Biotransformación, tecnología al cuidado del medio ambiente | El Nuevo Siglo
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Domingo, 25 de Junio de 2023
Redacción Medio Ambiente

El uso de plásticos sus efectos en la contaminación y el reciclaje son temas que se han priorizado a nivel mundial dadas las consecuencias para la salud humana y el medio ambiente. Actualmente en el mundo, el 32% de los envases de plástico no se recogen ni se reciclan, por su parte, Colombia se enfrenta a un reto importante en cuanto a la reducción de contaminación plástica, especialmente en las regiones costeras, alrededor del 65% de los residuos sólidos terminan en los ecosistemas marinos, se calcula que el país genera anualmente entre 60 y 99 millones de toneladas de residuos plásticos mal gestionados. 

Los plásticos biodegradables y los envases compostables han surgido como alternativas a los plásticos convencionales, mientras que diferentes compañías en el mundo han volcado sus esfuerzos por el desarrollo de nuevas tecnologías las cuales permiten procesos de biotransformación que garantizan que el plástico se biodegrade en el medio natural de forma segura y rápida, sin dejar micro plásticos ni sustancias tóxicas. 

Países como India, Malasia, Filipinas y Hungría le han ofrecido a la industria, desde la ciencia y la innovación, soluciones disruptivas que sustituyen al plástico convencional, protegen los recursos naturales, la salud humana y fomenten la competitividad.  Colombia tiene el reto de avanzar en materia de protección del medio ambiente, su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), es alinear de manera coherente acciones tanto públicas como privadas alrededor de este objetivo común.

El liderazgo de Colombia en la región ha sido notable y evidente en los últimos años. Inició con la introducción de un impuesto sobre las bolsas de plástico de un solo uso en julio de 2017, cuyo propósito era frenar la basura marina, proteger los océanos e inspirar a otros países de Latam a seguir su ejemplo. En este sentido, nace la Ley 2232 del 2022 cuyo propósito, es reducir la producción y consumo de plásticos de un solo uso estableciendo nuevos requisitos legales para productores, comercializadores y usuarios; el principal efecto de esta ley es la prohibición de ciertos productos de plástico de un solo uso. Para ello, se establece una “sustitución gradual” de productos, como envases, empaques y bolsas, entre otros. 

El artículo 34 de la Ley 2232 de 2022, hace referencia a las alternativas sostenibles al plástico como la biodegradabilidad; es así que bajo el entendido que es desde la investigación y la innovación, los puntos de partida para incorporar alternativas sostenibles al plástico, reales y basadas en la ciencia, se espera que el Gobierno Nacional avance en este campo abriendo la posibilidad de traer al país nuevas tecnologías y mejores desarrollos que favorezcan el cuidado del medio ambiente, dejando en firme acciones claras en materia de desarrollo ambiental, adoptando la innovación para seguir posicionando al país como líder en sostenibilidad y protección del medio ambiente.

El mundo de hoy ha llegado a un punto de inflexión que obliga a los gobiernos y a la comunidad a replantearse grandes soluciones, muchas de ellas recogidas en procesos de cambio y acciones de mejora continua para desarrollar, desde la ciencia y la innovación, tecnologías disruptivas que sustituyan al plástico convencional, protejan los recursos naturales y la salud humana y fomenten la competitividad de la industria.



Sofía Collazo Bigliardi, científica, investigadora y experta en biodegradación, miembro del Comité de Expertos del Impala Hub y CSO de Bzero responde frente a este tema: 

Según su experiencia, ¿cuáles serían los mayores beneficios de utilizar plásticos biodegradables/compostables en un país como Colombia con ecosistemas tan diversos?

Colombia cuenta con una rica biodiversidad que abarca desde la selva amazónica hasta las regiones costeras. Sin embargo, la contaminación por plásticos supone una importante amenaza para el equilibrio natural de estos ecosistemas, afectando a su biodiversidad y estabilidad. En Colombia, el 65% de los residuos sólidos se gestionan de forma inadecuada, fluyen de la tierra a los ríos y acaban filtrándose a los océanos. De hecho, el 80% del plástico presente en los océanos del mundo tiene su origen en la tierra. Aquí es donde una solución biodegradable puede marcar la diferencia.

Hay diferentes tipos de plásticos biodegradables, con soluciones existentes como los plásticos compostables que funcionan en un entorno controlado, así como nuevas formas que pueden hacer frente al reto en el medio natural.  Además, se está desarrollando una nueva tecnología que ofrece dos escenarios de fin de vida, con reciclabilidad y biodegradabilidad trabajando juntas.

La utilización de la amplia gama de soluciones disponibles actualmente en el ámbito de los plásticos biodegradables y compostables desempeñará un papel fundamental en la preservación de los diversos ecosistemas de Colombia. 

Con esto en mente, es bueno ver que la nueva ley de plásticos de un solo uso de Colombia (Ley 2232 de 2022) reconoce los plásticos biodegradables como una alternativa sostenible al plástico convencional. Esto, sin duda, refuerza el liderazgo de Colombia en la región y en el mundo en la lucha colectiva contra la contaminación por plástico.  

Queda mucho camino por recorrer y muchas lecciones por aprender de otros países que están a la vanguardia en estos temas, pero sin duda los plásticos biodegradables y compostables pueden marcar una verdadera diferencia.

La tecnología de los plásticos biodegradables ha ganado una importante tracción y adopción en países de todo el mundo. En función de sus contextos nacionales, los distintos países han propuesto soluciones diferentes.

Por ejemplo, Italia ha invertido mucho en infraestructuras de compostaje industrial, por lo que tiene sentido adoptar esta solución en ese país. Malasia, por ejemplo, tiene altos índices de plástico filtrado, por lo que una tecnología que trabaje en el medio abierto sin crear microplásticos resulta eficaz en esa región. Muchos otros países han combinado las ventajas de las soluciones para vías de residuos gestionadas y no gestionadas a la hora de adoptar tecnologías.  

El mundo de hoy ha llegado a un punto de inflexión que obliga a los gobiernos y a la comunidad a replantearse grandes soluciones para deshacerse del plástico.