, por lo que la administración colombiana debe saber cómo manejar estas relaciones de forma estratégica”.
¿Sin unidad en la Celac?
En medio de la crisis, el presidente Gustavo Petro llamó a una reunión de emergencia a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), petición que fue atendida y aprobada por parte de Xioamara Castro, presidenta de Honduras y de esta organización, convocando el encuentro para mañana 30 de enero.
No obstante, parece que el respaldo al mandatario colombiano no será atendido en su mayoría, siendo Claudia Sheinbaum, presidenta de México, de las primeras en declinar el llamado, y enviar en su representación al canciller Juan Ramón de la Fuente. Asimismo, es claro que la convocatoria de Petro tampoco encontrará respaldo de Javier Milei, presidente de Argentina, y Nayib Bukele, presidente de El Salvador, ambos adeptos y cercanos a Donald Trump, razón por lo que ahora se cuestiona sobre la fuerza de la Celac y de Petro en este organismo.
*Representante a la Cámara Luis Miguel López* sobre la *crisis diplomática* entre los Gobiernos de Colombia y Estados Unidos. @LuismLopezA pic.twitter.com/ICYuqzo7J0
— Antioquia Amanece (@antamanece) January 26, 2025
Sin respuesta por las visas
Si bien desde el Gobierno de los Estados Unidos se había argumentado que, tras la llegada de los vuelos con deportados a Colombia se reactivaría la expedición del visado, de momento la Embajada no ha recibido aprobación para retomar actividades en este apartado, razón por la que para este miércoles sigue la cancelación de citas y trámites para este documento.
De acuerdo a lo informado por la Cancillería, luego de una reunión entre el ministro Luis Gilberto Murillo; el embajador de Colombia en Estados Unidos, Daniel García-Peña; y el enviado especial del Gobierno de Estados Unidos para América Latina, “esta semana se espera la normalización de los servicios en el consulado de Estados Unidos en Bogotá”.
El impacto de esta sanción de la administración Trump, emitida el pasado domingo ante los alegatos del Presidente Petro, pero levantada en la misma jornada, también tocó al canciller colombiano, quien en su viaje a los Estados Unidos tuvo que esperar la aprobación desde suelo norteamericano para su ingreso a ese país, con miras precisamente a normalizar las relaciones diplomáticas.
Entre tanto, ni el consulado estadounidense ni el Gobierno colombiano han anunciado medidas de reparación para los más de 3.000 solicitantes de la visa, quienes han sido notificados por parte de la Embajada de la cancelación de sus entrevistas o citas para trámites en relación a este documento. Se espera al respecto una comunicación oficial en la que se especifique si habrá, o no, una reprogramación de estos compromisos.