Liberales y De La Calle | El Nuevo Siglo
Martes, 7 de Junio de 2016

Las cuentas en algunos sectores del partido Liberal en torno a una eventual candidatura presidencial del hoy jefe negociador gubernamental en La Habana, son las siguientes: el acuerdo final tendría que estarse firmando, a más tardar, a finales de julio, fecha para la cual ya debe haberse conocido el fallo de la Corte Constitucional sobre el plebiscito por la paz. Bajo la tesis optimista de que la norma será avalada por el máximo tribunal, entonces el presidente Santos pediría al Congreso que se convoque a las urnas, lo que el Parlamento tramitaría rápidamente y ya a mediados de agosto la Registraduría empezaría a organizar todo lo relativo a la votación en que los colombianos deben decidir si aprueban o no lo pactado con las Farc en Cuba. Esto implicaría, entonces, que en la última semana de octubre podría estarse dando la refrendación popular del acuerdo final con la guerrilla, que en las toldas rojas están confiados de que será positiva, es decir que el Sí ganará en las urnas y el proceso de paz tendrá su espaldarazo definitivo.

 

Etapa dos

Si ese cronograma se cumple de acuerdo a lo presupuestado, De la Calle estaría algunos meses más al frente del proceso, especialmente para arrancar en el Congreso todo el mecanismo legislativo especial que, en un plazo de un semestre, debe tramitar y aprobar todas las leyes y reformas constitucionales que se deriven del acuerdo final de paz. También manejaría lo relativo a la presentación de la ley aprobatoria que debe elevar todo el texto del acuerdo al bloque de constitucionalidad. Lo que tiene que ver con elevarlo a la categoría de “acuerdo especial” a la luz de los Convenios de Ginebra, así como de anexarlo a la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, no lo correspondería De la Calle sino que estaría a cargo de la canciller e integrante del equipo  negociador de paz, María Ángela Holguín.

 

Si la Corte…

Claro todo ese procedimiento legislativo parte de la base de que, en primer lugar, la Corte no sólo haya avalado la ley de convocatoria del plebiscito por la paz, en los términos en que fue aprobada por el Congreso meses atrás (es decir con el umbral del 13 por ciento y el carácter vinculante de la decisión en las urnas), sino que ya para octubre  el mismo alto tribunal haya despejado alguna de las seguras demandas que vendrán contra el acto legislativo para la paz. Como se sabe, esa reforma constitucional que establece todo el mecanismo para la implementación del acuerdo final de paz (proyecto al que sólo le falta la instancia de conciliación) tiene muchos críticos, especialmente los que dicen que arrastra vicios graves como el de violación al principio de consecutividad y una posible sustitución de la Constitución.

 

Etapa tres

Aun así, los liberales consideran que De la Calle ya podría estarse separando del proceso de paz en el primer trimestre de 2017, pasando a un descanso de algunos meses y alrededor de la mitad de año anunciando una posible aspiración presidencial para presentarse como el “candidato de la paz”. Paradójicamente en La U hay quienes hacen las mismas cuentas pero con De la Calle como candidato de esa colectividad.