Aunque la manera más efectiva de llevar una vida saludable es mantener una dieta equilibrada y hacer ejercicio regularmente, los alimentos vegetales, sobre todo la proteína de soya, son ideales para lograrlo. Así lo afirma el doctor David Heber, presidente del Instituto Herbalife Nutrition.
La obesidad está ligada a muchos cuadros de salud potencialmente letales que incluyen enfermedades cardiacas, alta presión sanguínea y diabetes. Como Director Fundador del Centro de Nutrición Humana de la UCLA, ha dedicado décadas a la investigación del impacto de las proteínas vegetales, como la soya, en los pacientes, comparado con una dieta a base de proteínas animales.
Reemplazar carnes con alto contenido de grasa por proteína de soya y otras de orden vegetal, pueden tener como resultado control de peso, así como menores niveles de colesterol y presión sanguínea, aunque cambiar la dieta no signifique dejar de buscar atención médica o un tratamiento para estos cuadros. Reducir las calorías adicionales, grasa saturada, colesterol de las carnes, además de usar proteína de soya en batidos y alimentos nos puede ayudar a lograr y mantener un peso ideal que contribuirá al fortalecimiento del sistema inmune.
Pero, ¿cómo elegir una mejor fuente de proteína? A los consumidores les puede resultar difícil saber cuál es la mejor proteína vegetal en un momento en que buscan más de tipo vegetal, aún más cuando hay tantas opciones que incluyen arroz, legumbres, quinua, arvejas, soya y otros. La verdad es que no todas las proteínas de este tipo son iguales. A diferencia de otras proteínas vegetales, la soya es la única que se considera una proteína completa. Contiene los 21 aminoácidos esenciales, incluyendo nueve que el cuerpo no fabrica. Estos, provienen de los alimentos que consumimos, por lo tanto, los porotos de soya son una buena fuente de fibra, minerales y carbohidratos complejos.
La proteína de soya contiene fitonutrientes, llamados isoflavonas, que actúan como antioxidantes y alimentan las bacterias de la flora intestinal, los prebióticos. Algunos estudios indican que 25 gramos de proteína de soya por día, como parte de una dieta baja en grasas saturadas y colesterol, pueden reducir el riesgo de enfermedad cardiaca, teniendo en cuenta que las pruebas científicas totales no son concluyentes.
Mitos
Hace varios años hubo algunos informes que vinculaban a la soya con el cáncer de mama. Sin embargo, la investigación científica evidenció que no existen pruebas que vinculen su consumo con esta afección. Con base en varios estudios, la Sociedad Americana del Cáncer concluyó que ingerir soya o sus derivados no es perjudiciales, a la vez que existen numerosas pruebas de que los nutrientes de los alimentos con soya pueden reducir el riesgo de este tipo de cáncer.
Las investigaciones también negaron aquel mito que señalaba que su consumo podría ocasionar aumento de senos en los hombres. De hecho, el estudio indicó que esta no tiene efectos significativos sobre el género masculino, así como ningún impacto en los niveles de testosterona total, otro mito propio de este alimento.
Ahora, que comprenden lo bueno de la soya, existen muchas formas para incorporarla a la dieta. Los alimentos ricos en esta incluyen edamame -poroto de soya entero-, tofu, tempeh -soya fermentada- y, una forma cómoda para cuando tenemos poco tiempo, el batido nutricional es un suplemento perfecto.
La soya es una proteína ideal además de un aditivo esencial para llevar una dieta saludable. A medida que la comunidad médica sigue estudiando cómo proteger a las personas contra las infecciones virales actuales y del futuro -teniendo en cuenta el lavado frecuente de manos, uso de máscaras faciales y distanciamiento social-, una dieta equilibrada y un estilo de vida que incluya proteínas saludables como la soya y ejercicio regular pueden aportar a que nuestro cuerpo se mantenga fuerte y en forma.