¿Por qué Medimás está en cuidados intensivos? | El Nuevo Siglo
Domingo, 7 de Octubre de 2018
Redacción Nacional

Desde el pasado 13 de septiembre de 2017, dos semanas después de entrar en operación Medimás EPS, el Procurador General de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, había solicitado a la Superintendencia Nacional de Salud la inmediata intervención forzosa administrativa de la firma, debido a la inexistencia de red de prestadores de servicios que impiden garantizar la atención en salud, violando los derechos fundamentales de cerca de 4,5 millones de afiliados. 

Sin embargo, ese requerimiento del Procurador fue desechado por el anterior Gobierno y por el ministro de Salud de ese entonces, Alejandro Gaviria. Ya en ese momento Medimás presentaba múltiples problemas entre ellos que había excluido al socio que acreditó la experiencia con base en la cual lograron la compra y no implementaron del modelo de salud que propusieron durante el proceso, causales ambas que provocaron la revocatoria de la venta de Cafesalud a esa empresa por $1,2 billones.

La respuesta de la empresa a la Procuraduría fue: “Medimás asumió la falta de prestación de servicios de salud correspondientes al primer semestre de 2017 por parte de Cafesalud, lo cual ha generado una represa considerable de casos y una afectación”.

Conocimiento

Al respecto Olga Lucía Zuluaga, directora ejecutiva de Acesi, que representa a los hospitales públicos, consideraba que “Medimás conoció con suficiente anticipación la situación en la que estaba esa empresa (Cafesalud), de ahí que no se puede tolerar la falta de planeación y previsión, no solo frente a los pacientes, sino frente a proveedores y prestadores de servicio de sus redes. Se presentó como una empresa nueva, pero continuó con las mismas caras y estructuras de Cafesalud”.

Desde antes de la adjudicación de la venta, la Procuraduría había alertado que los virtuales compradores no contaban con el músculo financiero, ni con la experiencia suficiente para asumir el aseguramiento de los afiliados que venían de Cafesalud.

Lo preocupante es que desde el comienzo Medimas no contaba con la red de atención en 29 lugares del país, como fue su promesa, ni mucho menos con la capacidad de atención de los usuarios ni la entrega de medicamentos. Como dijeron algunos analistas, Medimás continuó con los problemas de Cafesalud pero agravados al 100%.

Una respuesta al requerimiento de la Procuraduría General por parte de la Liquidadora en relación con el cronograma de pago de las acciones de Cafesalud, suscrito en julio y agosto de 2017, dice que Medimás se encuentra en mora de más de 90 días, habiendo hecho un último pago parcial en el mes de julio, lo que ubica la deuda en más de $74.101 millones de pesos, sin incluir los intereses de mora correspondientes.

Frente al contrato de compraventa de las acciones de Esimed no se ha hecho un solo pago por este concepto, por lo que a la fecha la deuda total asciende a $17.500 millones de pesos, más intereses de mora, obligaciones que se harán exigibles mediante las garantías que soportaban los pagos.

Los incumplimientos desde el punto de vista económico ascienden a más de $125 mil millones de pesos, sin contar intereses. 

Crisis

Por otra parte, la noticia sobre el freno a la venta de Cafesalud a la compañía Medimás EPS parece ahondar la crisis del sistema de salud en Colombia que sigue con los mismos males: problemas financieros y de atención oportuna para los usuarios.

Para diversos actores del sistema no es para nada positivo esa decisión que genera mucha más incertidumbre respecto al futuro del sector asegurador del país.

“Es una situación confusa, compleja y nada buena. Esto genera incertidumbre entre los afiliados y entre los trabajadores de Esimed, que son las clínicas del mismo grupo empresarial y de Medimás y también le pone ruido al sistema. Esa noticia me deja perplejo”, dijo Jaime Arias, presidente de Acemi, gremio que agrupa a las EPS del país.

Sergio Prada, investigador en salud del instituto Proesa, comentó que la incertidumbre se genera por el futuro inmediato de los afiliados.

“¡Vagabundería!”

Por su parte el defensor del Pueblo, Carlos Alfondo Negret, señaló que “lo que pasa en la salud en Colombia es una vagabundería criminal que atenta contra la salud y la vida de los colombianos”.

“Aquí la prioridad es la atención de los afiliados y por eso compartimos la actuación de la Procuraduría en la solicitud de revocar la venta de Cafesalud a Medimás por incumplimiento de los términos acordados”, ratificó.

Agregó que la Defensoría del Pueblo había evidenciado la situación y en noviembre de 2017 le pidió a la Corte Constitucional que interviniera para proteger a los usuarios de Medimás, pero esto no se hizo y el incumplimiento de quienes compraron Cafesalud precipitó la revocatoria de la venta.

“Los colombianos se acercan a la Defensoría, a la Personería, a la Procuraduría a que les presentemos tutelas porque no les dan el servicio. De modo que es el momento de parar y de que el sistema funcione. Nuestra única intención siempre ha sido garantizar el derecho a la salud de los afiliados”, enfatizó Negret.