No hay mucho optimismo en la bancada de La U sobre la posibilidad de que el hoy embajador de Colombia en Estados Unidos, Juan Carlos Pinzón, renuncie en el corto plazo y acepte regresar al país para asumir las riendas del llamado “partido de gobierno”. Por lo menos así lo indicó un senador de esa colectividad que considera que el exministro de Defensa podría ser una “buena carta” para asumir la jefatura única del partido en el segundo semestre, cuando La U debe empezar a definir cuáles serán las reglas del juego para arrancar la campaña presidencial en 2017. Según el congresista, “cada vez vemos menos perfiles extraparlamentarios que encajen con lo que necesitamos en el partido para abanderarlo… A Pinzón lo vemos bien algunos, pero otros consideran que tiene un perfil crítico al proceso de paz en plena recta final y con refrendación a bordo”.

Expectativa tributaria

Los empresarios están esperando que el Gobierno les aterrice “a parágrafos e incisos” concretos cómo se cumplirá la promesa de disminuir la carga tributaria sobre el sector productivo, con el objetivo de generar más empleo. Como se sabe, dicha promesa debe tramitarse en el proyecto de reforma tributaria estructural que el Ejecutivo indicó que se presentará apenas comience la próxima legislatura, en julio. El problema radica en que al interior de los propios gremios hay diferencias en torno a cuál sería ese mecanismo tributario y cómo se compensaría este con el anunciado desmonte de más exenciones a las llamadas “rentas de capital”.

¿Retirarlo?

Han sido tantas las dudas que ha despertado el proyecto de ley que regula el servicio de seguridad privada en el país, que no se descarta que la iniciativa termine hundiéndose. Por lo menos así lo indicaron varios parlamentarios a un periodista de EL NUEVO SIGLO que les indagó sobre la gran cantidad de conjeturas que se hacen respecto a la forma en que han modificado muchos artículos en las últimas dos semanas. Aunque el Gobierno y varias superintendencias han ayudado a ajustar no pocos de los alcances de la iniciativa, sobre todo en lo relativo a la limitación a la participación de capital extranjero, mecanismos de transparencia, reglas del juego laborales y otros aspectos relacionados con transparencia contractual, el proyecto todavía genera mucha prevención y crecen las voces que consideran que lo mejor sería hundirlo y empezar, la próxima legislatura, de cero.

La Niña y el café

Los caficultores están muy preocupados por el impacto que pueda llegar a tener el fenómeno de La Niña en los ciclos de cosecha del próximo año. Según voceros de ese gremio, si bien la sequía del primer semestre tuvo consecuencias en la producción, el exceso de agua que se prevé para el segundo y buena parte del primero de 2017 es tanto o más peligroso para este cultivo. De allí que se esté pensando en pedir al Gobierno que genere, desde ya y con la correspondiente reserva presupuestal, un plan de prevención y contingencia que permita amortiguar el impacto de la dura temporada invernal que se pronostica para el próximo año cafetero.