El presidente Iván Duque dijo que espera que el Congreso en las próximas sesiones analice su planteamiento y pidió “grandeza” a las fuerzas políticas en favor de la representación de esa población afectada por el conflicto armado

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Cuando se pensaba que sería revivido el proyecto para crear las 16 curules de las víctimas en el Congreso, según se coligió de un anuncio que hizo el comisionado de paz, Miguel Ceballos, el presidente Iván Duque propuso esta semana que estos escaños sean cedidos por las fuerzas políticas presentes en el Parlamento. La iniciativa despertó el debate.

El comisionado Ceballos indicó el pasado viernes que “el Presidente nos dio la instrucción y será presentado en su oportunidad muy pronto el proyecto de reforma constitucional para la asignación de las 16 curules para las víctimas, es algo que había solicitado la sociedad”.

Sin embargo, el pasado sábado el Presidente de la República hizo un llamado, en el taller Construyendo País realizado en Mompox, para que se abra un debate nacional sobre la necesidad de establecer nuevos espacios para la participación política de “las verdaderas víctimas” en el Legislativo.

Duque Márquez señaló que en el marco de la democracia y “con la debida certificación”, todas las fuerzas políticas “puedan presentar candidaturas que respondan a atender a esas verdaderas víctimas, y que las verdaderas víctimas tengan esos espacios de representación y de participación a través de los partidos políticos o de los movimientos de ciudadanos”.

Recalcó, sin embargo, que dicha participación, que se daría en el seno del Congreso de la República, no significa que se deba incurrir en nuevos gastos para el erario sino que debe quedar incluida entre las curules actuales.

“Óigase bien -dijo el Jefe de Estado-, que eso también se pueda hacer sin generar más espacio, más costo presupuestal, y que haya generosidad y grandeza de todas las fuerzas políticas, para que esos espacios se brinden no generando más curules, sino que sea de la propia representación existente, pero garantizando esa participación amplia”.

Agregó que, de la misma forma en la que “los victimarios han tenido una representación, las víctimas también merecen tener una voz siempre escuchada”.

Finalmente, el presidente Duque aseveró que no se trata de una “iniciativa de oportunismo político de nadie”, ya que “no tiene banderas de partidos”, sino que se trata de abrir una discusión nacional. 

“Espero que el Congreso en las próximas sesiones lo debata, pero que sea para las víctimas y que eso nos permita hacer una conversación íntegra sobre un sector de la población que también merece que su voz y su voto sea ejercido para la construcción de una genuina Paz con Legalidad en nuestro país”, puntualizó.

Sectores políticos reaccionan

Desde el partido de gobierno, el Centro Democrático, el representante a la Cámara Álvaro Hernán Prada dijo que esas curules las “querían imponer mediante acuerdo rechazado por los colombianos. No podemos hacer campaña con un discurso y gobernar con otro. Así no es”.

Por su parte el expresidente del Senado, Ernesto Macías, dijo que “si las curules que propone el Gobierno son para las víctimas -certificada la calidad de víctima- más no para los victimarios, y no se aumenta el tamaño del Congreso, bienvenida la iniciativa y la discusión”.

En tanto que el también senador uribista Fernando Nicolás Araújo dijo sobre el particular que “el hecho que las mayorías del Congreso no quieran reformar el acuerdo de Santos-Farc no quiere decir que lo validamos. Un acuerdo que le otorga impunidad a las Farc, curules a las Farc, recursos a las Farc y prebendas a las Farc, pero nada a las víctimas es un mal acuerdo”.

Añadió el parlamentario costeño que “buscar espacios de representación como Rosa Blanca para las víctimas de las Farc en el Congreso de la República es un camino para la verdadera reconciliación, es corregir los errores que se cometieron en el acuerdo de La Habana”.

Agregó Araújo que “ojalá en ese proyecto de acto legislativo pudiéramos también sugerirle al Congreso de la República, no que se amplíe el Parlamento con 16 curules ni que solamente se cedan 16 curules sino que el Legislativo haga una reflexión autocrítica y se reduzca el tamaño, y que esa reducción del tamaño del Congreso venga acompañada de una representación para esas víctimas”.

Por su parte el senador del Partido de La U, Roy Barreras, dijo frente a la propuesta presidencial: “Sean serios, ¿a quién engañan con eso? Las curules ya las aprobamos y las Cortes ordenarán su promulgación. El Gobierno solo tiene que firmarlas y se ha negado a reconocerlas”.

Mientras que el senador Antonio Luis Zabaraín, Cambio Radical, consultado por EL NUEVO SIGLO, dijo que “celebro la magnanimidad del presidente Duque que se pone a ofrecer unas curules de unas personas que se eligieron en una contienda democrática. Eso no tiene sentido ni razón de ser”.

Por su parte el senador conservador Eduardo Enríquez Maya dijo a este Diario que “creo que hay que esperar la decisión del Consejo de Estado y de otra parte la decisión de la Corte Constitucional. Son dos procesos que se están tramitando sobre esas curules. Creo que jurídica y políticamente sería aconsejable esperar la decisión de estos dos altos tribunales”.

El exministro del Interior, Guillermo Rivera, señaló que le “parece que el Presidente, si realmente quiere apoyar a las víctimas para que tengan su propia representación a partir de 2022, lo que debería es promulgar el acto legislativo que ya fue aprobado, pedirle al Congreso que se lo envíe”.

Rivera consideró que el acto legislativo que crea las 16 circunscripciones especiales en la Cámara para las víctimas “fue aprobado en diciembre de 2017, y la mesa directiva del Senado de manera equivocada lo archivó con una interpretación inadecuada del reglamento”.

En tanto que el senador Antonio Sanguino, Alianza Verde, dijo a este Medio, frente a la propuesta presidencial, que “el que debe mostrar grandeza es él, no burlarse de las víctimas de esa manera, porque él debió haber promulgado desde que tomó posesión el acto legislativo que habilita las 16 curules para las víctimas”.

Asimismo, el senador Wilson Arias, Polo, indicó a este Diario que “pienso que es una manera como el Gobierno viene tratando estos asuntos en el último periodo, quiere presentarse distante de quienes han predicado destrozar los acuerdos de paz, pero tampoco se atreve a dar el paso de profundizar esos acuerdos de paz. Es algo así como una manifestación del carácter que está adquiriendo el gobierno de Duque, ambivalente, impreciso, sin brújula propia”.