EL termómetro es un instrumento que se usa para la medición de temperatura y, a lo largo de los años, ha ido evolucionado para acomodarse a las necesidades, estos pueden presentarse con diferentes escalas, como los grados Celsius, Kelvin o Fahrenheit.
Aunque puede hablarse de que existen muchos tipos de termómetros, algunos son para el uso doméstico, como los de vidrio y los digitales, otros como los pirómetros que son los más utilizados en el ámbito sanitario y algunos se usan de manera industrial.
Dadas las condiciones mundiales que se han presentado por el coronavirus, el empleo del termómetro se ha hecho todavía más indispensable, para esto se usan los siguientes tipos:
Termómetros de vidrio: estos son los más conocidos y también llamados de líquidos, manual y de mercurio, este último dado que tradicionalmente estaba diseñado con esta sustancia, pero que luego fue reemplazada por otras tomando en cuenta que este es un elemento tóxico y podía ingresar al organismo, poniendo en riesgo la salud.
Este tipo de termómetro sirve para medir la temperatura corporal, es el más usado cotidiana y domésticamente gracias a que es fácil de conseguir y sencillo de manejar. Dentro de estos se encuentra los termómetros digitales que, a diferencia de los de vidrio, tiene un sustituto electrónico que muestra en su pantalla la temperatura.
Termómetros sin contacto o pirómetros: estos trabajan sin que sea necesario tener un contacto con el objeto al cual se le desee tomar la temperatura y se logra a través de infrarrojos que es un tipo de radiación electromagnética. Mediante una lente se capta esta radiación que es emitida por los cuerpos, esta la convierte en corriente eléctrica, la cual viaja por un circuito y, finalmente, indica en su pantalla, la temperatura del objeto evaluado. Son los más utilizados actualmente por la pandemia generada por el COVID-19, ya que evitan en el contacto físico.
Creencias erróneas
Por su constante y obligatorio uso, al que debe someterse toda la población, se han creado mitos alrededor de las consecuencias que puede generar su utilización, como que el pirómetro puede quemar o matar las neuronas poco a poco produciendo daños irreversibles en el cerebro.
Esta aseveración es aclarada por el ingeniero mecánico egresado de la UPB, Mateo Mejía Tobón, donde afirmó que “el pirómetro no ocasiona ningún tipo de daño en el cuerpo humano, ya que su funcionamiento está basado en captar la intensidad de energía radiante que emite un cuerpo y convertirla en un valor medible para nosotros, en este caso, valores de temperatura.”
Este mito comenzó a partir de que uno de sus nombres es termómetro infrarrojo, pero este nombre no hace referencia a que emita algún tipo de radiación infrarroja, sino que trabaja a partir de un sensor que es infrarrojo, esto quiere decir que no emite ningún tipo de onda, por lo tanto, no es nocivo.
Adicional a esto se conocieron comentarios donde se aseguraba que la luz con la cual trabajan estos termómetros genera problemas oculares dañando la retina, a lo que Mateo Mejía respondió diciendo que no es del todo cierto pero que hay que ser cuidadosos:
“Este dispositivo no emite una luz infrarroja, el láser es únicamente un indicador que sirve para tener referencia del lugar al que se está apuntando. Nuestros ojos son la única parte sensible a esto, pero solo sería nocivo si se apunta de manera directa a ellos y por tiempos muy prolongados.”
Muchas personas tienen dudas frente a la validez del termómetro digital, si este puede ser más eficiente que el termómetro de vidrio. “Sí puede ser más eficiente debido a que arroja su resultado de una manera más rápida y además tiene menos posibilidades de sufrir algún tipo de error por falta de calibración”, complementó el ingeniero.