Falta de víveres y a la deriva, fue la denuncia que hizo un grupo de soldados a través de la Emisora La W. Los militares se encuentran realizando operaciones en zona rural de Tumaco, Nariño.
Uno de los uniformados sostuvo que hacen parte del Batallón Badra No 5: “Estamos en operaciones de estabilidad en el territorio, van ocho días desde que pasó el abastecimiento y no dan razón en el batallón. Son víveres para 15 días, pero no han llegado, nos ha tocado con yuca o lo que da la tierra”.
De igual manera, otro integrante de ese pelotón aseguró que el oficial encargado no se ha comunicado con ellos y tampoco "quiere dar la cara".
Por otro lado, los soldados le hicieron un fuerte llamado al Ministerio de Defensa, así como a la Casa de Nariño, diciendo que si son ellos los que están "poniendo el pecho" lo mínimo es que se les dé las garantías para poder realizar su trabajo.
De inmediato, las respuestas de altos rangos del Ejército llegaron. Uno de los que dio testimonio fue el general Carlos Padilla, comandante de la Fuerza de Tarea Hércules, donde le señaló a La W, que los diferentes insumos y material no han podido llegar por el mal clima que presenta la zona.
A pesar de los hechos, se conoció que la tropa compuesta por 60 hombres ya pudo ser abastecida en un, 50%; en las próximas horas se podrá entregar víveres a los demás integrantes.
Golpes a grupos criminales
El pasado 12 de febrero en Necoclí, Antioquia, la Policía Nacional y las Fuerzas Militares ncautaron 5.6 toneladas de cocaína pertenecientes al Clan del Golfo, avaluadas en 600 mil millones de pesos.
El hallazgo se produjo en zona rural de Necoclí, en la subregión del Urabá antioqueño. Hasta el lugar llegaron uniformados del Gaula Militar del Ejército Nacional y la Policía, quienes hallaron al interior de una vivienda de madera un depósito ilegal con la droga.
Tras la inspección al lugar, las autoridades encontraron el ingreso a un escondite que había sido construido bajo tierra con el objetivo de no ser detectados los elementos que allí guardaban los criminales. En su interior, con técnicas de inpermeabilizacion tanto a la droga como del lugar, las Fuerzas Militares hallaron varios paquetes que, tras los análisis y pesaje respectivo, arrojó que se trataba de 5637 kilogramos de clorhidrato de cocaina.
Tras la inspección al lugar, las autoridades encontraron el ingreso a un escondite que había sido construido bajo tierra con el objetivo de no ser detectados los elementos que allí guardaban los criminales. En su interior, con técnicas de inpermeabilizacion tanto a la droga como del lugar, las Fuerzas Militares hallaron varios paquetes que, tras los análisis y pesaje respectivo, arrojó que se trataba de 5637 kilogramos de clorhidrato de cocaina.
Según se ha podido establecer, la droga iba a ser enviada por rutas del narcotráfico hacia Centro América y Estados Unidos, en lanchas tipo GoFast.
Las autoridades investigan si en ese lugar además del clorhidrato de cocaina, se habían escondido, antes, otros elementos del aparato criminal de grupos armados organizados que delinquen en la región.
De acuerdo a información, el cargamento de droga pertenecería a la subestructura Gabriel Poveda Ramos del Clan del Golfo y tendría un valor superior a los 600 mil millones de pesos.
En el hecho fue capturado un sujeto quien, junto a la droga, fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para el respectivo proceso de judicializacón.
Más operaciones
La semana pasada tropas de la Séptima Brigada, ubicaron y destruyeron un laboratorio e insumos para el procesamiento de clorhidrato de cocaína, en Mapiripán, Meta.
En el lugar fue encontrada maquinaria, como guadañas, bombas para fumigar, pesas romanas, prensa hidráulica y rollos de fibra utilizados para el procesamiento del alcaloide, además de 330 galones de combustible aparentemente revuelto con hoja de coca y otros 80 galones limpios; también soda cáustica, cemento, sulfato de amoniaco y hoja de coca picada.
Los insumos y material ubicado en el laboratorio fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.