El año pasado se registró un leve descenso en las cifras, pero las autoridades están alarmadas con el número de víctimas registrado en apenas seis días de diciembre

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Hasta ayer, en solo seis días transcurridos del mes de diciembre, el Instituto Nacional de Salud (INS) había registrado 34 casos de personas quemadas por pólvora, incluyendo 10 menores de edad.

Según el INS, el 20% de las lesiones fueron causadas por totes, lo que implica una reducción del 8% con respecto al año pasado.

Antioquia y Valle del Cauca, con 19 afectados, siguen siendo los territorios en donde más quemados se presentan.

Hoy es el popular día de velitas en donde históricamente se registran más accidentes con este tipo de artefactos.

El procurador Fernando Carrillo les urgió a los alcaldes y gobernadores “que expidan programas de prevención, atención, emergencia y capacitación para el manejo de la pólvora en esta Navidad. La pólvora es el peor enemigo de la integridad física y la salud de los niños en esta época. Actúen señores alcaldes. No podemos permitir, como ha venido sucediendo en los últimos años, que siga aumentando el número de heridos por cuenta de la pólvora”.

Cifras alarmantes

Según las cifras del INS, en las pasadas fiestas decembrinas y de comienzo de año se presentaron 832 casos de lesionados con pólvora, 51 más que en las de 2017-2018. De los afectados en las fiestas pasadas, entre los que hubo 97 amputados y 99 personas con daños oculares y auditivos, 37% fueron menores de edad.

Valle del Cauca (109 casos), Nariño (74), Cauca (69), Antioquia (68) y Atlántico (51) fueron las entidades territoriales donde más se presentaron casos de lesionados con pólvora en las fiestas pasadas.

Las cifras del INS dan cuenta, además, de que los artefactos que más lesionados y quemados generaron el año pasado fueron los totes (30%), cohetes (11,9%), voladores (11,7%), luces de bengala (4,7%), volcanes (4,6%) y otros, como papeletas y diablitos, (25,1%).

“Cero pólvora, parcero”

De hecho, el Ministerio de Salud lanzó la campaña "Porque te quiero y me quiero: cero pólvora, parcero", que pretende concientizar a la población sobre el uso de estos elementos.

Según el ministro de Salud, Juan Pablo Uribe, "nos debemos enfocar en la prevención, en evitar la pólvora para que no tengamos consecuencias que lamentar. Esta campaña tiene una expresión urbana, a través del rap, con lo que buscamos que los niños y jóvenes del país rechacen el uso de la pólvora, que la perciban como una real amenaza a su integridad y a su futuro".

El jefe de la cartera afirma que "en los últimos cinco años en Colombia hemos tenido más de 5.000 personas lesionadas por la manipulación de pólvora en navidad y año nuevo. Esto es inaceptable y por ello debemos todos tomar conciencia para que hechos como esos no se repitan", aseveró el ministro Uribe, quien les recordó a las autoridades regionales y locales el compromiso de fortalecer los controles respecto a la venta, fabricación, almacenamiento, transporte, comercialización y manipulación de artículos pirotécnicos, conforme lo determina la ley”.

Uribe manifestó se debe hacer cumplir la prohibición absoluta de la venta de artículos pirotécnicos a los menores de edad y a las personas en estado de embriaguez.

“Proponemos la activación de espacios de coordinación intersectorial, tales como los consejos departamentales, distritales y municipales de Gestión del Riesgo o los espacios que se decidan en cada territorio”, apuntó el ministro Uribe, “con el objetivo de implementar las acciones para prevención, control y manejo de las lesiones por pólvora e intoxicaciones por fósforo blanco”.

¿Productos seguros?

Sin embargo Carlos Andrés Carvajal, presidente de la Federación Nacional de Pirotécnicos, que agrupa a los polvoreros formales y artesanales del país, sostuvo que no se puede estigmatizar a quienes comercializan pólvora, pues “desde el año 2017, la Federación le ha dado este enfoque a la estrategia de seguridad del gremio, buscando ofrecer a los usuarios mejores criterios para evaluar un producto seguro de uno inseguro, información sobre lugares permitidos por la ley y pedagogía sobre mejores prácticas de seguridad. La estigmatización genera más informalidad y más riesgo. Aunque la campaña del Ministerio de Salud es un gran avance, muchas autoridades locales continúan estigmatizando y poniendo en una misma bolsa a productos seguros y modernos y productos artesanales. Esto solo continúa alimentando la informalidad en el sector y quitándole al Estado su capacidad para supervisarlo”.

Regulación legislativa

La Comisión Primera del Senado tiene agendado para discutir en tercer debate el proyecto de ley que busca regular de manera técnica la venta de dispositivos pirotécnicos en todo el país, la idea es que exista una reglamentación general que no esté a disposición de los alcaldes de turno.

La iniciativa indica que luego de expedida la ley los ministerios de Defensa, Salud e Interior reglamentarán de manera técnica el uso y fabricación “con criterios de evaluación de riesgo de acuerdo a la probabilidad de ocurrencia de una lesión sobre el uso, la fabricación, la manipulación, el transporte, el almacenamiento, la comercialización, la compra, la venta y el expendio en el territorio nacional de pólvora y productos pirotécnicos. Asimismo, crea multas entre uno y 200 salarios mínimos. La pena puede ser agravada si existen lesiones.

Así mismo, el proyecto prevé que el ministerio de Educación y el Sena deberán realizar talleres para la formalización del oficio artesanal. Así mismo se crea un fondo cuyo propósito es sensibilizar a la población sobre el uso de estos elementos, el fondo está alimentado por donaciones y el dinero recolectado por las multas impuestas.