La delegación de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea emitió su primer informe parcial sobre la jornada electoral que se desarrolló el pasado domingo 13 de marzo, donde se eligieron los nuevos miembros del Congreso de la República, así como los candidatos de las consultas interpartidistas.
En términos generales, los representantes indicaron que fue “una elección legislativa transparente”; sin embargo, hicieron referencia a una serie de hechos que pudieron empañar la actividad democrática en el país, como la compra de votos y algunos acontecimientos sobre la elección de las 16 circunscripciones transitorias de paz para las víctimas del conflicto.
“La misión constató numerosos indicios de compra de votos y presenciaron incluso algunos casos, especialmente en la región de la costa Atlántica y en los departamentos con mayor población vulnerable”, en referencia al primer punto, e incluso mencionó los recientes actos revelados por las autoridades de Aída Merlano y Laureano Acuña.
De igual manera, la MOE-UE manifestó que en 7% de las mesas de votación, donde hicieron seguimiento, se observó constantemente esta práctica irregular. “Observamos el intento de los votantes de fotografiar o dejar una marca en sus tarjetones”, señalaron. Asimismo, indicaron que el 18% de los puntos no cumplieron con el secreto del voto.
Curules de Paz
Por otra parte, la Misión Europea designada para Colombia también se refirió a la elección de los 16 escaños congresionales para las víctimas del conflicto, algo que fue reconocido por los miembros de esta organización internacional. No obstante, comentaron los puntos frente a las irregularidades cometidas durante su proceso de elección, entre ellos la seguridad de los aspirantes.
“Si bien el 40% de los candidatos habría recibido algún tipo de protección en el marco del Plan Ágora 2 del Ministerio del Interior, muchos afirmaron que los planes de seguridad se desplegaron tarde o fueron insuficientes”, se lee en el documento.
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Otro de los aspectos relevantes fue la desigualdad ante el acceso de recursos para desarrollar las campañas, ya que en la normativa se mencionaba que “las formas de financiación de las circunscripciones territoriales de paz eran la pública y los recursos propios”.
“Sin embargo, la mayoría no pudo acceder a los recursos públicos debido a que les exigían una póliza de garantía que no fue vendida por las aseguradoras”, sumado a que en los últimos días antes de las elecciones fue cuando se entregaron en su totalidad. Frente a ello, la Misión indicó que “este hecho habría beneficiado a los partidos tradicionales”.
También hizo énfasis en los candidatos que aspiraron a las curules, bien sea por cuestionamientos o por respaldos políticos. Uno de ellos fue Jorge Rodrigo Tovar, quien resultó electo en la circunscripción de Cesar-Magdalena, pero que fue criticado por otros candidatos.
“El acto legislativo que las creó dice no tener en cuenta las cabezas municipales, pero varios desplazados o víctimas del conflicto no pudieron participar de este proceso”, concluyeron los observadores.
Adicionalmente, la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea resaltó la labor de la Registraduría frente a la separación de tarjetones, con lo que pretendían evitar la anulación de los votos, y la pedagogía electoral.