¿Prohibir camisetas? | El Nuevo Siglo
Lunes, 23 de Septiembre de 2013

Tras la nueva tragedia que se presentó este fin de semana en Bogotá, en donde un grupo de hinchas violentos atacó a un padre e hijo porque este último vestía la camiseta de un equipo rival, causándole la muerte al progenitor, que resultó ser un sargento retirado, volvió a escucharse la propuesta para que se prohíba a todos los ciudadanos andar en sitios públicos, a excepción de los escenarios deportivos propiamente dichos, con esta clase de prendas. La medida, por drástica que parezca, pareciera ser la única solución en el corto plazo para evitar que más vidas de inocentes se pierdan por cuenta de los vándalos que llevan su pasión deportiva a los extremos más violentos, convirtiéndose en claros peligros para la sociedad.

 

Se consultó, pero…

 

“… En el pasado contemplé, junto a otro parlamentario, la posibilidad de presentar un proyecto de ley con el fin de prohibir a toda persona, ya se trate de un adulto o de un menor de edad, que vista prendas distintivas de los equipos de fútbol en sitios públicos… La propuesta se consultó de manera privada con algunos expertos… Los conceptos jurídicos fueron contradictorios porque mientras algunos abogados dijeron que era viable al Estado prohibir cualquier acto o circunstancia que pusiera en peligro o amenaza a un particular, otros constitucionalistas advirtieron que la vestimenta, salvo aquella que tiene la característica legal de -‘uso exclusivo’ de las autoridades- hace parte del llamado derecho al libre desarrollo de la personalidad y no puede ser restringido de ninguna manera”, precisó una alta fuente parlamentaria a un periodista de EL NUEVO SIGLO.

 

Ejemplos internacionales

 

Sin embargo, la propuesta de prohibir el porte de vestimentas o elementos distintivos de algún tipo de equipo deportivo, no necesariamente de fútbol, no es nueva. Todo lo contrario, está basada en experiencias internacionales, como por ejemplo en algunas ciudades de Estados Unidos en donde se acudió a esta medida para frenar los enfrentamientos entre pandillas juveniles. Aunque inicialmente se prohibía que en escuelas y colegios se pudiera portar símbolos que permitieran identificar a determinado alumno como perteneciente a tal pandilla, se encontró que los bandos empezaron a usar camisetas, gorras, otras prendas y tatuajes de determinados equipos de béisbol, fútbol americano o baloncesto para diferenciarse dentro del conglomerado de alumnos. Se procedió, entonces, a prohibir también el uso visible de estos elementos en los predios estudiantiles.

 

Ya en Colombia

 

En Colombia ya existen colegios públicos y privados, incluso en aquellos en donde no hay un uniforme de diario obligatorio, en donde rectores y profesorado prohíben a los alumnos que puedan portar camisetas, gorras, cinturones u otros elementos alusivos a equipos de fútbol. Esto se hace con el fin de evitar que dentro de los alumnos se generen rivalidades por pasiones deportivas mal manejadas y se termine en enfrentamientos entre partidarios de uno y otro club de balompié.

 

¿Proyecto de ley?

 

Por ahora es claro que en el Congreso se volverá a hablar del tema de las llamadas “barras bravas” y las tragedias que los hinchas desadaptados están causando a diario, no sólo en estadios y sus alrededores, sino también en barriadas y carreteras. Incluso no se descarta que en el marco del proyecto que presentó el Ministerio de Defensa para agravar la pena a los manifestantes encapuchados que protagonizan desórdenes, también se incluya una medida para castigar de forma más drástica a los hinchas violentos en el fútbol.