La ola de atentados con que la guerrilla quiere forzar al Gobierno a buscar un acuerdo de cese el fuego, está produciendo el efecto contrario ya que aumentan las voces que piden acabar con el proceso de paz. El presidente Juan Manuel Santos ya no tiene margen de maniobra para continuar las negociaciones
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Pese a que el cese el fuego culminó hace casi 40 días, el Gobierno y el Eln siguen por caminos distintos y se aleja la posibilidad de lograr un nuevo acuerdo que frene la escalada bélica del grupo insurgente.
Por el contrario en la última semana la escalada de atentados y hechos terroristas por parte del Eln se ha hecho notoria, en regiones donde tradicionalmente hace presencia pero también en otras donde sus acciones son pocas.
Tanto en Bogotá como en el Putumayo, en el Meta, en Arauca, en los santanderes y en la región Caribe, esa guerrilla ha multiplicado los hechos terroristas teniendo como hecho trágico el atentado de Barranquilla donde murieron 6 policías.
Este accionar del Eln prácticamente está cerrando la puerta para continuar con la mesa de negociaciones de Quito. Por lo menos eso es lo que ya le están pidiendo algunos congresistas al presidente Juan Manuel Santos.
No más negociaciones
El presidente del Senado, Efraín Cepeda, considera que esta situación de orden público le da aún más la razón al Congreso que decidió hundir las circunscripciones especiales de paz, sitios en donde se realizaría elecciones con posible injerencia de grupos ilegales.
“El Eln no merece que sigamos negociando, sino que la Fuerza Pública los someta, de manera que no me quiero imaginar que hubiera podido suceder en esa zona si el Eln o la disidencia de las Farc se hubieran quedado con una de las curules”, señaló.
Por su parte el vicepresidente del Senado, Antonio Correa, le exigió al Gobierno Nacional tener mano dura con esa guerrilla y tomar decisiones concretas en la suspendida mesa de negociación.
“El Gobierno debe elevar su voz de rechazo absoluto a los señores que hoy sienten que por esa vía pueden lograr arrinconar al Estado. Hoy todo el pueblo colombiano debe decirle al Gobierno que estamos con él en la medida en que hablen con autoridad en la mesa de diálogos y no se dejen tomar el pelo”, manifestó.
Sin luz en el Caribe
En los atentados de ayer, el Eln dejó sin luz a 7 departamentos de la costa Caribe y de los santanderes, además de perforar con explosivos al oleoducto Caño Limón-Coveñas.
Prácticamente la región de la Costa Atlántica se encuentra cerca de una emergencia eléctrica por acciones terroristas de miembros del Eln, que derribaron dos torres del sistema de interconexión que lleva la energía desde el centro país hacia la región Caribe.
Fueron cuatro ataques con los que derribaron dos torres del sistema interconectado y dejaron con averías a otras dos estructuras.
Las torres derribadas están en los departamentos de Antioquia y Cesar, con lo cual se dejó por fuera de servicio dos de los tres sistemas de interconexión hacia el norte del país.
Frente a esta situación se ordenó poner a trabajar a toda marcha las centrales térmicas del Caribe para garantizar el suministro de energía en ciudades como Barranquilla, Cartagena, Santa Marta y, en general, a los siete departamentos de la región Caribe.
Estos atentados obligaron activar un plan de contingencia en la Costa Caribe colocando el sistema en máxima generación, según la información revelada por el ministro de Minas y Energía, Germán Arce.
"La realidad es que esos actos terroristas ponen en riesgo el sistema, pero el sistema ha reaccionado de manera positiva y esperamos pasar hasta que entre la nueva línea sin ninguna afectación en el servicio de los usuarios", señaló el ministro Arce. El funcionario indicó que el Caribe tiene energía, desechando cualquier peligro de cortes de energía entre los usuarios. Sin embargo, los empresarios costeños han advertido que se pueden presentar cortes del servicio afectando a algunas empresas.
Arce aseguró que si este fin de semana entra en operación la primera torre dinamitada el sistema cambiaría de grado de contingencia. Actualmente está en el máximo grado. El Caribe es importador de energía del interior del país y con proyectos como el que le fue otorgado al Grupo Energía Bogotá podría convertirse en exportador.
Más atentados
Asimismo el jueves por la noche el Eln hizo un nuevo atentado contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas en inmediaciones a la vereda Cubugón, caserío La Colmena, en el municipio de Toledo, Norte de Santander. El hecho originó el derrame de crudo, por lo que las autoridades llamaron la atención de los habitantes de la zona para que se alejen y no enciendan fogones, leña ni nada que produzca chispa por el riesgo que existe.
La estatal petrolera Ecopetrol informó que ya activó un plan de contingencia en la zona para atender la emergencia y desplazará técnicos especialistas para que revisen la magnitud de los daños originados a la infraestructura petrolera del país.
También Ecopetrol reportó que en las últimas horas aumentaron las amenazas contra sus trabajadores y los ataques a algunas instalaciones de los campos Castilla y Chichimene, en el departamento de Meta.
Según fuente de la empresa, "un grupo de aproximadamente 200 personas encapuchadas ingresó a la fuerza y atacó el Centro de Maniobras de Acacias (CMA) que hace parte del sistema eléctrico del campo de producción Castilla".
Además, las fuentes informaron que durante la asonada, los manifestantes "rompieron vidrios, cortaron el cableado, generaron daños graves en equipos de control y acometidas eléctricas, y provocaron un incendio que afectó el restablecimiento de algunos pozos".
Estas personas, según Ecopetrol, se movilizaron en motos y cortaron árboles para bloquear las vías de acceso a los campos, sabotearon diferentes puntos de la infraestructura, quemaron interruptores eléctricos y manipularon indebidamente algunas bridas.
En Bogotá
De otro lado, durante la mañana de ayer en Bogotá fue activada una bomba panfletaria frente a la Plaza de Paloquemao. "Se escuchó una explosión como cuando se quema una mecha de tejo y después volaron todos esos papeles", manifestó un comerciante testigo de lo sucedido.
En este mismo sentido, los terroristas dejaron una bomba incendiaria en el interior de un bus de Transmilenio. El general Hoover Penilla aseguró que la investigación ente momento está orientada a establecer responsables y en qué momento fue abandonado el artefacto en el interior del bus.
Dijo que el oficial que se trata de un artefacto de bajo poder, una bomba molotov o incendiaria que rápidamente fue controlada por el personal de Transmilenio en el Portal de Suba.
“Los peritos antiexplosivos están tras los responsables, recuperan datos y muestras que ayuden a establecer con certeza el material usado”.
Para el general es muy complicado atribuir responsabilidades, pero la investigación más adelante nos puede dar algunas luces.