La Asociación Colombiana de Psiquiatría (ACP) expresó su profunda preocupación ante la grave situación financiera que enfrenta el sector salud en el país, alertando sobre los efectos negativos que esto ha generado en las Instituciones Prestadoras de Servicios (IPS) especializadas en psiquiatría y salud mental.
En un comunicado dirigido a la opinión pública, la ACP y su Subcomité de Asuntos Hospitalarios hicieron un llamado urgente a las autoridades para establecer un proceso técnico, transparente e independiente en el cálculo de la Unidad de Pago por Capitación (UPC). Según el documento, este ajuste es crucial para “asegurar la sostenibilidad de los prestadores de servicios de salud y garantizar una atención adecuada a los pacientes”.
Problemas financieros afectan servicios especializados
La asociación denunció que los retrasos en los pagos por parte de las Entidades Promotoras de Salud (EPS) han alcanzado niveles críticos, agravados por prácticas como:
- La retención injustificada del 20% de los pagos sin mecanismos claros de reclamación.
- La negación de cartera previa a la intervención de las EPS.
- La omisión en el desembolso de facturas vencidas.
Estas irregularidades, de acuerdo con la ACP, han generado “serias dificultades en la continuidad de los servicios de salud mental en distintas regiones del país, afectando gravemente a los pacientes y sus familias”.
Impacto en los profesionales de la salud
Además, la asociación destacó el impacto negativo de esta crisis sobre la salud física y mental del personal médico, señalando que la “incertidumbre y la presión constante han tenido un efecto devastador en los psiquiatras y otros profesionales del sector”.
“El cuerpo médico está trabajando en un contexto de creciente demanda de servicios de salud mental, lo que ha derivado en una situación insostenible e injusta”, indicó el comunicado.
Un llamado a la acción urgente
La Asociación Colombiana de Psiquiatría advirtió que la actual crisis financiera podría acarrear “consecuencias irreparables para la salud pública”, si no se toman medidas inmediatas. Por ello, reiteraron su compromiso con la defensa de los derechos de sus pacientes y colegas, subrayando que “la salud es un derecho de todos”.
Con este pronunciamiento, la ACP busca visibilizar una problemática que afecta a miles de colombianos y promover soluciones que permitan salvaguardar el acceso a servicios de salud mental de calidad.