El 24 de septiembre será radicado en la Secretaría de la Cámara de Representantes el proyecto de ley enfocado a hacer una transformación a la Ley Quinta de 1992. Por ahora la comisión accidental del Congreso encargada del tema se encuentra revisando todos los proyectos presentados hasta el momento para saber de qué forma articularlos y proyectar uno solo.

El anterior trabajo lo están desarrollando como parte del compromiso que adquirieron las mesas directivas de Cámara y Senado para poner a la Corporación acorde con los retos actuales que enfrenta, tal y como lo explicó la representante Gloria Stella Díaz, una de las integrantes de la Comisión Accidental de Reforma a la Ley Quinta.

“La Ley Quinta fue expedida hace muchos años y, al igual que todo en el país, ha cambiado, la dinámica política es diferente y la Ley fue hecha para las situaciones que se vivían en ese momento y hoy no está hecha para unos partidos políticos que trabajan en bancada y tenemos que empezar a trabajar en eso. Hay que adecuar la Ley a los ajustes legislativos que han venido funcionando y por eso es urgente revisarla y actualizarla”, explicó la Representante.

Una opinión similar tiene el coordinador de la Comisión Accidental senador del Partido de La U Manuel Enríquez Rosero, quien considera que la reestructuración de la Ley Quinta hará que el Congreso se ponga al día con los avances tecnológicos, lo que permitirá una dinámica distinta entre la Corporación y la ciudadanía.

“El actual reglamento del Congreso es una norma anacrónica, expedida hace más de 20 años. Adicionalmente, presenta vacíos normativos que propician interpretaciones que en nada favorecen la imagen institucional y colocan en peligro el trámite legislativo de los proyectos de ley, como sucedió con la fallida Reforma a la Justicia”, explicó Enríquez

Otro de los aspectos que buscan desarrollar a través de la reforma es la facilidad y rapidez para los procesos tanto en la Cámara como en el Senado, según explicó el presidente del Congreso Roy Barreras, quien considera que el trabajo que vienen adelantando para reformar la Ley Quinta permitirá acabar con los pupitrazos de fin de legislatura, el trabajo con celeridad y eficacia en los procesos, la inclusión de la participación ciudadana, la transparencia en las elecciones a cargo del Congreso y la eficacia en el trámite y aprobación de los diferentes proyectos de ley.

Pero el proyecto que radicarán no solo será con las iniciativas de carácter legislativo ya presentadas, sino que también tendrán en cuenta algunas recomendaciones planteadas por organizaciones civiles, Congreso Visible y el Instituto de Ciencia Política. Según conoció este Diario, ya hay un texto base en el que han venido trabajando los congresistas, quienes se volverán a reunir la próxima semana para seguir revisando las iniciativas radicadas hasta el momento.

El presidente de la Cámara de Representantes Augusto Posada resaltó la importancia de que las dos Corporaciones estén trabajando en el desarrollo de la iniciativa.

“Este es un mensaje claro de voluntad política de que queremos reformar el Congreso, que necesitamos una Corporación moderna de cara a las exigencias del país actual, ya nos pusimos de acuerdo y el Senado iniciará con la reforma a las conciliaciones y en la Cámara se presentará la reforma estructural que consideramos debe tener el nuevo Congreso”, explicó.

Trámite en Senado

La primera parte de la reforma a la Ley Quinta arrancó oficialmente esta semana, cuando el senador Manuel Enríquez Rosero radicó en la Secretaría de Senado el proyecto que modifica las Comisiones de Conciliación en el Congreso. La iniciativa busca “poner a tono” la Corporación con las jurisprudencias de la Corte Constitucional sobre procesos legislativos, y precisa términos de lo que se puede o no hacer y aprobar en una conciliación.

Entre sus alcances se encuentran: “No se podrán considerar artículos nuevos ni que hayan sido negados, sin publicar en la gaceta, sin escuchar las observaciones de los interesados en el proyecto, y se pondrá límites a los términos de la conciliación”.

Se conoció que algunos congresistas están interesados en que la reforma a la Ley Quinta esté lista lo antes posible y para ello han pensado en la posibilidad de discutirlo en sesiones conjuntas, pero para eso necesitarán que el trámite de los proyectos tenga un mensaje de urgencia de parte del Gobierno. La idea aún no ha sido descartada y por el contrario parece estar tomando fuerza entre los legisladores.

Prohibir voto secreto

Modificar el sistema de las elecciones en el Congreso es el objetivo de un proyecto de ley que busca prohibir el voto secreto en las corporaciones. Para lograrlo, propone una modificación a la Ley Quinta de 1992 y se suma así a una lista de otros ya radicados encaminados a hacerle algunas modificaciones a esta Ley. Según el texto, la iniciativa busca “garantizar la regla general del voto nominal, la publicidad en las actuaciones del Congreso y revestir la transparencia de los procesos de elección desarrollados por la Corporación”.

Comisión legal para afrocolombianos

El proyecto de ley tiene por objeto asegurar la protección de los derechos colectivos e individuales de la población afrocolombiana, para el mejoramiento de sus condiciones y calidad de vida a partir de la gestión legislativa, institucional y organizativa, y el control político que realicen los congresistas afrocolombianos a través de una modificación a la Ley Quinta que permita la creación de una Comisión Legal para la Protección de los Derechos de la Población Afrocolombiana.

Oficina de Cultura

A través de una modificación a la Ley Quinta de 1992 se busca crear la Oficina de Cultura en el Congreso de la República, con el propósito de abrir un espacio reconocido, legítimo, para la preservación, el desarrollo e impulso de las diferentes expresiones del arte desde el Congreso, como escenario natural de la historia, la democracia y la multiculturalidad del país.