Poniendo como ejemplo el caso de un soldado bachiller que murió en extrañas circunstancias a finales de octubre en el Batallón 20 de Julio en Bogotá, el senador del Movimiento MIRA, Manuel Virgüez, le pidió al Gobierno replantear la prestación obligatoria del servicio militar.

Según el Parlamentario, además de ser una cuota de sacrificio de las familias humildes del país, estos jóvenes no reciben las garantías laborales que debe recibir cualquier trabajador.

Afirmó Virgüez que este tipo de soldados no son afiliados a seguridad social y apenas reciben una bonificación de 82 mil pesos mensuales de la cual les son descontados los materiales de aseo.

Citó una sentencia de la Corte Constitucional que obliga al Estado colombiano a por lo menos pagarles el 70% de un salario.

El Parlamentario agregó que a pesar de no gozar de estas garantías, sí se les aplica la Justicia Penal Militar si cometen alguna infracción.

EL NUEVO SIGLO: - ¿Qué llamado le hace usted al Gobierno respecto de las condiciones laborales de los soldados bachilleres?

MANUEL VIRGÜEZ: Quiero hacer un llamado al Gobierno nacional para que comience a replantear lo que tiene que ver con el servicio militar obligatorio en Colombia. Cada vez los Distritos Militares están cumpliendo las normas para incorporar jóvenes y de esta manera definirles su situación militar a miles de muchachos. Son 82 mil en promedio al año.

ENS: - ¿Cuáles son las condiciones laborales de estos uniformados?

MV: .A ellos no les llega el mejor bienestar en materia de salud, en materia de alimentación. A ellos no se les cumple la ley laboral. Las sentencias de la Corte Constitucional obligan al Estado colombiano a por lo menos pagarles el 70% de un salario. Esa bonificación debe ser en efectivo. Ni siquiera esos recursos se los entregan porque de ahí les hacen descuentos para elementos de aseo y las insignias deben comprarlas para poderlas portar en su uniforme. Hoy se viola la ley laboral respecto a ellos.

ENS: -¿Sin embargo, si cometen infracciones son juzgados con severidad?

MV: Se les aplica la Justicia Penal Militar, si desertan los sancionan entre seis meses a dos años.

ENS: -¿Afirma usted que estos soldados tampoco hacen un aporte clave en la vigilancia de las ciudades?

MV: Son jóvenes que son cuota de sacrificio por parte de las familias colombianas y que lamentablemente no brindan el aporte que los colombianos esperan en cuanto a seguridad democrática se refiere, especialmente en las ciudades.

ENS: -  ¿La llegada del posconflicto implica reformar el servicio militar?

MV: Es lamentable este esquema. El sistema militar obligatorio debe replantearse. El llamado que le hago al Gobierno es a que a propósito de este proceso de paz, de llegar un escenario de posconflicto, que inmediatamente comience a desmontar el servicio militar obligatorio. Los traumas que están padeciendo madres y jóvenes en el país que intentan definir su situación militar, que intentan demostrarle al Ministerio de Defensa causales de exención para no prestar el servicio, están viendo cada vez más imposibilitadas sus aspiraciones porque se incorporan jóvenes con problemas de salud y finalmente el Estado debe pagar indemnizaciones afectando el sistema.

ENS: - Además de estos ¿el sistema de reclutamiento es obsoleto?

ENS: - ¿Hay desatención de las guarniciones de las necesidades de sus soldados?

MV: También queremos llamar la atención de las inspecciones generales de cada fuerza, para que atiendan estas situaciones. Estos hechos aumentan la imagen negativa que ofrece a la Fuerza Pública. También a las autoridades judiciales para que con prioridad reciban estos casos y les podamos dar una respuesta a las familias, a las víctimas que quieren respuesta por parte del Ejército ante estos hechos lamentables.

El sábado 27 de octubre el soldado bachiller Deivid Alexánder Cruz Devia de 19 años, quien prestaba servicio en el Batallón 20 de Julio de Bogotá apareció muerto en cercanías a la guarnición después de que fuera reportado  desaparecido. Aunque estaba prestando guardia, Cruz Devia se ausentó del lugar y dos horas más tarde apareció fuera del batallón con dos tiros de fusil en su cabeza.

El senador Manuel Virgüez dijo que el posconflicto obligaría a replantear el modelo de reclutamiento.