Tras charla de Biden, Putin pidió prolongar el acuerdo New Start | El Nuevo Siglo
A favor de “una normalización de las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, dada la particular responsabilidad (de ambos Estados) en el mantenimiento de la seguridad y la estabilidad del mundo” se mostró Vladimir Putin
Foto archivo Europa press
Martes, 26 de Enero de 2021
Redacción internacional con AFP

UN PRIMER paso para la “normalización” de relaciones entre Rusia y Estados Unidos dio ayer el presidente Vladimir Putin, al presentar un  proyecto de ley que prevé prolongar 5 años el acuerdo rusoestadounidense New Start sobre la limitación de armamento nuclear, que expira el 5 de febrero.

Así lo informó la Cámara baja del Parlamento ruso en su sitio de internet donde señala que el presidente  Putin presentó un "El acuerdo prevé la posibilidad de prolongarlo por un periodo que vaya hasta cinco años, si Rusia y Estados Unidos toman la decisión (...) En enero de 2021, un acuerdo de principio entre las partes se logró para una prolongación de cinco años".

La noticia se conoció minutos después de que el mandatario ruso sostuviera una larga charla telefónica con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden,  y que versó según información oficial de la Casa Blanca en temas de común interés como el conflicto israelo-palestino, el posible retorno de EU al acuerdo nuclear internacional con Irán  y la situación del detenido opositor Navalni.

Al término de su entrevista telefónica, Putin se mostró a favor de “una normalización de las relaciones entre Rusia y Estados Unidos que respondería a los intereses de ambos países y también de toda la comunidad internacional, dada la particular responsabilidad (de ambos Estados) en el mantenimiento de la seguridad y la estabilidad del mundo”.

Por su parte la Casa Blanca, a través de su portavoz, Jen Psaki,  indicó que el presidente Biden expresó a su homólogo ruso su apoyo a Ucrania frente a la "agresión" de Moscú y su preocupación por el "envenenamiento" del opositor ruso Alexéi Navalni.

Navalni fue detenido el 17 de enero a su retorno a Moscú después de haber pasado más de cinco meses en Alemania recuperándose de un cuadro que denunció como producto de un envenenamiento ejecutado por los servicios rusos por orden del presidente, algo que el Kremlin niega. 

Ayer los países del G7 condenaron su detención "por motivos políticos" y pidieron su "liberación inmediata e incondicional", así como la de sus partidarios detenidos el sábado durante manifestaciones en toda Rusia. 

Biden también se refirió al "fuerte compromiso" de Washington con la soberanía ucraniana frente a la "continua agresión de Rusia".

Ambos líderes también abordaron temas como la presunta interferencia de Rusia en las elecciones estadounidenses de 2020 y los reportes de que Moscú entrega recompensas a los talibanes por matar soldados estadounidenses en Afganistán. 

"Su intención era dejar claro que Estados Unidos actuará con firmeza en defensa de nuestros intereses nacionales, en respuesta a acciones malignas de parte de Rusia", concluyó la funcionaria. 

Otro tema que abordaron los mandatarios fue el acuerdo nuclear internacional firmado con Irán. Rusia pidió a Biden que se reintegre primero al acuerdo, para así salvarlo y garantizar su respeto por parte de Teherán.

En 2015, Irán y el llamado Grupo de los Seis (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania) firmaron en Viena un plan de acción global común para intentar resolver la cuestión nuclear iraní tras 12 años de tensiones.

Sin embargo, el acuerdo corrió el riesgo de hacerse añicos después de que el expresidente Donald Trump decidiera la salida de su país en 2018 y el restablecimiento de sanciones estadounidenses con Irán, que el acuerdo había permitido levantar.

Pero tanto Washington como Teherán exigen a la otra parte que dé el primer paso para rescatar el acuerdo, algo considerado prioritario ahora por las grandes potencias tras la salida de Donald Trump de la Casa Blanca

Con motivo de un viaje ayer a Moscú el ministro iraní de Exteriores, Mohammad Javad Zarif, logró el apoyo de Rusia, país aliado de Irán. 

De otra parte se informó que Rusia propuso en la ONU una conferencia ministerial internacional en la primavera o en el verano boreal para abordar el conflicto israelo-palestino, con una docena de participantes, mientras Estados Unidos prometió de su parte reflotar las relaciones con los palestinos.