Ambiente para 3er canal de TV pero hay intereses contrarios: Álvarez | El Nuevo Siglo
Viernes, 5 de Julio de 2013

Por: Gabriel Sonny Cubillos

Periodista de EL NUEVO SIGLO

En el país existe ambiente para un tercer canal privado de televisión desde el punto de vista técnico, la necesidad de la pluralidad en la información y la libre competencia, sin embargo, hay intereses económicos que son contrarios a este proceso.

Así lo señaló el excomisionado de televisión Fernando Álvarez, quien consideró como una falacia el argumento que la torta publicitaria no alcanza para tantos.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo vio el cambio que se dio con la eliminación de la Comisión Nacional de Televisión y el paso a la Autoridad Nacional de Televisión?

FERNANDO ÁLVAREZ: Creo que lo que hizo el Gobierno fue una medida, dijéramos, formal que no resolvió los problemas de fondo en ningún momento. En primer lugar porque la Comisión Nacional de Televisión, la parte más interesante que tenía es que era un ente autónomo del Gobierno y que garantizaba por su autonomía que los contenidos de televisión no queden bajo el control del Gobierno. Entonces esto que era una conquista constitucional, fue lo que no le gustó mucho tiempo a mucha gente, y entonces la Comisión nació con enemigos porque nació autónoma, aunque en teoría. La verdad es que la Comisión nunca fue autónoma, y el Gobierno siempre pretendía, y algunos entes privados, hacer creer que el problema de la Comisión era la autonomía, cuando en realidad durante los 15 años de su existencia, los gobiernos de turno siempre controlaron la Comisión, no solamente porque tenían dos miembros de Junta facultados por Constitución sino que el tercero, el cuarto y el quinto casi siempre los manipulaba el Gobierno. O sea el tercero lo ponían los canales regionales, que son los gobernadores, y los gobernadores eran manipulados por el alto Gobierno, por el Ministro de Turno. Con ese ya tenían la mayoría.

Fuera de eso, en las demás elecciones siempre manejaron muy mal desde los gobiernos, todos los gobiernos, lo que era la representación democrática que pretendió la Constitución del 91. Nunca las elecciones fueron transparentes, siempre fueron unas elecciones en donde se cambiaron las reglas de juego a conveniencia del ministro de turno.

Entonces qué logró cuando se acaba la Comisión, le quitan el carácter constitucional, le quitan la autonomía, nombran un ente aparentemente independiente, pero depende de la voluntad del ministro, y las elecciones siguen manejándolas desde el Ministerio. Entonces, mejor hubiera sido que le quitaran el sentido constitucional y de autonomía al ente regulador de televisión y hubieran hecho una dependencia del Ministerio. Entonces no tendrían ni siquiera los problemas que tienen ahora que hay una especie de semiautonomía. La autonomía es o no es.       

ENS:¿Ve ambiente en el país para un tercer o cuarto canal privado de televisión?

FA: Claro que hay un ambiente desde el punto de vista técnico, desde el punto de vista de la necesidad de la pluralidad informativa, de la libre competencia, desde el punto de vista de varios factores hay ambiente, pero por extrañas razones Caracol y RCN siempre han manejado el duopolio y son los menos interesados en que haya esto. Y como el tercer canal la vez pasada fracasó porque el gobierno de Uribe quiso entregarlo con nombre propio y algunos comisionados se le atravesaron en esto, el Consejo de Estado también se atravesó, entonces fracasó el intento de tener un tercer canal.

Siempre soy de la idea de que deberían existir tres y cuatro canales. Ellos argumentan que la torta publicitaria no alcanza para tantos, eso es una falacia porque la torta publicitaria no debe ser la preocupación del Gobierno ni de la entidad reguladora sino que debe ser una preocupación de los privados, y si uno abre cuatro canales y se meten cuatro canales debe ser porque ellos saben cómo conseguir la torta publicitaria. En los demás países del mundo existen cuatro-cinco canales.

Tal vez no habrá una gran torta publicitaria como hay para dos más, pero de resto ambiente sí hay pero intereses económicos poderosos en contra de ese ambiente también hay.

Contenidos

Álvarez consideró que desde el punto de vista contenidos, la televisión colombiana es regresiva. “Es contraria a la construcción de valores, contraria a la construcción de pensamiento, a la construcción de conocimiento”. Añadió que si la televisión no se usa para eso, “entonces se está usando para unos fines mercantiles”.