Aunque la posibilidad de retirar el proyecto de reforma a la educación superior no está siendo contemplada por el Gobierno, trascendió que algunos congresistas de la coalición de Unidad Nacional están madurando una propuesta para el presidente Juan Manuel Santos y la ministra de Educación, María Fernanda Campo, con el fin de buscar una salida intermedia que implique satisfacer en parte las posiciones del Ejecutivo y de los estudiantes que impulsan el paro nacional contra la iniciativa que hace curso en el Parlamento. 

 

Movida educativa (II)

“… La idea es muy sencilla: se trataría de proponerse al Gobierno, desde la Mesa de Unidad Nacional, con el compromiso solemne de todos los partidos que hacen parte de ella, que retire el proyecto de reforma a la Ley 30, pero que, a la par, se firme un acuerdo político en el que quede claro que la iniciativa volverá a ser radicada, sin excepción ni condicionamiento alguno, el 16 de marzo de 2012, es decir, cuando comience la próxima legislatura parlamentaria… Estaríamos hablando aquí de aplazar la discusión de la reforma por mes y medio de trámite parlamentario (lo que resta de esta legislatura que termina el 16 de diciembre)”, explicó uno de los parlamentarios que conoció los pormenores de la propuesta.

Movida educativa (III)

“El mismo día que se retire el proyecto de reforma, los voceros del estudiantado, el Ministerio de Educación y los rectores de las universidades públicas y otros actores del sistema firmarán un cronograma de reuniones a cumplirse entre octubre, noviembre, diciembre, enero y febrero para discutir, punto por punto, los cambios que propone la reforma… El mismo día de la firma de ese cronograma, los estudiantes suspenderían el paro y volverían a clases para tratar de salvar el semestre”, agregó el parlamentario, que pidió el anonimato. 

Movida educativa (IV)

Según la fuente consultada, “en el acuerdo de retiro del proyecto quedaría claro que el aplazamiento de la reforma se da estrictamente para la búsqueda de consensos sobre los cambios que requiere el régimen de educación superior pero no contemplaría que para volver a radicar la iniciativa en el Congreso sea necesario lograr un total consenso… El Gobierno cedería en retirar el proyecto y volver a discutirla con los estudiantes y rectores, y éstos tendrían claro que, contra viento y marea, la reforma será radicada de nuevo en marzo, se llegue o no a un consenso”.