Eliminar Inpec sería como remendar una camisa vieja con un retazo: Espíndola | El Nuevo Siglo
Sábado, 6 de Septiembre de 2014

Para él, lo que hace falta es una “política pública en materia de resocialización y rehabilitación”

“Lo que  hoy estamos queriendo es remendar la camisa vieja con un retazo”, dijo el exsenador Édgar Espíndola, de Opción Ciudadana, a propósito de la propuesta de liquidar el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).

El excongresista precisó que “el problema no es del Inpec como tal. El gran problema es la falta de política pública en materia de resocialización y rehabilitación”.

“Creo que el sistema que tenemos es un sistema anacrónico, que ya colapsó y ahora le queremos echar la culpa al Inpec”, anotó.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo analiza el proceso de paz con las Farc?

ÉDGAR ESPÍNDOLA:El proceso de paz, como se advirtió el primer día, es un proceso donde las Farc van a buscar al máximo la dilatación de los diálogos. De hecho se había planteado que en noviembre del año pasado se tendría ya un acuerdo con la guerrilla de las Farc. Sin embargo, ya vamos para el segundo año y seguramente la guerrilla va a seguir alargando el diálogo, porque es parte de la estrategia que ella ha planteado dentro de la mesa de negociación de La Habana.

Ahora, nosotros consideramos que es muy importante llegar a acuerdos serios que les permitan a los colombianos no tener más la amenaza del terrorismo, acuerdos en los que haya sinceridad, para que finalmente se pueda cesar el conflicto armado interno en Colombia, que nos permita tener una visión diferente de país con oportunidades diferentes para todos, ya que la guerra lo que genera es pobreza, ruina y muerte.

ENS: ¿Cómo ve la participación de las víctimas?

EE:El tema de las víctimas es el más sensible de todos, porque si hay un verdadero arrepentimiento de los actores del conflicto (porque han matado, han sacrificado a mucha gente), si hay un verdadero arrepentimiento, eso es bueno, eso es sano.

El perdón creo que es una consecuencia del amor. Ojalá que pueda tener una amplia representación de las víctimas, pero no para que las doblevictimicemos, sino para que tengamos un encuentro de perdón y reconciliación.

ENS: ¿Quiénes hacen falta en la mesa de las víctimas?

EE:A mí me parece que hacen falta delegados de las iglesias cristianas, porque muchos pastores han sido víctimas de muerte por parte de la guerrilla de las Farc. Muchas iglesias han sido cerradas, muchos creyentes desplazados en muchas partes del país, como en el Guaviare, en Norte de Santander, en el Caquetá, en el Putumayo.

Hay muchas iglesias cerradas, amedrentadas por la guerrilla, que todavía persiste en involucrarlos en el conflicto armado, violando el Derecho Internacional Humanitario, los derechos humanos de los que predican la palabra del Señor en esas zonas del país.

ENS: ¿Esa inquietud, ya se la dio a conocer al Gobierno?

EE:Nosotros le hemos hecho alguna mención. Pero bueno, yo aspiro a que el Gobierno realmente piense que la iglesia cristiana no se puede quedar por fuera, porque la iglesia cristiana hoy sigue siendo objeto de amenazas y de fuerte presión por parte de la guerrilla.

En muchos sitios, reiteró, están cerradas las iglesias y no se permite que se predique la palabra del Señor. 

<FOTOLEAD> “CREO QUE el sistema que tenemos es un sistema anacrónico, que ya colapsó y ahora le queremos echar la culpa al Inpec”, anotó el exsenador Édgar Espíndola.

 

 

Inpec

 

Sobre la propuesta de liquidar el Inpec, Espíndola dijo que “lo que hoy estamos queriendo es remendar la camisa vieja con un retazo”.

“Es decir”, agregó, “el problema no es del Inpec como tal. El gran problema es la falta de política pública en materia de resocialización y rehabilitación de los seres humanos que están confinados en cuatro paredes”.

“Creo que el Gobierno colombiano tiene que empezar a involucrar los factores que le permitan a los internos tener una rehabilitación, resocialización y una readaptación de ellos mismos con sus familias, con su hogar y con la sociedad”, manifestó Espíndola, anotando que “no podemos simplemente meter presas a las personas. Hay que darles posibilidades para que trabajen y duerman en la noche. Y los presos que no son peligrosos, que salgan a trabajar y a producir. Creo que el sistema que tenemos es un sistema anacrónico, que ya colapsó y ahora le queremos echar la culpa al Inpec”.