Off the record | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Viernes, 21 de Diciembre de 2018
Redacción Política

Contra-crítica al Polo

 

“…No hallan que escupir para arriba”. Esa fue la expresión que un parlamentario de Cambio Radical utilizó esta semana al hacer un pequeño ‘recorderis’ de las críticas que desde distintos sectores de la oposición se le hicieron a finales de octubre a esa colectividad política por la renuncia del representante a la Cámara por Bolívar, Hernando Padaui, corridos un poco más de tres meses de su posesión. Varios parlamentarios de partidos de izquierda reprocharon que Cambio Radical hubiera avalado a un congresista que duró tan poco tiempo en la curul y renunciara con el objetivo de buscar la Gobernación de Bolívar en los comicios de octubre de 2019. Sin embargo, ahora que esta semana se conoció la renuncia del senador Leónidas Gómez, de la bancada del Polo –y quien intentaría ser de nuevo candidato a la Gobernación de Santander–, desde Cambio Radical algunas voces indicaron que no veían en ese partido ni en el resto de la oposición la misma crítica e indignación que en el caso Padaui.

 

Dilema uribista

 

También se sabe que en Centro Democrático hay dos congresistas que continúan pensando si es viable renunciar para ser candidatos a la Alcaldía de Bogotá. Se trata de la senadora Paloma Valencia y el representante a la Cámara, Samuel Hoyos, a los que el propio expresidente y senador Álvaro Uribe les recomendó semanas atrás analizar una eventual postulación a la sucesión de Enrique Peñalosa. Se sabe que incluso el tema se ha consultado a la Casa de Nariño tanto desde el punto de vista de ‘guiño’ político como de la interpretación de algunos conceptos que ha rendido al respecto la Sala de Consulta del Consejo de Estado.

 

Tesis en contra…

 

Lo cierto es que, según lo indicó el informe publicado ayer por EL NUEVO SIGLO, no hay todavía claridad meridiana en torno a si los actuales parlamentarios pueden renunciar, incluso faltando menos de un año para los comicios regionales y locales, con el fin de postularse a los mismos. Algunos juristas e incluso dirigentes partidistas sostienen que los actuales senadores y Representantes ya están inhabilitados o incursos en evidente incompatibilidad, al tenor de los artículos 179 y 181 de la Constitución así como de otras normas legales y jurisprudencia de la Corte Constitucional. Tres argumentos sustentan esa tesis: ya falta menos de un año para las urnas y menos aún para la inscripción de candidatos. A ello se suma que el período para el que fue elegido el actual Congreso (2018-2022) se cruza con el de los nuevos mandatarios locales a escoger en octubre (2020-2023).

 

Tesis a favor

 

Desde la otra orilla, las tesis para defender la posibilidad de que los actuales congresistas se puedan lanzar a las gobernaciones y alcaldías también son de fondo. Primero, que la obligación de renunciar un año antes al cargo de parlamentario aplica es sobre la fecha de posesión (1 de enero de 2020) y no la de elección (octubre de 2019) o de inscripción (julio de 2019). En otras palabras, que si los parlamentarios renuncian antes del 31 de diciembre próximo, un año antes de la posesión de los gobernadores y alcaldes electos, entonces no quedarían inhabilitados. Sostienen, por igual, que las reformas que se hicieron a los artículos sobre inhabilidades e incompatibilidades de los congresistas, sobre todo a la luz del Artículo 179, se cayeron o los fallos crearon un vacío legal que favorece la posibilidad de renunciar.

 

Una última

 

Es más, advierten que algunas analogías que se hacen respecto a recientes fallos del Consejo de Estado anulando elecciones de gobernadores y alcaldes, desconocen el hecho de que los congresistas son servidores públicos y no tienen la calidad de empleados públicos.