“En este momento no hemos dado luces frente la apertura de las reuniones sociales en las casas, entre otras, porque el foco de contagio más grande es al interior de un hogar”, sostuvo el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo.

EL NUEVO SIGLO: El proceso de reactivación económica, ¿cómo se lleva a cabo?

JAIME PUMAREJO: Lo hemos encapsulado en tres palabras: gradual, responsable y seguro.

Si bien estamos trabajando todas las semanas con el comité asesor del Ministerio de Salud y con nuestros institutos locales, lo queremos hacer poco a poco. Llevábamos tres meses con un Pico y Cédula de dos dígitos diarios. Acabamos de pasar a un Pico y Cédula par e impar. Arranca hoy lunes. Al mismo tiempo abrimos todos los sectores del comercio, de la industria y de los servicios que son factibles abrir sin mayor riesgo de contagio. Y ahora vamos abrir con pilotos los sectores que suponen mayor riesgo, pero que en esta etapa debería poder controlar y no debería tener incidencia negativa si los abrimos bien, como son 30 restaurantes que abriremos a partir del 20 de agosto. Si esto funciona, abriremos 150 más y si funcionan abriremos la totalidad de restaurantes en Barranquilla en menos de 45 días.

ENS: ¿Y las discotecas y bares?

JP: Estamos evaluando la apertura -no ahora, sino más adelante- de sitios al aire libre, en terrazas para el esparcimiento social y que algunos de estos bares puedan trasladar a ciertas calles su manejo. Esto lo estamos diseñando con el Gobierno nacional, pero sí está dentro de nuestro paquete que vamos a aplicar en los próximos dos meses.

ENS: ¿Y las reuniones de familias y amigos?

JP: En este momento no hemos dado luces frente la apertura de las reuniones sociales en las casas, entre otras porque el foco de contagio más grande es al interior de un hogar, por eso nos estamos tomando el tiempo para asegurarnos que baje un poco más el número de casos activos en ciudad, para que podamos abrir la posibilidad de la vida social en casa, y será con un número reducido de personas y poco a poco se irá incrementando.

Lo que nos ha demostrado esta pandemia en Barranquilla es que el contagio sucedió en el barrio o en la casa, porque ahí bajamos la guardia. Cuando estamos en la calle hay mayor alerta. Cuando llegamos a la casa nos quitamos el tapabocas y no observamos la distancia física y ahí es donde sucede el contagio.

Contener

ENS: ¿Cómo se ha manejado la situación actual?

JP: Lo más importante es que lo que logramos hacer fue contener el momento más crítico de la pandemia, entendiendo que era una carrera que había empezado muchos meses antes. Es decir, empezó con la preparación médica, a raíz de la Asamblea del BID, empezamos a tomar preparativos, aún cuando en Colombia no se estaban tomando preparativos para las necesidades ante la eventual llegada del coronavirus en Colombia. Luego de la preparación médica, que incluía la infraestructura, la parte de trabajo con las diferentes especialidades médicas, trabajamos desde marzo haciendo comités y reuniones con las IPS de alta complejidad de la ciudad, con las agremiaciones médico-científicas, con la mesa de salud pública, con los infectólogos, y creamos consenso porque en el momento más duro de la pandemia estábamos claros en la dirección que teníamos, y eso nos permitió tomar determinaciones y no paniquearnos en el momento más difícil.

ENS: ¿Cuál diría que fue la clave?

JP: Es por un lado, la unión del sistema científico, médico y en la preparación médica. Lo otro que creo es que no nos dio miedo para ocultar o matizar las cosas y por eso salimos a hacer pruebas de manera masiva. Inclusive, hoy somos la ciudad en que se ha hecho más pruebas por cada 100.000 habitantes en toda Colombia. Nos daba la tranquilidad que teníamos buena información.

Tuvimos que padecer de primeros el pico entre las grandes ciudades. Creo que lo pudimos sortear gracias a la ayuda del Gobierno nacional que nos acompañó en el momento adecuado.

Y por último creo que en el momento crítico esa información nos permitió hace 60 días tomar las medidas más estrictas para poder apretar en el momento adecuado con toques de queda, ley seca y con el llamado a la ciudadanía que entendió que esto era en serio.

ENS: Y con los mayores de edad, ¿qué se hizo?

JP: También hubo una unión con las juntas de acción comunal, cuando hicimos el “Más 60” para hacer un programa especial para salvaguardar la vida de los mayores de 60 años, y eso nos ayudó para bajar la tasa hospitalaria, y poco a poco la tasa de letalidad. Hemos sufrido los embates económicos. Perdimos más 150.000 empleos en la época de pandemia.