Luego de que Gustavo Petro anunciara, durante la ceremonia de ascenso de 42 nuevos generales de las Fuerzas Armadas, su voluntad de adquirir nuevos aviones para la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), la polémica no se ha detenido y en esta ocasión las críticas provienen de los miembros de la misma coalición del Pacto Histórico.
El anuncio de Petro se da luego de la visita, a principios de este mes, de una comisión del Ministerio de Hacienda francés a Bogotá, encuentro en el que se pusieron en conocimiento del Gobierno las condiciones de financiación para un posible proceso de compra de aviones del tipo Dassault Aviation Rafale C/F3. Además, una delegación de oficiales y suboficiales de la FAC está próxima a viajar a Francia en las próximas semanas.
Así, la intención de la Fuerza Aérea Colombiana es la de hacerse a un número considerable de aeronaves nuevas, aunque inicialmente se firmaría por un paquete de entre 12 a 15 unidades, esperando poder establecer los sistemas que integrarán el modelo a comprar, en conversaciones técnicas que se adelantarían para tales efectos.
De esta manera, se espera remplazar la flota de aviones Kfir que se compró a Israel entre 1987 y 2009. La compra de las nuevas aeronaves podría superar los 26 billones de pesos.
Oposición
El propio hijo del presidente, el diputado del Atlántico Nicolás Petro, escribió a través de sus redes sociales: “No estoy de acuerdo con la compra de aviones de combate. Todo para la paz, nada para la guerra”.
Llamó la atención que el actual presidente del Congreso, Roy Barreras, escribiera en su cuenta de Twitter que no era ni oportuno ni conveniente gastar esos recursos en aviones de guerra. “Necesitamos tantos recursos para la lucha contra el hambre; para la educación y empleo de los jóvenes; el ingreso mínimo vital de nuestros viejos; para el campesinado y la compra de tierras; para invertir en la paz, que no parece oportuno ni conveniente gastar en aviones de guerra”.
Aunque reconoció que hay limitaciones en la flota aérea, aseguró que “las nuevas y positivas condiciones internacionales”, entre ellas el restablecimiento de relaciones con Venezuela, “aplazan esa urgencia”.
Otro de los senadores que se refirió al tema fue Jota Pe Hernández, de la Alianza Verde, partido que hace parte de la coalición de Gobierno, quien trinó: “Antes de ser presidente, Petro se opuso a la compra de los aviones. Ahora incoherentemente anuncia que sí los comprará. Yo me pregunto: ¿Para qué aviones de guerra si se avecina una paz total y por qué esta gran inversión cuando se avecina una profunda crisis económica?”.
Hernández se refería a unos trinos del entonces senador y candidato Gustavo Petro, quien había escrito: “La compra de aviones en medio de una crisis como la que vivimos es el máximo grado de irresponsabilidad en un gobernante. No entiendo un país que pueda aplaudir que no se usen los recursos para salvar la vida y en cambio sí en instrumentos para bombardear niños”.
Por su parte, la senadora Martha Peralta Epieyú, del Pacto Histórico, dijo: "Claro y sencillo. No estoy de acuerdo con la compra de aviones de combate, en ningún gobierno. Existen otras prioridades urgentes. Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”.
De igual modo, “¿para qué aviones de guerra si se avecina una paz total y por qué esta gran inversión cuando se avecina una profunda crisis económica?”, preguntó el senador Jonathan Ferney Pulido de la Alianza Verde.
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Desde la oposición
Pero si le llovieron críticas desde los partidos de coalición, no podían faltar en la oposición. La senadora María Fernanda Cabal (Centro Democrático) se refirió a este hecho como “la lógica de los izquierdistas”. “Cuando los aviones costaban 14 billones de pesos, no era procedente comprarlos, pero ahora que costarán 26 billones de pesos, les parece muy buena la inversión”, opinó en sus redes.
Jorge Enrique Robledo, otro de los grandes críticos del actual gobierno, recordó el día en que Joe Biden llamó a Petro para recordarle la oferta de aviones F-16.
Finalmente, Enrique Gómez sostuvo: “Sin duda alguna los aviones que comprará Petro serán impulsados por paladas de leña. Nada como la hipocresía de la cuadrilla del Pacto Histórico”.