Por el caso del periodista Mauricio Orjuela, quien falleció por cuenta de una peritonitis que no fue atendida a tiempo, la Superintendencia de Salud tomó una decisión importante.

El ente regulador impuso una millonaria sanción a tres entidades de salud por incurrir en fallas en la atención brindada al comunicador en agosto del año pasado.

La multa es de 3.600 salarios mínimos a la Clínica General de la 100, la EPS Medimás y el Hospital de Engativá.

La Unidad de Servicios de Salud Engativá Calle 80 deberá pagar una multa de 400 salarios mínimos mensuales, porque dicha IPS no siguió las guías de manejo de urgencias por dolor abdominal agudo ni suministró medicamentos indicados en protocolo.

Contra la Clínica General de la 100 la sanción fue de 2.000 salarios mínimos por no prestar servicio de gastroenterología al aducir que el profesional estaba de viaje.

Y la tercera sanción es una multa de 1.200 salarios mínimos mensuales contra la EPS Medimás al detectar fallas administrativas por no hacer seguimiento a su red de prestadores de servicios médicos y no reaccionar de manera oportuna frente a las fallas en la Clínica de la 100, que finalmente desembocaron en la muerte de Mauricio Orjuela.

Cabe recordar que en su momento, la Personería de Bogotá encontró que el periodista permaneció más de 38 horas en el Hospital de Engativá a la espera de una TAC abdominal (Tomografía Axial Computarizada) para confirmar el diagnóstico de apendicitis aguda, situación que retardó de manera injustificada la atención oportuna y puso en grave riesgo la integridad del paciente.

La demora en la realización del examen de imágenes diagnósticas, según los documentos del Hospital, se debió a la falta de insumos y contratación oportuna en el manejo del servicio de radiología e imagenología que fue tercerizado por la Subred Integrada de Servicios de Salud Norte.