Un tatuaje es una marca visible y permanente que se obtiene a través de la inyección de tinta en la dermis, una capa de la piel que se encuentra debajo de la epidermis, que es la más superficial. Como en el mundo, en Colombia es posible encontrar alternativas para todos los gustos y presupuestos; sin embargo, es fundamental conocer los cuidados, riesgos y cambios que se podrían experimentar.
Al respecto, Astrid Lorena Ruiz, médica dermatóloga clínica y estética adscrita a Colsanitas, afirma que “el tatuaje genera un trauma en la piel porque el pigmento se introduce con microinyecciones. Y como con cualquier otro cuerpo extraño que entre en el organismo, puede haber reacciones. La piel reacciona primero con un proceso inflamatorio, derivado de esa inflamación hay dolor, enrojecimiento y posteriormente la formación de costra”.
Es importante tener en cuenta que, si la tinta alcanza una capa más profunda que la dermis, esto puede ocasionar dolor, eventualmente infecciones o puede hacer que los trazos del diseño del tatuaje pierdan definición. De ahí la importancia de buscar a alguien experto en el tema.
A continuación, junto con la doctora Ruiz, se resalta lo que se debe conocer antes de hacerse un tatuaje:
1. ¿Cómo se debe cuidar la cicatrización del tatuaje? En este aspecto se deberán seguir las instrucciones del tatuador en cuanto al tiempo que se debe mantener cubierto y alejado del sol, cuándo lavarlo y con qué productos. La doctora Ruiz precisa, además, que hay que mantener una adecuada hidratación, cuidar la piel del sol con protectores solares SPF 50 o más.
2. ¿Cuáles son las posibles reacciones adversas? Puede haber reacciones como alergias al pigmento o cicatrices granulomatosas conocidas como dermatitis granulomatosa o sarcoidosis. Adicionalmente, dado que se introduce un cuerpo extraño, el sistema inmunológico podría producir granulomas, es decir, células inmunológicas acumuladas en la piel del tatuaje.
“Aunque estas complicaciones son raras, existen y aparecen en el mediano y largo plazo. Una alergia podría aparecer en semanas. La aparición de queloides puede tomar meses. A corto plazo puede haber infecciones agudas, en caso de contaminación. Aunque también hay complicaciones infecciosas a largo plazo que se desarrollan en meses, muy lentamente. Y esas son más complicadas”, afirmó Ruiz.
3. ¿Se pueden prevenir esas reacciones? Lo principal es que el lugar en el que se realice el tatuaje cuente con las medidas de asepsia y antisepsia necesarias, que el tatuador utilice guantes, agujas nuevas y estériles e implemente antibacteriales para desinfectar todo antes de empezar. Los usuarios deben percatarse de que se sigan estas medidas antes de permitir que se inicie con el proceso de tatuado.
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No seguir estas recomendaciones puede ocasionar que se contraigan infecciones cutáneas con bacterias o virus. Por ello es importante ser precavidos ante un procedimiento de este tipo.
4. ¿Qué pasa cuando envejece la piel? El envejecimiento de la piel es un proceso completamente natural y, por obvias razones, afecta el tatuaje. Con el tiempo esto ocasiona que se pierda color y definición. Para ello, lo recomendable es que el diseño no sea muy pequeño para que los detalles continúen siendo legibles en el mediano plazo.
5. ¿Cómo se puede borrar? Actualmente existen algunas opciones para borrar los tatuajes como el uso de una luz pulsante de láser sobre la piel por un nanosegundo; lo que esto hace es romper las moléculas del pigmento. Aunque antes este procedimiento dejaba cicatrices, hoy, gracias a los avances, los pronósticos son mejores. Sin embargo, es esencial conocer que los resultados dependen de diversos factores como si el tatuaje lo hizo un profesional, la técnica que se utilizó, la tinta usada, el tamaño del diseño y los colores elegidos. Frente a este último punto, tenga en cuenta que la tinta negra se puede borrar más fácilmente que las de color azul, amarillo, verde y rojo.
6. ¿Sufrir de enfermedades de la piel podría afectar un tatuaje? Existen algunas patologías como la dermatitis atópica, el lupus o la psoriasis, que afectan el sistema inmune y una parte de este sistema es específico para la piel, según menciona la doctora Ruiz. En las personas que las padecen hay un riesgo mayor de complicación en la realización de un tatuaje. Si alguien decide hacerlo debe entender que, aunque podría salir bien, también podría salir mal.