Dos nuevos insectos fueron descubiertos por el investigador Camilo Flórez Valencia, quien los “bautizó” en homenaje a sus progenitores, Luz Estella Valencia y Roberto Flórez.
Camilo Flórez Valencia, magíster en Ciencias Biológicas de la Universidad CES y curador de las Colecciones Biológicas de la institución (CBUCES), desde hace seis años, nombró los insectos de la familia membrácidos en Colombia, un grupo de especies que se alimentan de la savia de las plantas y cuyas formas, algunas similares a las espinas, son muy comunes.
Para este joven biólogo de profesión los membrácidos no son sólo los seres vivos que estudia, sino que le recuerdan la estrecha relación que tiene con sus padres Estella y Roberto, por lo que decidió llamar a los nuevos especímenes: Calloconophora estellae y Problematode robertoi.
“Calloconophora estellae, dedicada a mi mamá, tiene un comportamiento de cuidado maternal impresionante: la madre deposita una secreción cerosa alrededor de los tallos cerca de sus hijos. Por otro lado, Problematode robertoi, dedicado a mi papá, lo encontramos cerca de la finca Arboloco, en Manizales, la cual compró mi papá hace unos años y ha sido un sitio en el que toda la familia ha trabajado en un proceso de restauración del bosque”, comentó Flórez Valencia.
¿Pero cómo se nombra una nueva especie? Se le otorga un apodo a un nuevo espécimen, en términos de ciencia, cuando se describe en un artículo científico y por obvias razones no ha sido nominada anteriormente. En este caso, el registro se consignó en un artículo publicado en la revista Zootaxa. Además, los registros son almacenados en una plataforma en línea llamada ZooBank. Para ello también es necesario la recolección de especímenes que puedan mantenerse intactos durante siglos en colecciones biológicas.
“El trabajo de descripción de una especie nueva implica lograr diferenciarla del resto de especies conocidas, hacer un registro fotográfico de las diferentes estructuras que permiten describirla como única y, además de esto, requiere que haya especímenes recolectados que queden en colecciones biológicas para que soporten la identidad de ese nombre. Estos especímenes depositados en las colecciones biológicas son los que respaldan el nombre de la especie”, detalló el Magíster en Ciencias Biológicas CES.
Calloconophora estellae se ha registrado hasta ahora en el municipio de Remedios, de la región del Magdalena Medio en Antioquia y en el piedemonte de la Cordillera Occidental hacia Chocó cerca del PNN Tatamá. Por su parte, el Problematode robertoi se conoce de un único espécimen recolectado cerca de la Finca Arboloco, en bosques relativamente cerca al PNN Los Nevados en Villamaría en el departamento de Caldas.