Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente, se declaró inocente de los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito durante la audiencia preparatoria de juicio, realizada en el Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla. La diligencia fue presidida por el juez segundo especializado Hugo Carbonó.
En respuesta a la pregunta del magistrado sobre si aceptaba los cargos imputados por la Fiscalía, respondió: “Señor juez, no. Yo soy inocente”.
Esta decisión, tomada en una etapa crucial del proceso, cierra la posibilidad de un acuerdo con la Fiscalía, que había ofrecido beneficios judiciales en caso de aceptación de cargos. El juez Carbonó le recordó al procesado las implicaciones de su decisión:
“el principio de presunción de inocencia no se descarta hasta tanto no haya una sentencia debidamente ejecutoriada. En esta etapa procesal, la rebaja sería de una tercera parte, pero no habría retractación si usted se allana a los cargos”, explicó.
Contexto de las acusaciones
Los delitos imputados a Nicolás Petro derivan de la denuncia hecha por su expareja, Daysuris Vásquez, quien aseguró que el exdiputado recibió más de 1.053 millones de pesos de dudosa procedencia. Según la mujer, los recursos estaban destinados a la campaña presidencial del Pacto Histórico en 2022, aunque no ingresaron oficialmente a las cuentas de la campaña.
Desde entonces, la Fiscalía recopila pruebas y testimonios que respaldan la acusación, destacando la participación de Mario Burgos como fiscal del caso. En esta etapa del proceso, el ente acusador presentó las pruebas que serán evaluadas en el juicio.
Declaraciones del juez
Durante la audiencia, el magistrado subrayó la importancia de la presencia física del procesado en la diligencia, destacando que: “Para que estuviera debidamente asesorado por la defensa y no de manera virtual, que se pueden presentar fallas técnicas, debía estar aquí presente con su defensor para que el juzgado le entere del contenido y las consecuencias de una aceptación de cargos”.
También mencionó las posibles ventajas que Nicolás Petro habría obtenido si decidía aceptar los cargos: “Esta es la oportunidad para que usted diga si acepta o no los cargos. La rebaja sería de una tercera parte en este estado procesal”, reiteró el juez.
Próximos pasos
Con esta decisión, el caso entra en la etapa de juicio, donde la Fiscalía buscará demostrar la culpabilidad del procesado, mientras que la defensa, liderada por el abogado Alejandro Carranza, insistirá en su inocencia. Este afirmó que la enunciación de pruebas “no significa haber aceptado ninguna responsabilidad”.
Este proceso no solo representa un desafío para Nicolás Petro, sino que también genera tensiones políticas al involucrar al hijo del actual presidente en un caso de alto perfil.